El misterio de la chica de cabello Rosa

Capítulo 7.-Say My Name.

-¿Estas bien? -la pelirosa miró a su alrededor y se dió cuenta de que se encontraba todavía en el salón de matemáticas solo con la epcecion de que ahora no había nadie en el salón solo ella y Hansel.

-Si, estoy bien. -estiró sus brazos. -¿Hace cuanto pasó la clase?

-Hace un ratito... ¿Qué soñabas?

-Nada interesante.

-¿Segura? -la chica asintió.

-¿Dije algo?

-Si, dijiste: Te lo mereces. -trató de imitar la voz de la chica.

-¿Solo eso? -el chico asintió.

Las clases habían terminando ya todos los alumnos estaban saliendo de la secundaria para irse a sus casas.

-Nos vemos más tarde. -la chica asintió.

Lany caminó como de costumbre hacia su casa, llevaba puesto sus audifonos. Caminaba tranquilamente mientras escuchaba Say My Name de Bebe Rexha, J Balvin y David Guetta.

Luego de un par de cansiones y una buena caminada, la pelirosa llegó a casa encontrándose con su madre llorando.

La chica se acercó a su madre. -¿Qué sucedió?

-Andrés está muerto. -la chica abrió los ojos de par en par. Era una noticia que no esperaba, muchas veces había deseado la muerte de su hermano y hasta soñó con ella pero no pensó que al llegar a su casa le darían tal noticia.

-¿Como sucedió?

-Tu madre lo encontró con un cuchillo clavado en su pecho en medio de la piscina. -contestó su padre.

-¿Ya llamaron a la policía? -el hombre negó.

-Tu madre no quiso, la policía son unos inútiles que no pueden encontrar a Lucas, crees que podrán encontrar quien mató a Andrés.

-Pero... Mejor olvidenlo.

La chica subió a su cuarto. Todo era muy extraño para ella porque de repente todos sus hermanos estában muriendo. Se preguntaba si ella sería la siguiente en morir.

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Dos semanas después de la muerte de Andrés, todos en la casa seguian con su vida normal como siempre. El pequeño Lucas seguía si aparecer.

El timbre de la casa fue tocado y como siempre Kenia la sirvienta fue abrir la puerta. Tres policías estaban parados frente a ella.

-La señora Lucrecia Fernández de Martínez ¿se encuentra? -la sirvienta asintió.

-Pacen y tomen asiento mientras les busco a la señora.-los hombre asintieron.

Kenia fue a la biblioteca donde se encontraba su señora. Lucrecia estaba sentada en un sofá verde, con un libro en la mano.
En realidad no estaba leyendo solo pasaba las hojas mirando los dibujos que aparecían en cada hoja.

-Señora, hay unos policías en la sala esperándola. -la madre de la pelirosa asintió para luego pararse y dejar el libro donde estaba antes de que ella lo tomara. Caminó hacía la sala con Kenia tras ella.

-¿Qué desean? -habló de inmediato que llegó y vió a los policías.

-Vinimos a informarle que encontramos a su hijo Lucas. -Lucrecia se pasmó al escuchar eso. -¿Señora está bien? -preguntó el policía que le dió la noticia al ver como Lucrecia se quedaba paralizada sin decir nada.

-De seguro fue por la noticia. -dice la sirvienta viendo a Lucrecia. -Señora tome asiento iré por un vaso de agua. -Lucrecia se sentó mientras que su sirvienta fue por el vaso de agua.

-¿Donde está mi hijo? -logró articular la mujer.

-La mentablemente su hijo fue hallado enterrado en el llano del señor pisito. Al parecer su hijo fue enterrado vivo y debido a que no podía respirar murió asfixiado. -explicó el policía.

-¿Como aseguran que es mi hijo?

-Les hicimos pruebas y arrojaron que era su hijo señora... Lo siento mucho. -las lágrimas de Lucrecia no se hicieron de esperar por que ya estaban bajando de sus ojos como gotas de agua callendo del cielo.

Lany quien iba pasando por la sala se detuvo al ver a su madre llorando y a eso policía en su casa.

-¿Qué está sucediendo? -la pelirosa se quedó esperando que alguien le respondiera.

-Lucas... Está muerto. -contestó su madre.

La chica negó.-Lo encontraron enterrado. -el policía le informó a la pelirosa.

La chica subió a su habitación y se encerró en ésta, recordando a todos su hermano, las lágrimas bajaban por sus mejillas como agua por una ventana.

Todos esos sueños que tenía matando a sus hermanos se hicieron realidad, y ya no quería soñar así que iba a tratar de no dormir nunca aunque después pareciera una zombie por la ojeras.