𝑺𝒆𝒏̃𝒐𝒓 🐬 𝒌𝒖𝒋𝒐 𝒚 𝑺𝒆𝒏̃𝒐𝒓 🍒 𝑵𝒐𝒓𝒊𝒂𝒌𝒊 (𝙹𝚘𝚝𝚊𝚔𝚊𝚔)

⓸

Yo...estoy muerto.

Pucci me ha matado, nunca pensé que sería tan ¿Rápido? Supongo, pensé que moriría como el viejo pero eso no me lo esperaba.

De la nada me he despertado en un barco sin ninguna herida, estaba sentado en una silla de madera, había gente desconocida, niños, ancianos, incluso bebés...¿Que es esto? ¿Acaso es el Limbo o que?

En eso, mis ojos se centraron dos rostros conocidos.

-¿Joseph?...¿N-n'doul?

-¿Jojo?-Dijo el joven chico ciego

-Ah! Jojo!-Dijo alegre el viejo Joseph.

Rápidamente me acerque a ellos dos sorprendido pero alegre de verlos.

-Oh jojo, cuanto tiempo-Dijo mientras sonreía levemente, teniendo sus ojos cerrados.

-Igualmente N'doul-Dije con nostalgia y alegre, recordando aquellas palabras que me había dicho hace mucho "No le temo a la muerte".

Por corto tiempo, recordé aquella batalla que había tenido hace mucho, ah, que recuerdos, es como si hubiera sido ayer.
En ese momento, salí de mis recuerdos y decidí preguntarle en donde estábamos o que hacíamos acá. Solamente me pregunto con un simple "No lo sé". Solo suspire y me volví a sentar en la silla pero acompañado del viejo.

Un barco no muy grande ni chiquito, limpio y lleno de personas, unos hablaban, otros miraban el mar y otros caminaban acompañados o solos, pero en algo estoy de acuerdo, nadie sabe donde estamos o que hacemos aca.

Sentía muy calmado, paz y tranquilidad que me llegaba hasta lo más profundo de mí.
Hablaba con el viejo pero sus largas siestas y sus problemas de oído no me dejaba tener una conversación larga o interesante, solamente miraba al mar, la marea moviéndose y algunos pocos delfines...Ah, desearía que Kakyoin estuviera aquí.

Después de 4 horas, el barco llegó a un muelle, en eso todos bajamos y ayude al viejo bajar, después el barco se fue, perdiéndose a la vista de todos.
Junto con el viejo, caminamos en un puente hasta llegar en un lugar casi lleno personas y algunos puestos de comida.
Había unos hoteles, un cine, puestos de comida y juegos de feria, y había una playa a su lado, nada mal para vivir ahí.
Lleve al viejo hasta un puesto de comida, mi estomago regia un poco así que solo compre dos hot-dogs. En eso, un joven chico rubio llego junto con una mujer de cabello largo y lacio.