Bien se dice que la mejor forma de vencer la tentación es caer en ella. Y vaya que he caído. No se como lo tomen ustedes, la mayoría de la gente prefiere ver a una mujer sumisa y un hombre activo que sea pervertido y pasional. Jugamos con juego, con roles distintos, me toca pervertirlo a él.
Pero antes de pasar a estos detalles que se perfectamente muchos de ustedes quieren saber, prefiero platicar solo un poco de como comenzó todo.
mi nombre es (tn)_______, y ciertas circunstancias me obligaron a venir a Madrid, estudios principalmente, pero lo que me trajo a este lugar no es la razón por la que quiero quedarme, al menos no más.
Recuerdo esa fría tarde de invierno, recuerdo cada detalle de la primera vez que lo ví.
Salí con mi abrigo favorito a la calle, pues quería conseguir algunas cosas para la cena, vivo con mis mejores amigas: Leonora, una pintora empedernida cuya habitación siempre huele a pintura y Carmen, a quien conozco desde una tierna edad y con una extraña tendencia a analizar psicológicamente a cualquiera que la rodea.
El cielo amenazaba con soltar una fuerte tormenta, así que lleve un paraguas conmigo.
-¿No quieres que te traiga algo?- le pregunté a Leonora, mientras tomaba las llaves y ella estaba sumamente concentrada en su nueva acuarela.
-Gracias (tn)______, estoy bien. aunque, pensandolo bien, unas galletas de chocolate no estarían mal.
Salí del apartamento en dirección a la tienda, el cielo estaba cada vez más oscuro, yo solo pensaba en llegar antes de que comenzara el diluvio.
Una vez en mi destino, tomé todo lo que necesitaba, aunque sé que contar como comprar cosas en una tienda no es interesante, sin duda lo fue cuando el universo demostró que me odiaba y una tormenta de proporciones épicas comenzó a caer sobre la ciudad.
Con el paraguas abierto y una bolsa en la mano, esperé en una esquina a que el semáforo en rojo me permitiera el paso, alguién se paró al lado mío, no le dí importancia y me sumergí en mis pensamientos.
De pronto, todo se sintío húmedo y frío, me cegué temporalmente y llegué a escuchar el chirriante sonido de un automovil acelerando. Un escalofrío recorrió mi espalda, algo me había cegado y sin querer sentí que resbalaba de espaldas sobre la acera en un espactaculo de torpeza digno de un video humillante en internet.
Sentí unas manos tomarme de los hombros, mientras me percataba de la realidad, un automovil había pasado y me había empapado entera gracias al inmenso charco que se formó al lado de la acera. Me limpié los ojos rapidamente para poder ver y lo primero que alcancé a notar fueron unos hermosos ojos miel que me miraban fijamente, me percaté que era un chico, un chico extrañamente familiar.
-Joder, ¿te has hecho daño?- me dijo en un tono de voz algo preocupado.
-No, solo fue un golpe leve
-Menos mal- él chico me sonrío, y me ayudo a levantarme, afortunadamente ninguna de las cosas dentro de la bolsa se salió de su lugar.
-No te escuchas como alguien de por aquí- me dijo
-La verdad es que no, vengo de _(tu país)_
No me respondió, me estaba mirando de manera extraña y no entendía bien por qué.
-Hola?.... hay alguien ahí?- dije en tono sarcástico.
Y como si lo hubiera sacado de sus pensamientos, sacudió la cabeza y me miró fijamente al rostro.
-Perdona, estaba algo distraído, me pasa seguido-dijo mientras reía nervioso.
El semáforo se puso en rojo y por fín pude avanzar, el chico avanzó justo a mi lado
-¿Vives muy lejos de aquí?-preguntó, era extraño recibir esos tratos de parte de un desconocido
-No, a tan solo unas cuadras, sabes, te me haces extrañamente familiar
Pude notar como se sonrojaba mientras se llevaba una mano a la nuca y se rascaba la cabeza.
-Si, ya me lo han dicho.
-Enserio, ¿nonos hemos visto en algún lado?
-Probablemente, quizas, no se, algo relacionado con internet.
-Mmm, no, no logro recordar donde.
El sonrió y fue como si todo su nerviosismo se hubiera disipado.
-Bien, aquí es,-respondí.
-¿Enserio?, yo vivo en este mismo edificio- replicó sonriendo cual niño
-Vaya, pues parece que seremos vecinos.
-¿Cual es tu nombre?
-(tn)______, ¿y el tuyo?
-Rubén, pero, todos me dicen Rubius.
Abrí los ojos como platos e inmediatamente recordé por qué su cara me era familiar.
-¡No puedo creerlo!, ¿¡como he podido estar al lado de un Youtuber y no darme cuenta de ello!?- Exclamé sorprendida. Me tomó de la nuca y puso un dedo sobre mis labios, me acercó a su cuerpo mas de lo normal y lo miré fijamente a los ojos, se acercó a mi oido y me susurró
-Shhh, estoy intentando pasar algo inadvertido que puede haber stalkers maniáticas por aquí.
Volvió a quedarse perdido mirandome fijamente, y despues de un minuto me soltó.
-Bien (tn)______, quizas nos podamos ver luego.
-De acuerdo.
Y entró al edificio primero que yo, una corriente de aire helado me enfrío el pecho y me percate que mi abrigo se había abierto, y vaya sorpresa me lleve cuando al verme al espejo de mi cuarto me dí cuenta de que mi blusa blanca se había transparentado gracias al agua dejando a la vista mi brassiere rojo...
...¿acaso él me había estado mirando los senos?
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Fuego Cautivo (Rubius y tú)(Hot)
Hayran KurguFue atracción pura desde el primer momento en que lo ví, desde que me vió. No puedo negarlo, esos ojos pardos que me atraparon desde el inicio, su boca que siempre estaba arqueada en un sonrisa y ahora estaba delante mio, mordiendose los labios, aho...