Sin Palabras 《Elsanna》

Capítulo III

Elsa ya estaba cansada de estar parada posando junto con la naturaleza del lugar.
Anna capturaba cada movimiento que hacía la rubia platinada.

La mayor ya exhausta se movió de los árboles secos para acercarse a la pelirroja y darle un pequeño golpe que no le hacían ni el mínimo daño.

—¡Ya Elsa, eres una tonta! –Anna carcajeó, soltando su cámara para que terminara colgada alrededor de su cuello pudiendo así empujar ligeramente a la mayor en modo de broma. –Poniendonos serias, te agradezco mucho que aceptaras ser mi modelo para las fotos.

Anna había estado preguntandole a Elsa toda la tarde para que ella sea su modelo para sus fotos escolares. Elsa se apenó, negando y atreviendose a escribir en su celular.
"No soy para nada linda, Anna. Arruinaré tus fotos"
Anna le armó el sermón de su vida al escuchar estas tontas palabras.
Luego de varias suplicas Elsa aceptó.

—Unas cuantas tomas más y descansamos, ¿te parece? –Anna le dedicó una sonrisa tan radiante que era imposible que Elsa se negara.

Corrió de nuevo a su lugar, agarrando de nuevo la cámara para capturar a Elsa.
—Sé natural, y muevete un poco hacia la izquierda. ¡Perfecto! –fotografió una última vez a Elsa.

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—¿Nos sentamos aquí? –dijo la pelirroja señalando un árbol que les proporcionaba una sombra perfecta para ese soleado día.
La mayor asintió dejándose caer a un lado de árbol viendo como Anna imitaba su acción.

—¿Sabes?... quisiera saber que hay detrás de tanto silencio...–dijo Anna en voz baja con la vista puesta en el césped. –luego de unos minutos suspiró y trató de cambiar el rumbo de la conversación.
—A veces mis clases me matan, creo que elegí una carrera más difícil de lo que puedo manejar...–hablaba Anna mientras observaba las expresiones de la mayor. –Me gustaría ir directo al grano y crear diseños y conjuntos , pero el profesor dice que hay que "entender el mundo". –dijo lo último imitando la voz de un señor. –luego la tarea de tomar fotos a la naturaleza... y bueno luego tenía que buscar alguna modelo que inspire mi colección, y te encontré a ti. –Anna dijo lo último con un peculiar brillo en los ojos.

Elsa ante aquella confesión se sorprendió, ella había aceptado ser la modelo de Anna pero no sabía para qué.
Hizo una seña para darse a entender que estaba muy halagada y agradecida con la pelirroja.

—Oye... ¿siempre fuiste muda? Perdón si ofende la pregunta...– siguió con la vista a Elsa que se encontraba escribiendo algo en su celular.

"Efecto pos-traumático. Eso hace que yo no pueda hablar. Cosas del pasado"

Anna sonrío levemente por el simple hecho de creer que la menor algún día llegaría a hablar.

—¿Puedes hablar? O sea... digo, ¿llegarás a hablar? Mira que ya me estoy emocionando...

"No lo creo. 14 años sin hablar son muchos y creo que serán más."

Sus labios formaron un pequeño puchero.

—Lástima... yo quería saber si tu voz era igual de linda... –dijo en un susurro.