¿Dónde está Entrapta?

Parte 7 Final

En el Sanctum, Hordak molesto y agobiado por la incertidumbre del paradero de Entrapta, y fatigado por su infructuoso trabajo en el portal, decide ir a descansar por un corto lapso de tiempo en sus aposentos. Busca despejar la mente y recobrar energías porque está decidido a ir él mismo a la búsqueda de Entrapta si Catra nuevamente falla en localizarla. Entra en un reducido espacio oscuro que parece una cripta, y se recuesta sobre una lámina horizontal de acero cromado que parece más la mesa de un quirófano de disección que una cama convencional. Se queda acostado sin cerrar los ojos observando al techo exhorto en sus preocupaciones, hasta que observa algo extraño moverse entre las tuberías de ventilación. -¿Eres tú Imp? ¡Te he dicho siempre que no perturbes mi descanso!-. Exclama Hordak con rabia mientras se reincorpora, pero no escucha respuesta. Toma un arma laser que tenía cerca y apunta al techo preparándose para disparar.

-Disculpa Hordak, soy yo, Entrapta, Coff, Coff-. Se logra oír tenuemente entre toses desde el techo.

Hordak al escuchar la identidad del intruso, baja el arma, y se sienta nuevamente sobre la poco convencional cama.

-¿Qué haces en los ductos de ventilación? ¿No se supone que estás enferma?-. Pregunta Hordak sorprendido e intrigado.

-He empeorado, Coff, Coff, y tengo miedo de estar sola -. Le responde Entrapta mientras tosía.

-Pero para eso está la enfermería, y Catra y Scorpia podrían atenderte-. Replica Hordak con expresión seria.

-Catra ya no me habla, y Scorpia es muy gentil pero algo descuidada. Coff, coff, Y en la enfermería debían volver a estudiar, no saben distinguir entre un ataque de caspa y una quemadura de segundo grado-. Contesta Entrapta consternada tosiendo nuevamente.

-Y vienes a este lugar. No conozco sobre fisionomía etheriana-. Insiste Hordak.

-Ya me tomé una medicina que de seguro me repondrá, Coff, Coff, pero quiero pasar estos momentos contigo-. Reafirmó Entrapta.

-¿Pero qué quieres hacer?-. Le pregunta confundido Hordak.

-¿Puedo acostarme en tu cama? Se ve muy confortable-. Le afirma Entrapta

- Nunca alguien se ha acostado en eso que llamas cama, aparte de mí, pero puedes usarla, yo irá a buscar otro lugar-. Le responde Hordak mientras se prepara para levantarse.

-No, no hace falta, estoy segura que este virus etheriano no te afectará, porque puedes resistir las condiciones espaciales-. Dice Entrapta, mientras desciende del techo usando sus cabellos prensiles, y se recuesta en las piernas de Hordak, acomodándose en posición fetal. Hordak paralizado, no tiene idea de qué hacer, y finalmente se rinde a las circunstancias, y decide acostarse también, con Entrapta encima de él con la cabeza sobre su pecho. Era la primera vez que experimentaba un cuerpo tibio calentando su cuerpo, y eso le agrada. Y así permanecieron los dos juntos esperando el alivio del cuerpo de ella, pero no de sus almas, que confortadas, borraban todos los temores y preocupaciones en ese momento especial.

Mientras tanto, en el basurero de la Zona del Terror, Catra finalmente desiste de seguir buscando a Emily, y le pide a Scorpia que retorne de las montañas de basura. Una Scorpia apestosa vuelve a su lado con una sonrisa.

-¿Qué debemos hacer ahora Jefa?-. Le pregunta Scorpia, mientras se sacude desechos de su cuerpo.

-Lo primero es llevarte a los camerinos para te bañes, y luego veré que excusa invento para solucionar el problema de los caprichos de Hordak con Entrapta, y salvarnos a las dos de un castigo-. Le responde Catra luego de lanzar un suspiro de resignación. En eso Scorpia busca abrazarla como gesto de agradecimiento por preocuparse también por ella, a lo que Catra responde con un sonoro: -¡Ni se te ocurra!-.

THE END