Taehyung: parte 2

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Tres semanas han pasado ya y él sigue insistiendo.

- Lamento quedarme tanto tiempo en tu casa Jimin - dije algo avergonzada.

- No te disculpes, me encanta tenerte de compañía.

- Gracias, eres muy buen amigo Jimin - él me abrazó y me hizo sentir mejor.

Aún recibía mensajes y llamadas de Taehyung, era obvio.
Jimin algunas veces lo veía en la calle o en la agencia, pero siempre estaba deprimido. Si Tae preguntaba por mí, Jimin le decía que no sabía mucho o que hablaba muy pocas cosas conmigo.

En ciertas ocasiones me hacia sentir mal nuestra ruptura, no por el hecho de que se acostó con otra o por el largo tiempo que estuvimos juntos. No, no era por eso. Era porque en cierta forma me sentía con culpa, quizá debí oir su explicación de lo sucedido.
Ése triste día Tae olía no solo a perfume de mujer sino que también a alcohol, mucho más de lo normal y se veía más desconcentrado e ido que borracho.

Tal vez Taehyung no mentía. Él me amaba mucho y lo demostraba, no sólo a mí. Era cariñoso, me consentía algunas veces y era el mejor hombre del mundo, pero muchas parejas son así y terminan separandose por nuestro mismo problema. No podía estar segura de si él me engañó o no.

Pero al hablar con Jimin éstos días pienso más en el tema y en su justificación respecto a esto.
Taehyung había dicho que estaba consciente de todo en la fiesta a pesar de haber tomado hasta que habló con ésa tal Lia.

Me calentaba la cabeza pensando en ello día y noche.

- ¿Estas pensando en él? - Jimin interrumpió mis pensamientos al ponerse frente a mi rostro. Bastante cerca diría.

- Es inevitable...

- Tranquila, princesa. Aquí está Park Jimin para hacerte sentir mejor.

- ¿Ah sí? ¿Y cómo exactamente? - me reía por la forma tan segura en la que lo decía.

- Podríamos jugar - se acercó nuevamente a mi rostro - ¿Qué te gustaría hacer, pequeña?

- ¿Quieres jugar? - me puse un poco nerviosa por su cercanía y comentario, debo admitir que lo malinterpreté.

- Si, ¿no te gustaría? - Jimin tenía una mirada pícara y coqueta - Pervertida - susurró lo último en mi oído.

- N..no soy pervertida.

- ¿No? ¿Estás segura? - acortó el espacio que quedaba entre nosotros con un beso lleno de necesidad.
No sé por qué diablos correspondí, supongo que pensaba en Jimin como Taehyung. Era obvio que no podía sacarlo de mi mente y Park lo sabía perfectamente, pero aún así hizo ésto.

Luego de unos minutos se separó de mi para poder respirar - ¿Ya no piensas en él?

- Lamento decirte que si lo hago...

- ¿Al menos te sientes mejor? - Jimin hablaba naturalmente con su brazo alrededor de mis hombros.

- Creo que si... un poco.

- Bien, iré a la tienda por unas bebidas y comida. Si quieres coloca una película en lo que llego - su cambió me impresionó y él lo notó, porque me dió una sonrisa que nunca antes había visto. Era malvada y orgullosa.

- N..no, te acompañaré. Ya es tarde, vamos juntos - sin más que agregar, fuímos a la tienda.

Al entrar al lugar, Jimin fue por la comida y yo por las bebidas. Cuando nos encontramos, él tomó mi mano y luego me miró dulcemente.
Había un silencio, pero no era incómodo. De echo, era... acogedor.
Luego, tomados de las manos fuimos a pagar las cosas, pero...

- ¿Tn? - ambos nos dimos la vuelta hacia la persona que me llamó, y sí, era él.

- Tae... - automáticamente solté la mano de Jimin suavemente y miré a Taehyung con mis ojos llorosos.

- ¿Por eso ya no me contestas? - dirigió su mirada hacia Jimin - ¿es en serio Tn? ¿Jimin? Sabía que me odiabas, pero sólo han pasado tres semanas y ya me reemplazaste.

- Eso no es así y lo sabes.

- ¿Y por qué Jimin me mentía? Lo que más quería era saber sobre tí, pero supuestamente no hablabas mucho con él - nos miró a ambos con unos ojos llenos de furia y tristeza - pero ya veo que tal vez hasta te acostaste con él.

- Claro, como yo soy la que se acuesta con cualquiera en una fiesta, mientras su pareja lo espera preocupado - dije sarcásticamente y dejé las bebidas en las manos de Jimin y salí de la tienda molesta con Taehyung siguiéndome para terminar la discusión afuera - eres un idiota... - le dí la espalda y comencé a llorar - eres tan insensible con éste tema aún cuando sabes que me dolió..

- Mira Tn, necesitamos hablar de ésto correctamente - se puso frente a mí y limpió mis lágrimas - sé que en el fondo tu sabes que no te engañé y debemos hablar de ésto te guste o no. Necesito que me escuches y me creas, porque te amo y perderte me ha hecho muy mal...

Alejé sus manos de mi rostro y dí un paso atrás - Bien, te escucharé... - en ese momento Taehyung se volvió a acercar a mí, creo que con la intención de besarme pero Jimin interrumpió con una tos falsa, gracias a Dios. Mi dignidad iba a quedar totalmente en el suelo si ése beso ocurría tan pronto.

- Jimin, Tn y yo vamos a hablar, así que te la robaré un poco - Jimin me miró esperando que confirmara si eso era real o no, por lo que asentí.

- Bien, no hagas nada estúpido Taehyung.

- ¿Sabes qué? - se acercó a Jimin y le susurró algo que escuché perfectamente y que me puso nerviosa al instante - Quizá te la robe para toda la noche Jimin, así que no la esperes - No dijo más y fuímos a la casa que antes compartíamos. Caminamos hacia la sala y hablamos - Recuerdo que Lia se acercó a mí cuando salí del baño. Sabía sus intenciones, así que la ignoré, pero insistía en acercarse y cuando llegué a la barra de bebidas, ella seguía conmigo. Pedí tu favorito para que lo bebieras conmigo, pero ella me lo arrebató junto con mi bebida, me decía si quería jugar con ella y luego me pasó la bebida nuevamente - Tae hizo una pausa para suspirar y luego siguió - Negué ante su propuesta y tomé de mi bebida. Me sentí algo débil y ella me llevó hasta una habitación, empecé a llamarte pero mi voz casi no salía, después de eso me seguía dando bebidas hasta que me sentí muy ebrio y desorientado - Tae puso su mano sobre la mía, mientras sus ojos se cristalizaban - creí que eras tú... me dijo que no me retuviera y que gimiera tu nombre, mientras me desvestía. Estaba tan drogado y ebrio que fácilmente me hizo creer que eras tú con la que me acosté, o así fue hasta que llegamos a la casa y me hiciste recordar todo - Tae lloraba desconsoladamente y yo no me quedé atrás, lloraba silenciosamente - Por favor... créeme... - yo solo lo miraba sin decir nada, no sabía como reaccionar - dime algo - tomó mi rostro y al ver mis lágrimas, me abrazó - lo siento... lo siento mucho...

Él si me amaba y con sus lágrimas y dolor ésta vez me lo demostraba. Sabía que había algo más detrás de todo lo que pasó ése día.

Tae me seguía abrazando pero cada vez con más fuerza y más lágrimas - por favor, perdóname - nunca lo había visto de esa manera, casi suplicando - cuando te ví irte en el auto ése día... quería morir.. de verdad te habías ido...

- Ya, Tae... te creo, osito - lo abracé mientras dejaba besos en su cabeza que se apoyaba en mi pecho - por favor... d..dejemos ésto en el pasado - sentía mi corazón dolido como si lo apretaran. Aunque lo perdoné, en el fondo aún me dolía y a él también.

Cuando se calmó un poco me miró y ví su rostro rojo cual tomate. Su respiración era entrecortada y su mirada era dulce e inocente como la de un niño, me abrazó una vez más pero ésta vez agregó un beso. Correspondí felizmente.

Pero tuvimos que romper el beso por un momento para que Tae se calmara un poco, ya que aún no conseguía respirar bien. Luego de eso, el beso se reinició pero más salvaje. Taehyung tocaba mi pierna y me apegaba a su cuerpo cada vez más, levantaba mi blusa y acercaba mi rostro al suyo con deseo.
Él iba a continuar lo que ése día quedó pendiente.

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