Mi destino eres tú

Capítulo 25

"Flash Back 7 años atrás: noche de graduación"

El baile de graduación estaba en su apojeo los recién graduados la estaban rompiendo, por fin habían logrado su cometido graduarse de las Encinas. Los pasillos del instituto estaban totalmente vacíos, todos se encontraban en el gimnasio disfrutando de la música y de los últimos momentos con sus amigos y compañeros.

En los vestidores de chicas se encontraban Carla y Samuel follando, él estaba sentado en una de las bancas pegado a la pared mientras Carla lo montaba con bravura, el camarero solo gruñía de lo excitado que estaba mientras la sostenía de la cintura para ayudarla a moverse y trataba de mirarla a los ojos. La marquesita gemía, le encantaba sentirlo dentro de ella, pero trataba de hacer el menor contacto visual con el. Sabía que con solo mirarlo a los ojos volvería a perderse y ya no estaba preparada para eso.

Se repetía una y otra vez en su mente — solo estamos echando un polvo, él no siente nada por ti, El solo jugo contigo, no puedes permitirte sentir nada por el, mañana olvidaras todo esto y estarás viajando a tu nueva vida — Se lo decía una y otra vez para hacérselo creer.

— Carla — susurró a su oído Samuel, su respiración era demasiada agitada — mírame!!! —le suplico y solto un gruñido estaba apunto de correrse.

— No Samuel — respondió Carla con un hilo de voz agitado, al igual que él estaba apunto de terminar.

— Joder Carla!!! Que me mires!! — volvió a gruñir Samuel mientras tragaba saliva y la tomó de las mejillas obligándola a mirarlo.

— Que no!!! — insistió Carla pero sus ojos ya se habían chocado con los de el. En ese momento dejó de moverse y una presión en el pecho se apoderó de ella.

— Lo siento — dijo Samuel mirándola a los ojos y tragó saliva — enserio... lo siento — vio como Carla se quitaba de encima de el y empezaba a acomodar su ropa.

— Vete Samuel, quiero estar sola — dijo Carla dándole la espalda.

Samuel suspiró y entendió que una vez más lo había arruinado. El único y último momento en el que por fin habían podido estar juntos después de que ella lo había dejado, ya se había acabado.

Carla escuchó como Samuel salía del vestidor, seco algunas lágrimas, se miró al espejo, terminó de acomodar su ropa, retocó su maquillaje y suspiró decidida a disfrutar de su última noche en Madrid junto con sus amigos.

La marquesita caminaba con toda la calma del mundo recordando cada uno de los momentos que había vivido en el último curso. Cuando de repente sintió una presencia detrás de ella, se detuvo y se giró a buscar al ser que la seguía pero no vio a nadie. Trago saliva y prosiguió su camino, pero volvió a sentir que la seguían y se detuvo.

— Podemos hablar? — escuchó la voz de la persona que la seguía y sintió como sus vellos se ponían de punta — antes de que todo esto termine —

Carla trago saliva y se giró para enfrentarlo — Qué quieres Polo? — trato de ver si alguien se acercaba y podría auxiliarla.

— Solo quiero hacer las pases — se acercó a ella — por fin nos hemos graduado y no nos vamos a volver a ver. Mis madres tienen pensado que lo mejor para mi es irme del país —

Carla retrocedió unos pasos más, no quería tenerlo cerca — no tenemos nada que hablar Polo —

— Solo una oportunidad por favor — suplico.

Carla trago saliva y pensó que si por fin quería escapar de todo lo que le atormentaba y se iría a Nueva York para sentirse bien tenía que empezar solucionando las cosas con Polo, al fin de cuentas también había sido víctima de los errores que Marina había cometido.