Capítulo XVIII: Mi maldición

72 61 0
                                    

ℙ𝕚𝕥á𝕘𝕠𝕣𝕒𝕤

𝔼𝕤𝕔𝕦𝕔𝕙𝕒, 𝕤𝕖𝕣á𝕤 𝕤𝕒𝕓𝕚𝕠. 𝔼𝕝 𝕔𝕠𝕞𝕚𝕖𝕟𝕫𝕠 𝕕𝕖 𝕝𝕒 𝕤𝕒𝕓𝕚𝕕𝕦𝕣í𝕒 𝕖𝕤 𝕖𝕝 𝕤𝕚𝕝𝕖𝕟𝕔𝕚𝕠.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Podría haber sido más genial, más inteligente, probablemente una mejor hija, saltaría a una aventura sin dudar y me quitaría las lágrimas pasajeras, hubiera ahorrado mucho dinero, no aguantará hambre, me importara yo misma sin importarme nadie y s...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Podría haber sido más genial, más inteligente, probablemente una mejor hija, saltaría a una aventura sin dudar y me quitaría las lágrimas pasajeras, hubiera ahorrado mucho dinero, no aguantará hambre, me importara yo misma sin importarme nadie y saldría  por la puerta sin ganas de llorar. Si viviera en una casa sin espejos donde las paredes no me hablen.

Talvez ubiera soñado un poco más en grande si no ubiera un reflejo de mi vida, una casa sin espejos donde el reflejo no me lastime.

Y ahora sería más fuerte, honesta, probablemente no sería tímida y triste iría a una fiesta sin importarme mi pasado, no tardaría en hacerlo si tan solo viviera en una casa sin espejos sin ver la realidad. Pero gracias a estos espejos soy más humana y veo a mi alrededor. Me pregunto ¿Como sería yo? Si durmiera un poco mejor en la noche, si yo.....si no viviera en una casa con espejos.
Al verme en el espejo ya sea en el presente o en el pasado siempre veré mi ayer ...

Cuando pienso en mi madre, me soy cuenta de que ninguna madre es igual es un amor distinto de cada una, ella ponía a todos los demás primero y es por ello que no se separaba de mi padre, por nosotras, pero se equívoco porque eso solo lo empeoró. Cuando crecí me di cuenta que ella era tan devil como fuerte, a pesar de todo ella se levantaba y entiendo demasiado cuanto a de haber sufrido.

Ya no la puedo ni ver pero si lo hiciera se lo que haría, le diría te amo un millón de veces, me disculpar ia si la hice llorar. Sus lecciones que aprendí son muy grandes, si un chico me decepciona se lo que valgo  ahora ella es un Ángel que me cuida.

Recuerdo muy bien su voz diciéndome que era hermosa pero no lo creía así, siempre me acomplejaba en mi espejo, quería decircelo pero no quería lastimarla, si tengo hijos pensaré en todo lo que me dijo, no te puedo ver pero si tan solo pudiera la abrazaría tan fuerte temiendo a que se valla y le agradecería tanto por las lecciones que me dio. Te extraño mi Ángel.

Mi maldición siempre estará conmigo.

Ha veces mentalmente le grito al cielo, al mundo ¿porque se fueron? Sigo siendo muy devil, me aferres demasiado fuerte, tenía y tengo la cabeza arriba en las nubes, solo Dios sabe dónde están ahora ¿Comó puedo recuperar.... comó puedo recuperar mi vida de nuevo? ¿Comó puedo confiar....comó puedo confiar de nuevo?.

Me quedo despierta toda la noche, me digo a mi misma que estoy bien, es muy difícil saber que no están, pongo aquella canción que me nos dedicó mi madre la escucho y todas las noches peleó con mis fantasmas. Nunca tuve la oportunidad de decir un último adiós, tengo que seguir adelante pero duele intentarlo.

Mi bebé, mi hermanita, tenía su vida tan corta, me da escalofríos pensarlo, desearía poner mis brazos alrededor de un recuerdo de ella, no puede evitarlo cuando el destino avanza. Trate de cuidarla y le dijo toda la felicidad y ahora tengo que renunciar a ella y se que se acabó, pero si tan solo no acabará así, incluso si supiera que no acabaría así aún así lo haría de nuevo, la volviera a proteger. Todas esas noches son estar sola riendo de sus locuras todavía las llevó en mi, no importa a donde vaya siempre estarán en mi mente.

Después de todo lo que ocurrió en la Feria, Hanna aún seguía preocupada por mi así que decidimos regresar y aquel chico se despidió de nosotras y me miraba todo el tiempo con curiosidad, nos encontrábamos a unos pasos de la casa.

Hanna se paro al frente de la puerta y la tocó - Abuelita ya llegamos - abrió la puerta y todo paso tan rápido .

Mi abuela habia golpeado a Hanna y Hanna se cayó ante el impacto, no sabía que hacer, mi cuerpo se congeló.

-¡Te pedí que cuidarás a Astrid! ¡Y ¿Esto es lo que causas? ! - mi abuela tenía lágrimas en sus ojos y miraba con rabia a Hanna.
-Lo siento -Dijo aún tendida en el suelo llorando.
-¡Comó puedes ser tan descuidada! -lloraba -¿¡Y si algo malo le pasaba a Astrid?! ¡Ella no puede recibir esos impactos! - mis lágrimas me pisaban mis ojos.

-Lo siento - repitió con debilidad.
-No puede... -La interrunpi.

-Pero nada malo me paso estoy bien -le conteste a mi abuela. Un extraño dolor en mi corazón empezaba a generarse.
-Pero Astrid... -la interrumpi.
-Esto no es culpa de Hanna, todo es mi culpa, no debi de dejar de ver a Nicol y todo lo que me paso es por mi trauma ¡Todo es culpa de mi maldito trauma! - dije llorando, no podía resistir los más.

-Astrid - mi abuela se relajo pero su mirada era de tristeza.

-Si hay un culpable aquí soy yo y mi maldición - me incline hacia Hanna y le ofreció mi mano, ella no me quiso ver y lo entendí pero sujeto mi mano y la ayude a levantarse -Lo siento Hanna- después de ayudarla a pararse le dijo una última mirada a mi abuela y corrupción hacia mi habitación, cerré la puerta y me adentre a mi cama .

Todo es parte de mi maldición, no podía cambiarlo, lastime a Hanna y es por ello que tengo que evitar a Eian, no quiero lastimarlos, no quiero que se tomen con mis espinas.
Cuando los vea no podré ni mirarlos a los ojos, mi camino es obscuro y hace llorar, tus sentimientos duelen. Desearía ser tan especial como ellos pero soy un sombra, un cuerpo sin alma ¿Qué hago aquí? Ya no pertenezco aquí. No me importa si esto duele, quiero tener el control para no lastimarlos y quiero un alma, quiero que se den cuenta que los derrumbarse y ellos son especiales. Estoy huyendo por su bien...

Lo siento mucho pero si estuvieran en mi lugar ¿harían lo mismo?...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
CUMPLIÉNDO MI PROMESADonde viven las historias. Descúbrelo ahora