Senador y Maestra Jedi

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Ben miró como todos aplaudían, había dado un discurso que para muchos habia sido el mejor que habían escuchado todos los senadores y el canciller, se sentía tan orgulloso, quien lo diría su abuela Padmé amígdala y su madre Leia Organa estarían orgullosas de él, en el hombre que se había convertido, la plataforma en la que estaba comenzó a moverse hacía atrás, ahora era senador de Naboo como su abuela antes de él, la reunión acabó,  Ben miró detrás de él y la miró, la maestra Jedi que había sido Padawan de su tío, estaba parada esperando a que él decidiera salir de ahí.

-Senador-. Dijo ella mirándole, Ben se acercó a ella.

-Maestra Jedi-. Dijo él serio. -Hace mucho que no nos veíamos-. Dijo mirándola, ella estaba seria algo que nunca lo había visto.

-Diez años-. Dijo ella sonrojandose por el intercambio de miradas, su amor era imposible, ella era una Jedi y el un reciente nombrado Senador sería un drama total si Luke Skywalker se daba cuenta que ellos se amaban en secrero ya que él solo envió a Rey para protegerlo.

-Diez años en los que cambiaste mucho-. Dijo él pues la recordaba como una niña que apenas empezaría su entrenamiento pero ahora era toda una maestra.

-No tanto como usted-. Dijo ella pues ella lo recordaba con granos en la cara, cabello corto y muchísimos berrinches todo un adolescente.

-Me gustaría saber cómo te fue con Skywalker-. Dijo el cruzándose de brazos para luego caminar a la salida del senado.

-Pues el maestro Skywalker era estricto pero fue de gran ayuda para que pudiera comprender un poco más de la fuerza-. Dijo ella caminando detrás de él, bajaron unas escaleras para llegar al piso de entrada.

-Me lo imagino, lo de estricto, él siempre lo fue cuando yo estaba con él-. Dijo Ben confesando, Ben se había criado durante diez años con su tío Luke que este aprovechó para enseñarle los caminos de la fuerza y a crear su propio sable de luz, cuando cumplió los diecinueve Ben se alejó para comenzar una vida de política junto a su madre.

-Estudio con él la fuerza y sus caminos?-. Preguntó Rey interesada.

-Incluso me enseñó a crear mi propio sable de luz-. Dijo Ben moviendo un poco su capa negra para que la Jedi viera su sable de luz ella lo miró sorprendida.

-Me impresiona Senador-. Dijo ella mirándolo, Ben comenzó a caminar a la salida, ambos salieron y pidieron un taxi para que los llevara al departamento de él.

El viaje fue rápido y Rey se maravilló por la entrada, había siglos en forma de C que rodeaban un pequeño lugar de hoguera, todo era bastante elegante.

-Este era el departamento de mi abuela-. Dijo Ben mirando como la chica miraba todo con sorpresa.

-Es muy hermoso-. Dijo Rey sonriendo, Ben. Camino a la entrada dejando a la joven sola, la servidumbre le dio la bienvenida, a los segundos entró Rey.

-Bien Rey que quieres hacer?-. Preguntó Ben sentándose en un sillón azul rey.

-Me gustaría primero ver sus defensas ya que como es un nuevo senador usted tendrá que tener una buena seguridad-. Dijo Rey mirandolo sería el joven sonrió de lado.

-Teniendote a ti es tener una buena seguridad-. Dijo Ben coqueto, Rey intentó no sonrojarse. -Bueno-. Ben miró a un hombre que se acercó y él le habló luego miró a Rey. -Él te llevará-. Dijo Ben, Rey hizo una reverencia y fue con él hombre.

La noche había caído y los edificios de Coruscant lo hacían verse hermoso, Rey miró desde el balcón a lo lejos el edificio donde antes se ubicaba el consejo Jedi, estaba segura que era un lugar abandonado y lúgubre tal vez con solo entrar ella sentiría su mundo moverse, su Psicometría• no le ayudaría mucho porque la estaría llevando a esa fecha y vería como los clontrooper asesinaban a los Jedis, sintió a alguien detrás y se giró para ver al Senador que estaba recargado en el arco.

-Te vez hermosa-. Dijo él y Rey intentó de nuevo no sonrojarse, Ben llevaba una camisa gris y unos pantalones negros, en su cintura llevaba su sable de luz.

-Senador, sabe que no podemos hacer esto, el amor no es para los Jedis-. Dijo ella mirándolo apenada.

-Nadie tiene que saber, no Luke, no mi madre, no el canciller-. Dijo él acercándose a ella.

-Senador..

-Deja de llamarme Senador, llámame Ben-. Dijo él un poco irritado de que le llamara senador cada cinco segundos, tomó la cintura de la chica.

-Ben yo, no podemos si alguien se diera cuenta yo sería la que saldría perdiendo-. Dijo Rey preocupada, pues le quitarían el rango de maestra Jedi y le retirarían su sable de luz.

-Rey, te amo-. Dijo él mirando los ojos de la chica.

-Y yo te amo a ti Ben-. Dijo ella mirandolo a los ojos, su mirada calló sus labios. -Pero...

-No pienses en nadie, estamos tu y yo-. Dijo Ben y ella lo pensó, no sería la única Jedi que tuviera un amorío, el abuelo de Ben se había casado en secreto con la Senadora Padme y aunque muchos no se dieron cuenta los que si solo lo dejaron pasar.

-Nunca vas a estar solo-. Dijo ella pasando sus manos sobre el cabello de la chico.

-Ni tu tampoco-. Dijo él y ella lo besó, no le importaría lo que le dijeran ella amaba a Ben desde la primera vez que se miraron se dieron cuenta que estaban destinados a estar juntos, que la fuerza los había conectado.



•Psicometría: es una habilidad que muchos de los Jedis puedan poseer solo aquellos en el que la fuerza sea intensa, si el Jedi que la tenga llega a tocar un objeto puede ver y escuchar  lo que vivió ese objeto un ejemplo es el de Rey en el episodio 7 cuando su Psicometría le mostró los escenarios en los que había estado el sable o otro ejemplo es cuando Cal Kestis tomó el sable de la segunda hermana, vivió y escuchó por todo lo que había pasado ella desde que fue padawan de Cere hasta ser convertida en la Segunda Hermana, el concepto de Psicometría sigue siendo un poco confuso en el canon actual.

One-shot (Reylo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora