Quiero el divorcio- Seho

Celular.

Cuando su hermano se fue, siguió revisando su celular, dándole especial énfasis en las conversaciones, lo primero que notó es que su última conversación fue en su aniversario, llevaban 7 años casados, luego un silencio, ya sea por el accidente o algo había salido mal esa noche, lo segundo fue la cantidad de apodos que le dedicaba al menor, estaba muy avergonzado leyendo la forma en que se refería al menor, hablaban muy seguido, a veces solo de su día, de lo mucho que se extrañaban y deseaban, le sorprendió que habían unas fotos muy sensuales, tanto explícitas como implícitas, sus mensajes eran bastante directos y descarados con lo que querían, aparentemente adoraban provocar el uno al otro, al entrar a la galería del celular, observo con detalle cada foto, definitivamente el menor era muy sexy, tenía un cuerpo de infarto, salían muy seguido juntos, habían un montón de fotos de ellos, besándose y abrazándose, no recordaba haber sido tan afectuoso con alguno de sus ex's, definitivamente el chico era especial. 

Miro unos segundos el celular hasta que se animo a llamarlo, no sabía si le respondería después de lo que había pasado.

-¿JunMyeon?-pregunto apenas respondió confundido-¿paso algo?

-Buenas noches Sehun-le respondió-no pasa nada, solo quería oírte-escuchó el silencio en la otra línea-¿estabas durmiendo?

-No, solo me sorprendió lo que dijiste-le dijo sonando algo tímido, quizás avergonzado-¿recordaste algo?

-La verdad no, pero vino JongIn y me enseñó a utilizar el celular, encontré cosas muy interesantes ahí-le dijo sonriendo, escucho como el menor se quedaba en silencio unos segundos y luego jadeaba por el conocimiento.

-No debieron ver eso-se oía mortificado-eran conversaciones privadas.

-Pero eran conversaciones conmigo-dijo riendo en voz baja.

-No es lo mismo-dijo gruñendo en voz baja.

-Tengo muchas fotos contigo, parecemos muy felices, creo que yo te amaba mucho, eras muy importante para mi-dijo cambiando el tema, midiendo la respuesta del menor, cuando pensaba que el contrario había terminado la llamada, escucho su voz.

-Yo soy feliz contigo y eres muy importante para mi-le dijo en voz baja, sonando cansado.

-Pero no vas a explicarme nada de lo que ocurrió-le respondió.

-Lo siento-le dijo desde el otro lado de la línea, sonaba dolido.

-No lo sientas, yo también quiero verte sonreír, tu sonrisa es muy linda-escucho el jadeo de sorpresa del menor.

-¿Por qué?-dijo confundido-tú no me conoces.

-Lo sé, sé que me he perdido de mucho, hay un gran vació en mis recuerdos, pero puedo ver lo importante que eres para mí, la persona que era antes del accidente y quiero atesorarte, además tengo excelente gusto-escucho su risa, juraba que estaba negando al otro lado.

-Pervertido-le dijo sonando divertido-apuesto a qué no querías sonar tan cursi y por eso dijiste eso-se mordió el labio, aparentemente el contrario lo conocía más de lo que pensaba.

-Adivinaste-le dijo en voz baja y el contrario rió en voz baja.

-Deberías ir a dormir-le dijo en voz baja.

-No es como si pudiera hacer mucho en el hospital.

-Entonces apresúrate en volver a casa-le dijo coqueteandole.

-¿Acaso me extrañas?-le pregunto devolviendole el atrevimiento.

-Sí-le dijo quedamente-así que recuperate pronto-se apresuro en agregar antes de cortar, sonrió observando el celular. No sabía que había pasado, pero podría tratar de reparar las cosas.