Huída

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Siento mucho la tardanza. He Estado malilla con gripe y no me apetecía mucho escribir. Pero ya estoy de vuelta y con muchas ganas de seguir esta historia.

Inés iba en el AVE camino de Barcelona cuando se topo con la foto de Pablo y sintió que el mundo se le venía encima.

Se levantó tranquilamente y fue hacia el baño. Tardo un segundo desde que cerró la puerta en ponerse a llorar.

¿Cómo podía ser tan idiota? Se había pillado de una mujer con pareja. Con familia. Por Dios que tenía dos niños pequeños.

Pasó buena parte del trayecto llorando en el baño. Hasta que se sintió con fuerzas para salir y afrontar el resto del día con la coraza puesta.

El día fue agotador. Se había levantado a las seis para coger el primer AVE a Barcelona. Tenía que hacer millones de cosas. Ir al Parlament, reuniones, ir a su piso, o mejor dicho al piso de Xavi a recoger cosas.

Para cuando llegó al hotel, hacia varias horas que había anochecido y le dolía todo el cuerpo.

No había tenido tiempo de coger el móvil en todo el día, solo para coger llamadas urgentes del partido o de Albert.

Abrió whats app y vio que Irene le había escrito por la mañana.

-    Me gustaría hablar contigo de un par de cosas ¿podemos quedar esta noche?

Inés necesitaba alejarse de aquella mujer, por el bien de su salud mental.

-    Lo siento Irene, estoy en Barcelona.

Irene tardó menos de un minuto en contestar.

-    ¿Ha pasado algo? ¿Cómo es que estas en Barcelona?

-    No ha pasado nada. Tenía cosas que atender.

-    ¿Podemos quedar mañana?

-    No creo que vuelva hasta el lunes Irene

Era mentira, volvía el domingo, tenía el AVE comprado, pero no le apetecía nada ver a la madrileña.

-    ¿Me avisas cuando vuelvas por favor? Necesito contarte algo.

-    Claro.

¿Qué sería aquello que tenía que contarle? ¿Sería algo grave? A lo mejor se había peleado con Pablo.

No seas estúpida Inés, tienen una relación aparentemente idílica ¿Por qué iban a pelearse?

Por esa sonrisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora