Estas son pequeñas historias de jugadores de NFL tanto Quaterback's como defensivos, receptores y runing back, etc espero les gusten. La mayoría de mis protagonistas son fotógrafas, por fa tenganme compasión.
+🔞 por advertencia.
Estaba ya en las últimas en las horas de clases de la Universidad y ya no quiero volver más, como dice mi mamá "Ya son las últimas, hechale ganas mija". Y estoy haciéndolo. Todo las personas se quejan por mi cara de chucho que camino siempre y no es mi culpa si todos, bueno la mayoría me caen mal -.-
Estaba en el receso y unos tontos que juegan fútbol lanzaron el balón hacia la mesa donde estaba con mi amiga que no es nada parecida a mi.
Yo soy una chica de 23 años, que estudia y esta terminando la carrera de Ingeniería Mecánica, una carrera universitaria para hombres según muchos. Tengo tatuajes en mi cuello, brazos y piernas, soy la mujer que rompe esquemas y hace ver distintas a las mujeres.
Volviendo a lo del balón, me levanté furiosa de mi lugar y con mi peor cara mire a los imbéciles que lo lanzaron, sólo reían, tome el balón y camine a donde estaban.
- Quien fue- dije ya cuando llegue donde estaban.
- Fui yo- dijo uno con mucho valor, valor que no le va servir de nada, los demás solo sonreían.
Tome el balón y se lo lance en la cara a uno de ellos, seguido de un golpe en el rostro al segundo, subí mis mangas de la chaqueta que traía puesta. Y me lancé encima del que fue el causante del pequeño accidente, proporcione pequeños, que digas pequeños, grandes golpes con puños cerrados en su cara de niñita.
Uno de sus amigos me tomo de la coleta y me gire para dar unos puñetazos en sus costillas.
Creo que olvide mencionar que iba al gimnasio.
Y por último les regale unas cuantas patadas a cada uno. Volví a recoger mi cabello y salí caminando victoriosa con mi amiga, que es muy amable por cierto.
Vale más que era hora de salida y me dirigí a la salida lo más rápido que pude. Y empecé a caminar hasta que un auto se detuvo.
- A donde vas con tanta prisa- dijo T.j. desde el auto- vamos sube- me dijo y subí.
- A donde ibas- dije quitando mi mochila.
- siempre vengo a recogerte amor- dijo tomando mi mano y dejo un beso en ella.
- Si, si, si es verdad- recordé que siempre esperaba por mi en la salida.
- Te peleaste hoy también cierto- mencionó sin apartar la mirada del camino- mira esos nudillos- y no respondí nada y siguió hablando.
- D.J. vino a vernos y vino con nuestro sobrino- sonrió.
- Me encanta, es muy lindo- sonreí recordando como hago llorar al pequeño sobrino de T.J.
- Ya no lo hagas llorar mucho- me dijo sonriendo.
- También lo hago reír- frunci el seño fingiendo molestia.
- El te ama, creo que por éso J.J no le gusta que estés con el- río y hice lo mismo.
- J.J es un envidioso- me reí- sabe el poder que tengo sobre los bebés, yo soy la tía favorita- reí por mi comentario.
- Desde que llegaste si- dijo T.J.
En todo el camino hablamos de cosas sin sentido y sobre mi graduación, por lo que estoy emocionada, no se porque elegí una carrera tan larga.
Cuando llegamos a casa lo primero que hizo fue a buscar a su pequeño sobrino, en cambio yo fui a dejar mi mochila a mi habitación, cuando fui al me lo encontré en sus brazos.
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- Vaya- dije llamando su atención- serías un buen padre, pero aún no es tiempo amigo- di pequeños golpecitos en su hombro.
El resto de la tarde fue tranquila y agradable, aunque sería mejor si J.J estuviera acá. Me gusta que los 3 hermanos se junten ya que no siempre están juntos.
Tal vez piense en hijos en un futuro, pero no en mi mejor etapa, a mis 23 años quiero otras cosas, aunque si de casualidad quedará embarazada, pues ni modo no hay que darle para atrás. Sería un buen padre, T.J. Es un gran hombre literalmente.
