Narra Amelia: me moría de ganas de hacer el amor con Luisita pero también me molestaba un poco en que solo pensará en sexo sexo y mas sexo.
Pero bueno, se irá dando cuenta de que el sexo no lo es todo. Cuando llegamos a casa estaba realmente agotada, Luisita me consumía radicalmente pero me encantaba, ella tiro las cosas por el suelo y se echó en el sofá, como de costumbre y yo las cogí y se las tire encima.
Oyee, ¿Pero que haces? Dijo Luisita riéndose.
Siempre lo tiras todo por el suelo, no puedes hacer eso, luisita. Dijo Amelia dedicándole media sonrisa.
¿Pues sabes que? Dijo la chica rubia.
¿Qué? Dijo Amelia con cara de duda.
Tu hoy vas ha acabar en el suelo. Dijo con una voz muy sensual.
Luisita se acercó a Amelia besándola con más pasión de la habitual.
Sus manos bajaron hasta sus pantalones hasta quitárselos y empujarla al sofá. Sus besos cada vez eran más largos y bonitos.
Amelia hizo lo mismo, le quitó la blusa y la falda negra que llevaba la chica rubia tirándola por el suelo.
Amelia puso a luisita abajo dándole besos por todo el cuerpo hasta llegar a su abdomen dónde pasaba su lengua viendo cómo luisita la miraba con deseo.
Está siguió bajando hasta llegar abajo a dónde luisita quería llegar.
Amelia metió suavemente sus dedos masajeando el clítoris y escuchando a Luisita germir muy fuerte.
Cada vez lo hacía más rápido hasta llegar a un bonito orgasmo entre besos.
Luisita agarro a Amelia y las dos cayeron al suelo.
Creo que me tienes obsesionada con el sexo, bueno con tu sexo. Dijo luisita dándole besos por el cuello.
Yaya, ya lo sé. dijo sonríendo.
Bueno, creo que eres lo mejor que me a pasado en la vida desde hace muchísimo tiempo. Y te amo muchísimo. Dijo Luisita mirándola.
Sinceramente tu eres el amor de mi vida. Dijo Amelia besando a luisita.
Ay que tonta eres. Dijo luisita mordiéndose el labio inferior.
Oye, Voy a por una cosa, vengo ahora. Dijo Amelia sonriendo mientras iba en dirección a la cocina.
Salio de la cocina con un bote de nata, y fresas riéndose.
¿Te apetece seguir jugando? Dijo Amelia mordiéndose el labio.
Ya sabes la respuesta. Dijo luisita.
Amelia cogió la nata y la empezó a echar por luisita.
Cuando acabo de echar toda la nata encima de ella, empezó a lamer cada rincón de su cuerpo desnudo.
Notando como Luisita disfrutaba con cada movimiento.
Luego empezamos a jugar con las fresas haciendo un poco el tonto. Hasta el punto de acabar el bol volcado en el suelo y todas fresas esparcidas.
¿Oye hacemos una cosa? Dijo luisita.
Que¿?
Todos los meses, el día 8 vamos a tener noche de juegos.
Cómo noche de juegos¿? Dijo Amelia confundida.
Sisis, fresas, nata. Otro día caramelo. O chocolate. Y pasar una noche muy dulceee. Dijo Luisita mirándola fijamente.
vale. Pero en todo el mes tendremos menos sexo. ¿Te parece? Dijo Amelia
Mmm, chi, claro. Podemos ver Netflix, o cualquier otra cosa, puedo sobrevivir sin sexo, porque tú compañía es lo que necesito para vivir. Dijo luisita tirada en el suelo.
Amelia le sonrió y le dió un beso muyy largooo.
Te amo, mucho, muchisimo.
Yo también amorr. Dijo luisita.
Oye, ¿Seguimos? Dijo Amelia riéndose
