Sempiterno || Sasuke Uchiha y Tú ||

XXX

-¿Tú quieres ser mío? -Le pregunté y él asintió.

Se agachó para poder besarme y así lo hizo, no dude en corresponderle y el beso no había empezado tranquilo... no, ya estaba subido de tono.

Noté como deslizaba sus fuertes manos por mi cintura hasta situarlas en mis caderas, luego él jaló un poco de mi cabello con su mano derecha mientras que la izquierda me guiaba a la cama. Sasuke se quito sus pantalones sin dejar de besarme, lo empuje en la cama y me subí a horcajadas sobre él, de alguna forma me sentía poderosa, sentía que era mi momento, que no debía desaprovechar ni un solo segundo. Deshizo el nudo que tenía en la toalla y ésta calló dejándome desnuda ante él, me daba vergüenza sin embargo no tenía caso taparme, sentí algo duro debajo mío y vi que Sasuke hacia un mueca de dolor, seguramente mi peso sobre su miembro dolia entonces me moví hacia delante y soltó un gemido.

Sasuke me recosto en la cama y se subió encima mío, me sonrió y por primera vez sentí que esa sonrisa era sincera, pasó a besar mi cuello y luego fue bajando hasta mis senos, mire hacia otro lado avergonzada y sentí su cálida lengua sobre ellos, cerré los ojos dejándome llevar por eso que estaba sintiendo y que nunca había experimentado.

Sus besos bajaron por mi abdomen y siguieron hasta llegar a mi feminidad, iba a alejarlo pero al sentir su lengua sobre mi clítoris se fue todo pensamiento coherente de mi cabeza, era sencillamente increíble lo que estaba sintiendo, solté un fuerte gemido al sentir que comenzaba a succionar y besar esa zona, nunca creí que este tipo de placer fuera tan inmenso. Sasuke metió un dedo dentro de mi y si, había dolido un poco, al segundo dedo ya comenzó a hacer movimientos en la pared frontal de mi vagina mientras seguía estimulando mi clítoris con su lengua.

Punto G...

Había leído sobre él en un libro y la autora se quejaba de como la mayoría de la población masculina desconocía su localización, tal vez esa autora no conoció a Sasuke Uchiha.

Me estaba enloqueciendo, era demasiado placer para un solo cuerpo pero no quería que parara, luego de unos minutos sentí que algo dentro mío explotó y me hizo gritar de placer, Sasuke volvió a besar mis labios y luego se separó para mirarme, sus ojos estaban más negros que nunca ¿Qué se supone que debía hacer ahora? Vi como se sacó su boxer y gire hacia otro lado al ver su gran (Repito, GRAN) miembro, eso me puso nerviosa y me dio miedo, aunque seguramente se me hacía muy grande porque nunca había visto uno.

-¿Quieres hacerlo? -Me preguntó susurrando en mi oído, asenti y él me beso mientras abría mis piernas para posicionarse entre ellas.- Debes relajarte o dolerá más de lo que debería.

Asenti y abrace su cuello quedando justo frente al sello maldito, nunca lo había visto tan de cerca, suspire y bese su mejilla. Sasuke se puso un condón y entonces supe que ya lo haríamos.

-Estoy lista. -Dije separándome de él, bese sus labios por última vez y cerré los ojos intentando relajarme.

Sentí un dolor en la parte baja de mi abdomen mientras Sasuke empujaba hacia adentro con delicadeza, cuando entró por completo me aferre a su intentando disminuir el dolor.

Oh

Dios.

-¡Espera! Detente. -Le pedí aún con mucho dolor.

-¿Estas bien, te hice daño? -Pregunto él y yo negué con la cabeza aunque me gustaba que se preocupe por mi.

-No, solo que... duele. -Dije y él me dio una sonrisa cálida, si, cálida.

-Relajate, respira y verás como el dolor se va poco a poco, no me voy a mover. -Dijo y yo asenti agradeciendo internamente, hice lo que él me aconsejó y tenía razón, ya dolía menos.

Comenzó a entrar y salir dentro de mi, se sentía demasiado bien, fue aumentando el ritmo con el tiempo hasta que comenzó a dar más fuerte haciendome gritar de placer.

-Sasuke. -Dije cerrando los ojos con fuerza, no podía verlo a los ojos.

-Mirame. -Pidio y yo negué con la cabeza.- Mirame, por favor.

Abrí los ojos y al mirarlo vi su Sharingan activado, el muy maldito sabía que se veía jodidamente irresistible con el Sharingan.

-Te quiero. -Dijo con voz ronca en mi oído y luego me beso sin dejar de moverse.

¿Sasuke me quiere? ¡Mierda! ¡Sasuke me quiere! ¡En tu cara pelo de menstruación con semen!

-Yo mas. -Le respondí entre gemidos.

No les voy a mentir, aún dolía bastante pero de alguna forma esto era... mágico, siempre me dio curiosidad el sexo en especial porque la mayoría de mis amigos ya lo habían experimentado y eso aumentaba mi curiosidad ¿Qué ganaban teniendo sexo? La respuesta me la había dado Sasuke.

El hecho de sentirme deseada ya era bastante excitante y ni contar el placer que él me estaba dando, eso no tiene comparación. Volvió a besar mi cuello lo que me hizo arquear la espalda, se sentía muy bien.

Lo empuje a un costado mientras me subía encima de él, bien _____, demuestra que leer Fifty shades of Grey no fue en vano.

Coloque mis manos en su pecho y comencé a moverme con fuerza mientras él soltaba gemidos de placer, al menos lo estaba haciendo bien. Subí y baje con más velocidad sin dejar de gemir.

-Sigue. -Dijo Sasuke aferrandose a mis caderas y ayudándome a moverme con más fuerza y así lo hice.- No te detengas.

Me había dejado llevar por el tono de su voz desde el principio y ahora no podía dejar de gritar su nombre, su voz ronca, los gemidos y los gritos de placer por parte de ambos era lo único que se escuchaba en la habitación.

Sentí que iba a llegar al orgasmo al igual que Sasuke, él volvió a subirse encima mío y siguió penetrandome mientras succionaba mi cuello, eso provocó que mi cuerpo entero tiemble ligeramente y así llegamos al orgasmo.

Nuestras respiraciones eran agitadas, creo que un entrenamiento era menos agotador, Sasuke se recosto a mi lado y cubrió mi cuerpo con una sábana, sonreí y me destape, él me miró confundido y me levanté para ver si había rastros de sangre... nada, al parecer era de esas chicas que no sangraba en su primera vez, que alivio.

Volví a recostarme mientras tomaba la camisa de Sasuke que estaba en el suelo y me la colocaba, él se había levantado para tirar el condón en la basura y ponerse su ropa interior, al final me abrazo de forma protectora y beso mi cabeza.

-Fue increible. -Le dije mirándolo a los ojos.- Gracias.

Él negó con la cabeza y me beso en los labios.

-Tú eres increíble. -Dijo sonriendo.

Acomode mi cabeza en su pecho y cerré los ojos lista para dormir, Sasuke tenía razón... un día me iba a volver loca por él y creo que ese día era hoy.