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-¡Pelea, pelea, pelea!

Estaba caminando tranquilamente por las calles de Konoha y escuché gritos cerca de mi, no debería pero...

Corrí hasta donde estaba la multitud y me abrí paso para ver quienes estaban peleando.

-¿Naruto? -Pregunte al ver al rubio sobre un hombre dándole un puño tras otro.

-¡Dale con las 9 colas en la cara! -Grito un chico incitando a seguir la pelea.

-¡Golpealo Dalk!

-¡Hazle un rasengan en el pene! -Grito una chica mientras tomaba fotografías.

-¡_____! -Grito Hinata detrás mío, se la notaba agitada.

-¿Qué está ocurriendo aquí? -Le pregunté y puse una mueca de asco al ver como Naruto hacia que el chico coma pasto... literalmente.

-Estabamos comiendo en Ichiraku y pues cuando terminamos decidimos salir a caminar entonces nos cruzamos con ese hombre que comenzó a decirme cosas.

-¿Qué clase de cosas?

-Cosas... asquerosas, dijo que me haría 5 hijos y todo lo que le haría a mi cuerpo. -Dijo ella bajando la mirada.- Luego dijo que me lo merecía porque mi vestido es revelador, pero es el único que tengo, lo juro.

Suspire mientras la abrazaba, ella en verdad se sentía culpable.

-Ahora Naruto está en problemas por mi culpa.

-No es tu culpa, él es un animal que no sabe respetar a las mujeres, pero dudo que después de esto siga comportándose así.

Avance hasta mi amigo rubio  y noté que él ni siquiera estaba mirando en donde golpeaba, sólo daba golpe tras golpe en la cara de aquel hombre.

-¡Basta, Naruto! -Dije apartando al rubio del chico mientras todos soltaban un "Oow".

-Gracias. -Dijo el hombre lleno de sangre mientras se sentaba.

-Estas golpeandolo muy despacio. -Dije dándole una patada en la cara tirandolo al suelo nuevamente, la gente gritó emocionada.

Hice que se voltee y lo obligue a arrodillarse frente a Hinata mientras lo sostenía del cabello.

-¡Pídele perdón! -Le grite y él negó con la cabeza mientras reía.

-¿Crees que dejaré que una inútil mujer me haga esto? -Pregunto y al siguiente segundo me dio una patada en el estómago ¿Cómo había hecho? No lo sé.

Pronto noté como todos guardaban silencio, mire al hombre quien estaba desmayado a los pies de... Sasuke.

-¡Acabalo, Sasuke! -Grito una chica.

-¿Estas bien? -Me pregunto acercándose a mi con su Sharingan activado.

-Si, gracias. -Dije y sin mirarlo a los ojos, me intimidaba su Sharingan.

-¿¡Por qué el teme puede golpear al viejo ese y yo no!? -Grito Naruto detrás de nosotros, suspire y voltee sonriendo.

-Te viste muy sexy peleando, Naruto. -Le dije sonriendo y él se sonrojo.

-¡No me digas esas cosas, _____! -Dijo él avergonzado mientras yo reía, mire y su puño estaba lleno de sangre.

-Ve con Hinata, seguro te necesita. -Dije y él abrió los ojos como recordando que fue por Hinata que golpeó a ese sujeto.- Eres un excelente chico, Hinata seguro te lo agradecerá.

Naruto asintió y se fue sonriendo hacia los brazos de la Hyuga quien se sonrojo a más no poder por el repentino abrazo de Naruto.

-Volvamos a casa. -Dijo Sasuke y comenzó a caminar sin embargo frenó al notar que yo no lo seguía.- ¿Seguirás molesta conmigo?

-No estoy molesta contigo. -Dije caminando a su lado.- Sólo quiero que sepas algo Sasuke, no soy de tu propiedad y nunca lo seré, soy una persona, no un objeto.

-Ya lo sé, pero...

-¿Qué? ¿Decidiste que sería tu juguete hasta que te aburras? Para eso tienes a tus seguidoras que se mueren por perder no sólo la dignidad por ti.

-¿Te molestan esas chicas? ¿Quieres que se aparten? -Me preguntó mientras avanzaba a mi.

-¿Y cómo harás? ¿Les dirás que eres gay? -Pregunte tratando de no reír.

-Les diré que conocí a una chica que me hace sentir único y especial, y que esa chica...

-¡Ahí está! -Grito una morocha detrás de Sasuke, yo suspire y asenti.

-Ire a dormir.

Caminé hacia su casa sabiendo que la calle no era un lugar para ese tipo de conversación y menos cuando la gente era muy chismosa.

-¿Qué tengo que hacer para que me perdones? -Pregunto Sasuke cuando llegamos a su casa.

Me quite el sostén por debajo de la remera y se lo tiré en la cara.

-Usa tu imaginación. -Le dije entrando en la habitación como una diva, la Hada Madrina estaría orgullosa.

Me di una relajante ducha y me envolvi en una toalla sintiendo el suelo frío debajo de mis pies descalzos, abrí la puerta entrando en la habitación y vi a Sasuke sin camisa y con una máscara de anbu ¿Estaba soñando o era una broma?

-¿Qué haces? -Le pregunté y él me empujó contra la pared mientras me acorralaba.

-Dijiste que use la imaginación y digamos que es un lugar muy sucio. -Dijo inhalando el aroma de mi cuello.- Eres preciosa.

-Lo sé. -Dije haciendo que riera, levanté mis manos y saqué la máscara de su cara.- No seas un hijo de puta, eres muy hermoso como para tapar tu rostro.

Él me atrajo hacia su rostro y tuve que hacer puntas de pie para al menos intentar estar cerca, sus ojos me miraban fijamente y por primera vez me gustó el contacto visual ¿A quien no?

-¿Podrías ser mía sólo por esta noche?

A la mierda la dignidad.

Sempiterno || Sasuke Uchiha y Tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora