Mi novio es una chica • Michaeng & 2yeon •

Capítulo 23: Eyes, Noes, Lips [Satzu]

— Mina.. despierta, por favor — Mina arrugó su nariz removiéndose de la cama — Mina...

— ¿Qué? — Preguntó abriendo levemente sus ojos por la molesta luz — ¿Sana? ¿Qué haces aquí?

— Tita me dejó pasar a tu habitación — Respondió — Necesitaba un abrazo tuyo, es por eso que vine temprano... lamento despertarte.

— ¿Qué pasó? — Preguntó Mina sentándose sobre la cama. Sana mantenía la mirada baja, lucía demacrada y triste — ¿Qué tienes? — Mina extendió sus brazos y Sana inmediatamente se lanzó sobre ella escondiendo su cara sobre el cuello.

— Mina t-tengo miedo... — Murmuró Sana sintiendo la presión de los brazos de Mina intensificarse — La vi... la vi otra vez después de tanto tiempo.

— ¿A quién? — Mina se preocupó al sentir las lágrimas de su amiga traspasar por encima de su pijama, su llanto la hacía ver tan vulnerable Mina no sabía que hacer ni que decir— Hey... tranquila, todo esta bien ¿quieres contarme que sucede? — Sana se separó del abrazo llevando las mangas de su abrigo directo a la cara para limpiar las lágrimas que escurrían sobre sus mejillas. 

— ¿Recuerdas cuando me conociste hace 3 años atrás? — Mina asintió atenta — Nunca te dije la razón por la que me fui de Japón... siempre evadí hablar sobre el tema porque era algo muy doloroso para mi y tú al final de todo me entendiste y no volviste a preguntarme sobre el tema.

— No entiendo Sana...

— Hoy quiero contarte... — Murmuró Sana cubriendo su rostro debido a la pena que le causaba llorar tanto — Por favor no me juzgues... cometí muchos errores en el pasado pero en todo éste tiempo he aprendido a madurar y a darme cuenta de que hice cosas muy estúpidas...

(Nota: Cada pareja tiene una canción, en éste caso, la canción del Satzu es "Eyes, Noes, Lips" de Taeyang).

✖ FLASHBACK ✖

Amor es entregarte sin condiciones ni reservas, es darlo todo sin esperar nada a cambio... es demostrar día a día lo que sientes por esa persona especial que hace mejores tus días.

Eso y más era lo que Sana sentía por Tzuyu, un inmenso amor.

Sana y Tzuyu no se habían conocido en las mejores condiciones. Ambas se habían quedado atrapadas en un ascensor, para ser exactas justo en un octavo piso.

En el momento en que Sana dejó de sentir el movimiento del ascensor, pegó su espalda al borde de la pared, ella siempre había padecido de claustrofobia. Su respiración comenzó a tornarse irregular a la misma vez que dificultosa, no se dio cuenta el momento en el que sus piernas empezaron a temblar mientras repetía una y otra vez la frase "No voy a salir de aquí".

Tzuyu por su parte al percatarse de ello, comenzó a presionar los botones del ascensor con nerviosismo al ver a Sana en ese estado.

Se asustó.

Sana estuvo a punto de desvanecerse sobre el piso de no haber sido por los brazos de Tzuyu que la acogieron repitiéndole varias veces al oído que todo estaría bien, que pronto saldrían de ahí. Sana cerró sus ojos aferrándose al cuerpo de Tzuyu, no le importaba que fuese una extraña, en ese momento solo no quería sentirse sola, tampoco quería abrir los ojos y descubrir que seguía atrapada en ese lugar, cuando eso pasaba Sana sentía que las paredes se cerraban a su alrededor. Trató de no pensar más en eso y se concentró en el agradable olor del perfume que desprendía la ropa de Tzuyu.