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Abrí los ojos, Levi seguía dormido a mi lado. Con cuidado me levanté hasta llegar al baño, donde me lave y llore de nuevo. Mi cuerpo se veía horrible.

Camine hasta llegar a la puerta de entrada, pero estaba cerrada, igual que ayer. Me senté en el sillón, pensando en que debía hacer ahora, en qué sería de mi vida ahora.

Después de unos minutos, escuché pasos apresurados. Levi apareció frente a mi con la respiración agitada, se sentó junto a mi y en seguida se calmo. Permaneció en silencio

-¿Podemos buscar ayuda?- Pregunté mientras abrazaba mis rodillas, sin mirarlo

-No necesitamos ayuda- Dijo apretando los puños- Ya te dije lo que necesito, nada más que eso

-Pero esto está mal, no puedo estar aquí para siempre- Estaba lo más calmado que podía

-Si puedes, yo te daré todo lo que necesitas- Entonces sentí sus manos sobre las mías, esperando que lo mirara- Solo déjame amarte, es todo lo que necesito

Me gire a verlo, estaba tan cerca de mi, casi podía besarlo.

Me rendí ante el

Asentí de manera ligera, sus labios se juntaron con los míos en un beso suave, me relaje por completo al primer suspiro. Sus manos me sujetaron con suavidad, hasta que logro recostarme en el sillón. Tomo mi rostro entre sus manos, sin moverlas de ahí, tan necesitado de mi boca.

No supe cuánto tiempo estuvimos así, solo que fue casi eterno. No me tocó más allá de mi rostro, solo me besaba y yo lo aceptaba. Cómo acepte muchas otras cosas, cómo acepte esto

-Solo me necesitas a mi- Susurró contra mi boca- Solo yo, nadie más que yo. Así como yo te necesito, todo de ti

Mientras me besaba, me di cuenta de una cosa.

Levi me había condicionado, a su toque, a su voz, a él

Mi cuerpo se movía como el quería, mi mente pensaba como el quería. Todo era como el quería, y sin darme cuenta, yo también empecé a quererlo, empecé a desearlo. Actuaba de manera automática para el. Sin darme cuenta, me volví su juguete personal

Cuando Levi tocó mi pierna, en seguida sentí exitacion, a pesar de que mi mente me decía que estaba mal, mi cuerpo reaccionaba a el, mi cuerpo lo quería con desesperación. Mi sentido se nublo, y solo quise más, más de el, más de sus caricias.

Mis caderas se movieron de manera automática, mi pene pedía su toque. El lo sabía muy bien, me había hecho así. Sus manos recorrieron mis piernas hasta llegar a mi trasero, hasta llegar a mi miembro. Lo toco de manera suave, justo como quería, jugo con el hasta hacer que me viniera en un grito ahogado.

Me levanto y me llevo de nuevo a la habitación, donde me desvistió lentamente, apreciando cada centímetro de mi cuerpo, adorando cada línea. Lleno de besos los lugares con marcas, mostrándose arrepentido. Me dilató lentamente, con caricias suaves, hasta que me abrí para el

No tarde mucho, mi cuerpo lo quería.

Cuando entro en mi, me aferre a su cuerpo, disfrute cada embestida y grite con cada empuje. Ame cada palabra que salía de su boca, lo mire a los ojos y le dije que lo amaba, como siempre hacía cada vez que lo miraba.

Mi cuerpo lleno de sudor lo recibía con placer, grite su nombre. Me derreti entre sus manos, el siguió embistiendo, hasta que por fin se vino, muy dentro de mi, con una sonrisa de satisfacción en los labios, su expresión mostrando claramente su sentir. De nuevo me había marcado

Entendí que no podía contra el, lo único que me quedaba era aceptarlo.

No fue tan difícil, ya lo estaba haciendo


-Regreso más tarde- Dijo Levi despiendose de mi- Traeré la cena

-Si cariño- Se inclinó y me dio un beso, después le sonreí- Te amo

-Te amo

Lo observé irse, como saco la llave de su pantalón y salió. Después el típico sonido de la cerradura. Cómo todos los días, desde hace dos semanas

De nuevo estaba en la sala, mirando la televisión, repitiendo programas, películas o series que ya había visto. Estaba incomunicado por completo, nadie sabía dónde estaba y que estaba haciendo.

Me levanté para ir al baño, me mire al espejo y solo suspiré. Las marcas de mordidas llenaban mi cuello, parte de mi pecho y mi entrepierna. Dedos alrededor de mis brazos y piernas, alrededor de mi cadera, algunos apenas visibles, otros recientes

Diferentes tonalidades me decoraban

Levi era adicto al sexo, y aunque quisiera negarme, mi cuerpo lo pedía también. A pesar de estar cansado, no podía resistir el sentir su cuerpo junto al mío. Y como cada mañana, cada vez que me quedaba solo, empezaba a llorar. Me sentía asqueroso, humillado e idiota, por permitir tantas cosas

Después de llorar, iba de nuevo a la puerta, donde intentaba abrirla con cualquier objeto que encontrara, ni si quiera podía empujar la puerta, tenía otra cerradura por fuera. La única opción era romperla, y yo no podía hacerlo, estaba demasiado débil físicamente. Cualquier esfuerzo me hacía cansarme demasiado, y después tenía que dormirme.

Comía de manera normal, dormía demasiadas horas, y aún así me sentía cansado.

Algo estaba mal conmigo, solo quería dormir. Solo dormir

ObsesivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora