Perfectly out of key

Capítulo 8: Slip the noose

"Well, loneliness is hell and you're alone but I can tell you that it's everything you need because it brought you back to me", The Maine

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Valentina se sentó en el sofá mirando a Juliana, que todavía estaba en el piano sin siquiera mirarla. "Lo siento, no quería interrumpirte" dijo la castaña tratando de sonar sincera. "Tienes una voz tan poderosa, Juls. Es una pena que no quieras ser la cantante principal de la banda o incluso ser solista".

"¿No te gusta la voz de John?" Preguntó la chica de cabello oscuro unos momentos después, parándose de donde estaba sentada y caminando hacia la otra chica. "No es lo que dije. John tiene una gran voz y obviamente tiene esta energía que un artista debería tener. Pero tú..." Ella permaneció en silencio por un rato, buscando las palabras correctas. "¿Qué?" Insistió Juliana. "Eres pura emoción. Y eso te hace diferente, especial". La otra chica sonrió con timidez, y Valentina podía decir que sus mejillas se sonrojaron.

"Gracias. Eso en realidad significa mucho. Pero el centro del escenario no es para mí. Estoy más que feliz de solo escribir las canciones y tocar el bajo. De todos modos, no respondiste mi pregunta", dijo Juliana ahora mirando directamente a Valentina, que le devolvió la mirada confundida. "¿Disfrutaste la canción?". "Lo hice" Ella respondió sonriendo.

"Bueno, ¿y si nos vamos a la cama? Tenemos que descansar para mañana. Juliana propuso poniéndose de pie y dirigiéndose al sofá, para ayudar a Valentina a levantarse. "Eso suena genial, ¿tu cama o la mía?", Preguntó Valentina juguetonamente, y Juliana se rió entre dientes. "Vamos" La chica de cabello oscuro levantó a la castaña y salieron del estudio.

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A la mañana siguiente, Valentina se despertó más tarde de lo habitual. Ella y Juliana habían acordado no hacer nada por la mañana, así que todos almorzarían juntos y luego practicarían un par de veces más y luego comenzarían a prepararse para el concierto.

Cuando bajó las escaleras, encontró a Juliana sentada en la mesa, mirando su taza de café luciendo extremadamente ansiosa. Valentina sintió que se le encogía el corazón al verla, porque sabía que a pesar de que habían tocado frente a la gente millones de veces mientras actuaban en las calles, esto era algo completamente nuevo para ellos y, por supuesto, se sentirían nerviosos.

"Buenos días" dijo la castaña mientras tomaba su asiento habitual y tomaba su taza para beber un café ella. Juliana apenas movió la cabeza como respuesta, lo cual era un gesto normal en ella. "¿Te sientes bien?" Preguntó Valentina, tratando de ocultar la sonrisa en su rostro.

"¿Qué? Sí, estoy bien", respondió Juliana casi de inmediato, tratando de concentrarse en su desayuno nuevamente. "Estás nerviosa" Esta vez no era una pregunta, pero aún así Juliana respondió rápidamente. "No lo estoy" Y esta vez la otra chica no ocultó su sonrisa.

"Está bien estarlo, Juliana. No tienes que fingir que eres fuerte todo el tiempo. He estado haciendo esto durante años y todavía me siento enferma antes de subir al escenario. Es normal". "Bueno, también he estado tocando en público por un tiempo, y nunca he sentido nerviosismo. Pero gracias por la charla motivacional". La chica de cabello oscuro respondió ahora un poco molesta, así que se levantó y tomó su plato y taza para lavarlos. Pero Valentina la detuvo antes de que pudiera irse.

"¡Oye! Juls, de verdad. No estoy diciendo esto para hacerte enojar ni nada, estoy nervioso también en este momento. De hecho, voy a hacer algunos ejercicios de respiración para calmarme y permanecer relajada. ¿Quieres unirte?" Valentina se mordió el labio como siempre lo hacía al tratar de convencer a alguien, y Juliana lo sabía pero no quería ceder esta vez. "Tengo mis propios métodos para concentrarme. Gracias".