XVII. ¿el am r duele?

135 28 32
                                    

SeokJin se consideraba una persona bastante paciente, incluso la más paciente que conoce, pero en esos momentos creía que matar a Min Hyunbin era la mejor salida para la raza humana, se deshacía de un bueno para nada y de un dolor de cabeza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


SeokJin se consideraba una persona bastante paciente, incluso la más paciente que conoce, pero en esos momentos creía que matar a Min Hyunbin era la mejor salida para la raza humana, se deshacía de un bueno para nada y de un dolor de cabeza.

El asesinato se veía bastante viable para él.

-Es que, aún no me creo que ella haya vuelto de Alemania -dijo Min mientras se servía un trago en un vaso de hielo-. Sabes, Hyunjin, yo sabía que volvería a pisar Corea, pero este regreso es demasiado impactante para mí -SeokJin estaba comenzando a odiar su nombre falso por culpa del tipo, porque siempre lo llamaba para cosas estúpidas o para desahogarse-. Yo amaba a Ji, ¿Será que la sigo amando? -posó la mano derecha en el pecho, era todo un dramático-. ¡No puedo amarla, Hyunjin!, ella me dejó por un mensaje de texto y se fue con un tal Taehyung... Dijo que amaba a ese tipo que no figura en ningún lado, ¿Quién mierda es Taehyung? -suspiró abatido con la cabeza entre las manos.

SeokJin se moría por decirle que ese Taehyung era su hermano, le picaban los labios por poder decirlo, se moría por ver la reacción de Hyunbin al enterarse que Jiae lo dejó por un adolescente de quince años con tendencias masoquistas.

Se moría por ver la cara de indignación, pero jamás aprobó la extraña relación sexo-afectiva de su hermano con Jiae, le parecía hasta traición a su familia que ella le lavara el cerebro a Taehyung para acostarse con él, porque era más fácil que sumar dos más dos saber que ese acuerdo fue creado por ella.

De hecho, tenía una charla pendiente ,y bastante extensa con Jeon Jiae, una que amerita extrema confidencialidad y un par de tés, porque se le secaría la boca de tantas cosas que le iba a decir.

Para empezar, ella tuvo el poder de encaminar a Taehyung a terapia o que se acercara a él, porque varias veces le dijo, incluso le rogó, a la chica si podía convencer a Taehyung de quedarse en casa, pasar tiempo juntos, visitar un terapeuta o solo que le hablara, pero Jiae solo asentía y desaparecía de su vida, junto a las esperanzas de que su hermano volviera en sí.

Había una obsesión creciente en Jiae, la chica estaba obsesionada con tener a Taehyung solo para ella, y ni siquiera podía decirle a su hermano que ella jugaba con su mente, porque Taehyung estaba aferrado a la fémina; SeokJin no sabía si era porque tuvo su primera vez con ella o porqué diablos, pero no le parecía normal el cómo estaba tan aferrado el castaño a la chica Jeon.

Las cosas entre él y Taehyung habían mejorado de forma impecable, ahora tenían mucha más cercanía que antes del accidente, y si era honesto consigo mismo, SeokJin agradece lo que la muerte de su madre aportó para Taehyung.

No es que él estuviera feliz porque su madre muriera, él la amaba, la ama, pero el trato que tenía con su hermano... Solo le hacía daño al pobre Taehyung, un chico que nunca supo sobre tener opinión propia y poder sobre sí mismo, un joven que acataba las órdenes de su madre sin rechistar debido a que estaba condicionado a hacerlo, un adolescente que conoció lo que era ser un humano, cómo se comportan y cómo sienten las personas, a través de su mejor amigo.

Poemas de Hyung ©TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora