Irresistiblemente idiota © #1

Familia

Capítulo 53

¿Estas lista?-Preguntó Jake del otro lado de la puerta.

Si. Puedes pasar.- respondí mirándome en el espejo. Llevaba un vestido por encima de las rodillas, no tan corto, y unas zapatillas a juego con el; dejé mi cabello suelto.

Vaya, te ves preciosa.- dice Jake luego de entrar. Se veía hermoso, llevaba unos jeans algo oscuro, una chaqueta elegante con una camisa. Me distraje viéndolo que no me di cuenta cuando me toma de la cintura y me da un beso apasionado, me separé por falta de aire y porque después se nos iba a hacer tarde para ir a la casa de Margi.

¿Por qué?- preguntó Jake quejándose con un puchero de esos que te derriten.

Sé nos hace tarde, Jake.- le dije intentando librarme de él, pero era inútil, el muy idiota no me soltaba.

Vamos, uno más, te aseguro que no te pido un beso más.- dijo suplicándome. Era tan precioso, aún me derretía su voz.

Te ves como guapo hoy.-confesé. En realidad, el siempre sé ve guapo, pero hoy estaba más que guapo.

¡Vamos, ya eso lo sé! No me cambies el tema.- replicó. Enarqué una ceja, no puedo creer que aún tenga ese ego tan elevado.

Alice...- me miró en tono de advertencia.

Esta bien.- dije a regañadientes.- Pero conste que no volverás a pedirme un beso más, ¿eh?

De acuerdo.- ahora era él, el que respondía a regañadientes. Entonces me besó para que no siguiera hablando, les aseguro que antes de que se acabe esta historia, le voy a quitar a Jake esa costumbre de callarme con un beso, ¡no cambia!

Jake, ¿va a estar tu padre? - pregunté de camino a casa de la madre de Jake. Estaba nerviosa.

Si.- respondió Jake tomando mi mano.- No estés nerviosa, ellos son un amor, excepto Mara, pero sé que lo es en el fondo.

¿Por qué lo dices?- pregunté curiosa.

Ya lo verás, cariño.- me respondió besando el dorso de mi mano sin dejar de mirar para la carretera.

Así que... Will tiene dieciocho.- dije de lo más normal.

¿Cómo es que no has olvidado eso? No has estado pensando en eso todo este tiempo, ¿o si? - preguntó Jake. Yo amaba a Jake demasiado, jamás lo iba a dejar por alguien, y mucho menos por su hermano, pero me moría de ganas por conocerlo.

No, yo sólo... me acordé... Si, es eso.- dije. Sabía que no se lo creería, la idea era esa, que no se la creyera.

¿Por qué será que no te creo?- preguntó mirándome con detenimiento.

-Tu problema, bebé, tu problema.

Jake aparcó el carro en la entrada de la casa de su madre. Me tomó de la mano mientras nos acercábamos, mis nervios florecían cada vez más y más.

¿Lista?- preguntó Jake dándome un beso en los labios.

Eso creo.-sonrió.- espera, no se suponía que no me ibas a dar más...- Fui interrumpida por la puerta que se abrió en esos momentos, ¿Jake había tocado ya?

¡Mamá ya llegó Jake y una tipa rara! ¡Seguro viene a pedir limosna! ¡Yo me encargo de ella! - Gritó una chica de más o menos mi altura, tenía el cabello rojo en las puntas, y vestía demasiado negro para mi gusto, pero no podía negar que se veía genial. Creo que acabo de entender lo que me dijo Jake hace un momento.