House of the rising sun. (NCT Nakamoto Yuta) FINALIZADA

let me out.

Dio media vuelta para volver a casa, entró y cerró la puerta su invitado estaba sentado en el sofá.
-Annaisha, ¿Crees en el amor verdadero?

-¿a que va eso?

-a que, no existe, solo existe la unión por intereses comunes. Deberías de vernos de esa manera y quitar esa cara cada que me ves.

-¿como debería de verte?

-...no me digas que tu si estabas enamorada al principio... ¿Lo estabas?

-cállate, quiero estar sola. Saldré a correr antes de que sea noche.

-Iré contigo.

-No tienes que seguir quedando bien con alguien, mi padre se fue.

-Da igual tonta, si te pasa algo sería mi culpa. Así que vamos.

Ambos salieron, el aire era fresco y tenía un olor distinto era tarde pero no lo suficiente como para dormir, últimamente estaba teniendo problemas de sueño, empezó a trotar mientras Daisuke se recargo en la cerca de la casa a verla, cuando estuvo fuera de su vista se sintió más tranquila, alcanzó a ver una flor roja tan llamativa que era imposible no acercarse.
Una rosa tan bella... fresca tocó el tallo y se pinchó el dedo, se puso en cuclillas sintió el ambiente distinto, empezó una especie de brisa bastante helada, su piel se erizó rápidamente. Escuchó pasos en la tierra del suelo y alzó la vista, Yuta ya estaba a su lado se sintió temerosa por lo cual no se movió.
-no deberías tocar eso. -Se agachó de la misma manera que ella y le tomó el dedo que tenía una leve gota de sangre y metió éste a su boca lentamente lo retiró.
-Lo hermoso puede hacerte daño Annaisha.

-¿qué hacen?- Daisuke estaba tras ellos, ambos se levantaron y Annaisha estaba pálida.
Las manos de Yuta estaban heladas y su boca se sentía igual de fría.

-nada.- respondió ella rápidamente, Yuta tenía los ojos entreabiertos

-él es...- Daisuke señaló.

-soy Nakamoto Yuta, trabajo aquí durante las noches.- "con que eso era..." pensó Annaisha.

-De acuerdo Yuri.... Annaisha quise decir, deberías terminar en lo que estabas.

Se le puso la cara roja y dio media vuelta para siguió trotando, tenía coraje ni siquiera pudo evitar llamarla como a la otra mujer.
Daisuke volvió dentro de casa y Yuta observaba como iba corriendo alrededor de la casa como un hamster atrapado.
Volvió a la entrada luego de un rato y Yuta le miró fijamente - ¿él es de quien huyes tanto?

-No estoy huyendo de nadie.

-Claro, pero no te veo bien.

-estoy bien Yuta, hablemos más tarde.

Entró a casa con él detrás, Hitoshi estaba frente a Daisuke extendiendole un vaso de agua, no le dirigia la mirada. Solo tenía la mano extendida y dio un manotazo salpicando.

-¡eres un idiota mira lo que hiciste!- alzó la mano y Annaisha reacciono mucho antes que Yuta.

-¡hey! No puedes gritarle de esa manera.- estaba ya al frente suyo.

-están aquí para eso, trabajan aquí, les pagas por algo.

Hitoshi fue tras Yuta - lo siento tanto...

-es solo un niño Daisuke... Ya no te soporto no eres más que un colgado de lo que yo puedo darte.

-¿tú? Hayashi Annaisha que no se soporta ni a sí misma, deberías agradecer tener a alguien como yo aquí contigo, ¿que pasa? ¿Intentaras matarte de nuevo cuando veas que no soy solo tuyo? Me siento halagado de ser tu motivación... - Se levantó acercándose aun más ella - No te necesito, todo es un negocio.

Ella dio un paso atrás sintiéndose humillada por lo que dijo, se dio media vuelta avanzó de largo hacia la puerta tomó sus llaves y fue a su auto, abrió la puerta para subir. Al estar dentro encendió el motor, Yuta golpeó el cristal con los dedos y ella bajo la ventanilla.

-¿qué quieres?

-¿te vas?

-Que pregunta tan idiota.

Yuta negó y paso la lengua por su mejilla abultandola. - No debes conducir cuando estas molesta, uno no tiene control de sí mismo.

-como podrías saberlo.

-Lo sé mejor de lo que piensas....- pasó delante del coche y subió en el lado del copiloto - Iré contigo.

-¿por qué?

-porque quiero hacerlo, ¿no querías compañía?

-No estas obligado a ello.

-No estas obligandome, iré contigo y ya.

-Tu hermano...

-Puede manejar todo con mi madre.

-Bien.
Aceleró, la carretera era tan oscura, solitaria Annaisha no sabía exactamente a dónde iba, Yuta sin embargo conocía el camino.

-Hace mucho que no voy al pueblo.- Habló Yuta. -De verdad mucho...

-¿te gusta salir?

-No lo hago mucho pero me gusta.

-podrías mostrarme lugares.

-Lo haré... Sobre lo que paso, gracias por defender a mi hermano.

-No fue nada, tenía que hacerlo, no fue su culpa.

-Son asuntos extra a tu vida. No cualquiera se mete en cosas así.
Él parece una persona complicada.

-Lo es....

-Annaisha, tú eres buena persona, no deberías soportarlo.

-Ja, es que no puedo hacer nada.

-tienes un corazón puro, puedes buscar algo mejor.

-no estoy siquiera buscando a alguien.

-Aveces llega y ya.

-¿Sabes mucho de eso?

-No, pero te digo lo que creo...