Han pasado ya unos días, no he hablado nada con Anne, lo suficiente para aparentar buen rollo delante de cámaras. Todavía me duele lo que me dijo. Un juego se atrevió a decir... pues maldito juego, que sueño con ella todo el día, ya no sé si estoy dormida o despierta. Veo esos ojos en cada pared, creo que me estoy volviendo loca. No hablarle me afecta más de lo que yo pensaba.
Me fui a relajar un rato a la habitación la noche estaba cayendo. Abrí la puerta y justo con quien no quería encontrarme (o quizás si) pero no estaba sola.
Estaba intentando zafarse nuevamente del abrazo de Eli, que pesada era esta tia.
-Eli dejame ostias
-Anne va duerme conmigo, llevamos una semana aquí y has dormido con todos menos conmigo
-Que no me da la gana -gritó Anne
-Que te toree cualquier chulo sin encanto, que no me da la gana que te controle si por dentro estas gritando- canté la canción de Javy
Anne me lanzó una mirada de odio. Obviamente no era el momento de bromas. Pero yo no me hablaba con ella, no la iba a volver a salvar de Eli, pasaba.
Entonces entró Gerard.
-Eli, ¿no escuchas? Déjala ya -ordenó
Yo me tiré en mi cama, desconecte de la conversación. Estaba triste, Gerard había ocupado mi puesto. Parecía que yo ya no significará nada para Anne, ella seguía siendo mi Luna y yo simplemente una estrella más.
Rompí en llanto sin darme cuenta y rápidamente me tape con las sábanas. Escuché susurros a mi alrededor y a los pocos segundos un peso en mi cama acompañado de suaves caricias en mi espalda.
-Sshh, tranquila -la voz no era de mi princesa, era de Eli
Me destape, mire toda la habitación, no había nadie más, Anne se había ido con Gerard y Eli se había quedado, al final no iba a ser tan mala persona.
-Eli, gracias de verdad, pero prefiero estar sola -dije
-¿Segura?
-Segura -dije convincente
-Vale, pues me voy a mi cama, si necesitas algo me lo dices -sin decir nada más se fue a su cama
Se lo agradecí internamente y me tape de nuevo con las sábanas, ahogandome con mi propio llanto. Poco a poco la habitación se fue llenando, recibí un beso de buenas noches de Sam acompañado de un "mañana quiero una explicación". Todos estaban ya dormidos o hablando y yo me levante, no aguantaba más. Vi la habitación Bruno durmiendo con Maialen, Samantha con Flavio, Jesús con Nia y Gerard con Anne. Que asco todo. Me fije había una cama vacía que no debería estar vacía, Nick. Pobrecito, otra vez no le habían dejado dormir.
Salí intentando no hacer ruido. Llegue hasta el salón y busqué en el sofá a Nick pero solo estaban sus sabanas.
De repente un ruido sonó a mis espaldas, pegue un salto y me gire, estaba Nick muerto de risa al otro lado del cristal, en la terraza.
Entre con él.
-Joder Nick vaya susto me has dado
-Jajajajajaja ha sido buenísimo, la culpa es tuya ¿que haces despierta a estar horas?
-Anda que cotilla ¿y tú?
-Si ya lo sabes, en la habitación no me dejan dormir y el sofá es súper incómodo, pero tú siempre sueles dormir del tirón ¿te pasa algo?
-Mañana hablamos para que puedas dormir, ¿vale? No es justo que tengas que irte tú, la habitación es para dormir, los que queramos hablar deberíamos salir
-Eva... No me cambies de tema, ¿te pasa algo? Llevas unos días un poco rara, más apagada de lo normal
-No es nada Nick
-Yo sé que sí, y tiene que ver con Anne, estoy seguro, entiendo que no quieras contarmelo a mí, pero habla con alguien, te vendrá bien
-Es que, pf, Anne me ha hecho daño
-Que lo entiendo, no te escondas conmigo, os he visto alguna vez, me parece super bonito lo que teneis, no os voy a juzgar
-Bueno, lo que teníamos, para ella solo fue un juego
-¿Perdon? ¿Eso te ha dicho? JAJAJAJ
-Nick, no es gracioso
-Si es gracioso, Gerard me dijo hace dos días que no sabía que hacer que Anne estaba súper rayada que siempre estaba hablando de ti, que cuando él intentaba dar un paso más Anne se apartaba. Vamos que a Anne se la suda Gerard. Yo creo que te intenta dar celos
-Pero Nick, ¿tú eres tonto? Anne no haría eso, admitió que con Gerard todo sería más fácil
-El camino correcto no es el más fácil y Anne lo sabe muy en el fondo.
Me quedé callada, pensando en lo que habia dicho, él volvió a hablar.
-Eva, si me dejas darte un consejo, mi madre siempre me dice que antes de dormir me tomé 5 minutos y me olvidé de las cosas malas mientras agradezco por todas las buenas. Además no sé si tendré razón o no, pero mira quien se ha levantado dejando a Gerard solo para asegurarse de que estabas bien.
Mire hacía dentro de la academia y vi a Anne, fue conectar miradas y se fue a por un vaso de agua disimulando.
-Me voy a la habitación a dormir, que vaya bien -dijo sonriendo Nick
Él cogió sus sábanas, se despidió de Anne y se fue.
Yo poco a poco me fui acercando a Anne que estaba limpiando el vaso que había utilizado. No sé porque pero necesitaba hacerlo. La abrace por la espalda.
-Anne, yo... lo siento si me he equivocado, entiendo que no quieras tener una relación conmigo, pero de verdad, te necesito como amiga, como hermana, como lo que tu quieras pero no aguanto un día más sin ti.
En silencio se giró, quedándose a escasos 15 cm de mí.
-Eva, perdoname tú, no has sido un juego, no quiero a Gerard, te quiero a ti, y me da igual que vaya a ser más difícil, me da igual que nadie lo entienda, es imposible fijarse en las estrellas cuando la Luna brilla. Lo siento por todo, yo también echaba de menos esto. Te quiero Eva.
Dicho eso se lanzó a robarme un beso, yo se lo devolvi sonriendo en mitad. No sé cuanto tiempo estuvimos así, pero ya se me estaban cansando las piernas. Anne lo notó y me subió a la encimera para seguir besandome. Noté como la temperatura empezaba a subir.
-Anne, vámonos a dormir mejor -sugerí
-Si, vale, ve tú, yo me doy una ducha de agua fría y voy contigo -dijo riendo
-Oye no... Lo siento -dije
-Ay Eva, no seas tonta, que es broma, va vamos que yo también tengo sueño -dijo cogiendome por la espalda mientras yo ataba mis piernas en su cintura
-Parece que el fitness esta haciendo su efecto eh -dije riendo
Me dió un beso en el cuello y en silencio entramos a la habitación. Me dejó en mi cama y se tumbo a mi lado abrazandome
-¿Y Gerard? -pregunté
-Que duerma solo, yo estoy empezando a hacer más caso al corazón y me pide que me quedé contigo.
Me beso en la frente y así abrazadas nos dormimos, olvidando completamente los últimos días, recuperando nuestra felicidad.
