Historia Rusger (1/4)

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Narra Alemania

Me desperté con un terrible dolor de cabeza y mucho pero mucho mareo, al parecer bebimos demasiado anoche y se me pasó la copa, intente recordar lo último que pasó mientras agarraba mis lentes y me daba cuenta de que ya no estaba en la casa de México sino en la de Japón, en un principio pensé que era un error pero cuando talle mis ojos y vi de nuevo seguía ahí, recordé que Rusia había estado conmigo en la fiesta pero cuando revise a mi alrededor no había nadie, me levanté como pude y recordé que seguía con la ropa interior que Japón me dió en la fiesta así que para no salir así agarré una sábana y me enrrosque en ella.

Baje las escaleras caminando hacia la cocina pero no había nadie o eso creí hasta que me tope de cara con Imperio japonés pegándome el susto de mi vida.

I. Japonés: oh veo que ya despertaste

Alemania: ¿Cómo llegué aquí? ¿Dónde está Rusia? Y ¿Por qué está sin camisa? -pregunto mientras veía con un leve sonroje el cuerpo bien formado del japonés gracias a los entrenamientos-

I. Japonés: Rusia trajo a Japón ebrio anoche y los invite a quedarse a dormir, Rusia se tuvo que ir a no se dónde y estoy sin camisa por qué es mi casa

Alemania: perdón por molestar temprano pero-

I. Japonés: ¿Temprano? Son las 2 de la tarde

Alemania: ¿¡QUE?! ¡Yo tenía reunión a las 1:20pm! -sube en chinga las escaleras-

I. Japonés: ¡Hey! Rusia me dijo que te dijiera que el cancelo todas tus reuniones de este día y mañana

Alemania: -se detiene a mitad de las escaleras- ¿¡QUE?!

I. Japonés: Dijo que lo hizo para que descanses bien

Alemania: ¡Scheiße! (¡Mierda!)

I. Japonés: no pareces de buen humor

Alemania: ¡Ich werde ihn auf kleinen Bits töten, ich werde sie in Gewürze bringen und ich werde ihn von El-Hunden füttern! (¡Lo voy a matar en pedacitos, la bañaré en especias y le daré de comer de el a los perros!)

I. Japonés: mejor de dejo desatar tu irá, adiós -regresa a la cocina-

Narra omnipresente

Alemania maldijo a Rusia en todos los idiomas que el conocía y vaya que eran varios, después de cansarse de golpear a una pobre almohada (estaba acostado en la cama) se puso a pensar en que hacer mientras no tenía trabajo y se le ocurrió una buenísima idea, estaba enojado y todo pero decidió invitar a Rusia a una cita y posiblemente castigarlo por haber cancelado sus reuniones.

Alemania: -llamando a Rusia (rusia sé supone que está en su oficina del trabajo)-

Rusia: Hola habla Rusia ¿Quien habla?

Alemania: Primero ¿Por qué cancelaste mis reuniones? Y segundo ¿Estás ocupado esta noche mi amor?

Rusia: las cancele para que descanses, trabajar todo el tiempo es muy malo y no, no estoy acupado ¿Por qué corazón?

Alemania: ¿Podemos salir a comer está noche bebé? Cómo una cita

Rusia: me parece bien ¿A dónde quiere salir mi piraña?

Alemania: Está vez yo invito, paso por ti a las.... ¿8?

Rusia: bebé, hoy salgo a las 9

Alemania: ¿10:30?

Rusia: me parece bien, te veo en la noche, adiós piraña

Alemania: adiós mi tripalosky -cuelga el celular y suelta un suspiro típico de los enamorados-

I. Japonés: Que asco son muy melosos

Alemania: ¡AAAHH! -pega un brinco parándose en la cama dejando caer las sabanas- ¿¡Cuando se metió a mi cuarto?!

I. Japonés: primero, es mi cuarto estás en mi casa, segundo, esa ropa de encaje no te queda pero si fuera negro estaría mejor

Alemania: -se da cuenta que aún sigue en ropa interior- ¡N-No mire! -agarra rápidamente una sábana y se enrrosca mientras sus mejillas se pintaban de un rojo intenso- ¿N-No tiene r-ropa extra?

I. Japones: no, creo que japón solo usa ropa de chica pero te puedo buscar ropa mía que ya no me quedé -dijo mientras abría un ropero-

Alemania: por favor

I. Japonés: nada más regrésame que luego las uso de pijama -le dió un cambio de ropa al alemán y se retiró del cuarto- voy a ver si Japón tiene un pantalón o algo que te quede

Pasaron unos 4 minutos y Alemania salió del cuarto vistiendo nada más unos shorts que le quedaba muy corto y remarcaba demasiado sus caderas pero en especial su tracero y una camisa que le quedaba demasiado grande lo bueno es que está cubría su cintura, alemania no quería que nadie lo viera así pero era lo único que había.

En el comedor estaba la comida servida, Japón estaba medio muerto y con una terrible resaca que lo hacía parecer una mierda con patas y orejas de gato, imperio estaba tranquilo con los ojos cerrados creo que meditando mientras escuchaba los quejidos del menor.

Japón: no vuelvo a tomar así

Alemania: Espero que sea verdad y no una mentira

Japón: ¿Que haces aquí?

Alemania: tu padre nos invitó a quedarnos anoche -se sienta al lado de su amiga-

Japón: -mira de pies a cabeza a Alemania para luego limpiar un poco su nariz de la cual brotaba un poco de sangre- uke~ ( ͡° ͜ʖ ͡°)

I. Japonés: Japón, no

Alemania: ¿Que hay de comer? -pregunto con curiosidad ya que no había comido ninguno de los platos servidos en la mesa-

I. Japonés: Si no conoces nada te sugiero probar primero el Yakisoba o el Katsudon -dijo mientras acercaba unos platos al aleman-

___Después de la comida__

Japón: Alemania-san ya que no tienes nada que hacer ¿Te gustaría jugar conmigo?

Alemania: no, esos no son juegos Japón se trata de trata de putas pero yo como una

I. Japonés: Alemania

Alemania: ¿Eh? Mande

I. Japonés: ¿me puedes esperar en mi oficina? Tengo algo que hablar contigo



¿Que será lo que quiere el Sr. Imperio de Alemania?












( ͡° ͜ʖ ͡°)

Nuestro pequeño error [CANCELADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora