IV

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No fue una coincidencia que ambos se encontraran en medio del mar de gente, la gente los miro de reojo, podrían creer que es así, que solo es un encuentro hecho por la casualidad, sin embargo no lo es.

Phantom Thief había venido a recoger a Dynamight al aeropuerto. Como de costumbre el pro héroe Dynamight mantuvo su entrecejo fruncido y sus labios formaron una línea recta que empujo hacia abajo en una mueca cuando Phantom Thief alzo la mano para saludarlo al pasar por seguridad.

Algunas miradas de la gente que paseaba por la terminal se posaron en ambos héroes antes de retomar, Dynamight hizo una mueca, mientras se trasladó a la banda donde una maleta con ruedas y una más pequeña bolsa de mano se encontraron a la vista.

—¡Yo! —Dynamight o mejor dicho Bakugo Katsuki quien se encontraba con su ropa de civil pudo sentir la sonrisa en su voz. Lo que hizo que su entrecejo se frunciera aún más, Monoma Neito siempre había sido un tipo molesto, y era por eso que los dos se encontraron en esa situación en especial. Bakugo tomo sus pertenencias, solo para ignorar al otro hombre y proseguir con su camino, años atrás el irrespeto por parte de Bakugo hubieran generado algún tipo de pelea, pero había pasado años de su última pelea, y Monoma era lo suficientemente inteligente como para saber que había una buena razón para que Bakugo Katsuki entre todas las personas le hubiera pedido que viniera.

Para su sorpresa Monoma no tuvo que caminar demasiado cuando los dos se adentraron en un viejo expendio de comida rápida que se encontraba al otro lado de la calle. La sorpresa en su mirada no cayó en ojos cerrados cuando Bakugo rodo los ojos.

—No es como si nos fuésemos a quedar mucho tiempo, así que supéralo.

Monoma giro su rostro a la derecha, un tanto indignado, no era como si nunca hubiese comido en un expendio de comida rápida, pero por el tipo de mensaje que Bakugo le había dejado creyó que habría algo más ahí, y el sutil pensamiento sobre que, su conversación seria en cualquier otro lugar menos en un restaurante con fachada de los años 80 y con la típica camarera que mascaba un chicle con mirada aburrida.

Monoma dejo de lado la delgada capa de polvo que se cernía sobre el lugar y se dirigió adentro cuando Bakugo se dejó caer en uno de los sillones familiares de cuero feo y desgastado.

A ojos de cualquier persona, Bakugo Katsuki parecería un delincuente, hay algo en esa mirada dura y ese semblante de comemierda que hace que cualquier persona cuerda sepa que es una mala idea acercarse al hombre que parece que te degollara vivo si derramas su maldita bebida. Y no ayudo en nada que estuviera mal sentado y sus maletas ocuparan parte de la mitad del asiento por lo que Monoma tuvo que sentarse en el sillón de enfrente.

Para sorpresa de Monoma, no había nadie más además de la mesera y el cocinero detrás de la ventanilla que se observa por detrás de la caja registradora. Monoma supuso que este debía ser un restaurante exclusivo, o al menos solo los pilotos y los que trabajan cerca de la aerolínea lo frecuentaban como para ver el lugar aún en pie a pesar de ser un desierto en ese momento.

Bakugo pudo haberlo hecho a conciencia, si algo había aprendido Monoma con el paso de los años tanto de UA como en el campo de trabajo era que a pesar de todo lo que representa Dynamight, el héroe debajo del antifaz piensa.

Sus movimientos siempre tienen una razón de ser como sus actos. El temperamento seguía ahí, pero había algo de sabiduría que con el paso del tiempo se va forjando en todos los héroes.

—¿Algo que deseen? —el silencio se rompió entre los dos cuando la mujer rechoncha que al parecer se llamaba Mikado por la placa que llevaba en el pecho, se colocó frente a ellos, en sus manos había una libreta y su voz salió de lo más cansada que alguna vez pudo oír en una persona, su mano derecha saco un lápiz de entre la cebolla que formo su cabello sujetado y pronto abrió la libreta tras pasar el pulgar que ensalivo previamente.

Ignición 【TodoBaku】【DabiBaku】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora