Los días en la escuela eran apasionante tanto por aprender y recordar. El cariño de los alumnos llenaba mi triste existencia.
Con mis hijo de a poco nos comunicábamos mejor por lo menos no se peleaban las 24 horas del día.
Con Joaquín intentaba entablar un buen diálogo a cambio que me deje la casa, permití tener una custodia compartida con mis hijos los cuales tenían su apellido hace unos años. Cada 15 días él se los llevaba una semana y se hacía cargo de ellos además de pasarme un pequeño dinero para sus necesidades. La verdad era un excelente padre y un terrible marido. Mis hijos lo necesitaban no podía romper el vínculo que tenía con ellos. Estaba muy seguro de separarse, ya habíamos fijado los términos de nuestro divorcio. Pronto sería una mujer divorciada. Libre de aquel hombre que tanto daño perpetuó en mi vida.
Con Renzo compartía casi todos los días, su continuo asedio me enloquecía. Todas estaban embobadas con él, muy lindo, divertido, espontaneo hasta las mamás murmuraban sobre el nuevo profe de educación física.
Estaba en el grupo de whatsapps de madres y circulaba una foto de él en malla. No sé de dónde la sacaron pero eso excitaba a varias madres solteras desesperadas, del grupo, incluyéndome.
— Emma — me tomó de la cintura mientras estaba distraída
— Ay, tonto me asustaste.
— Hoy... — me hace un gesto con su mano cerrada moviendo de un costado.
— Que grosero que sos— le digo
— Bueno, querés venir a.....— deja de hablar al ver a Cintia que se acerca con los niños.
Lo miro y le digo
— No, tengo los nenes hoy.
Hace un gesto de frustración antes de seguir con su labor docente.
— Vamos chicos— dijo.
Yo tomo la fila de niños y los llevo al transporte para trasladarnos al club.
Luego de unos minutos estamos allá. Durante la clase solo me mira, yo también lo hago. No puedo entender que me atrae de Renzo. Pero no puedo dejar de mirarlo cada vez que nos toca trabajar juntos. Además las demás están locas por él, siempre tan ocurrente divertido, gracioso, en otras palabras un tarado.
Era demasiado idiota pero sentía que era mi idiota y sus estupideces me pertenecían. Nooo. Que me pasa me estoy enamorando de ese payaso.
Me di cuenta que tenía que terminar con mis encuentros o terminaría totalmente destruida por él.
Ese día Joaquín apareció en la escuela en busca de mis hijos. Los tendría el fin de semana. Lo vi pasar pero me hice la desentendida para no tener que hablar con él. Pensé debe venir a decirme que este fin de semana no puede cuidarlos.
— Emma, tu marido está afuera quiere hablar con vos— dijo la portera.
Suspiré antes de salir. Ya no podía esconderme de él.
Tenía que hablar y seguramente me daría indicaciones como siempre lo hace.
— Emma que linda estas de maestra — me dijo.
— Hola Joaquín — lo saludé con un beso— que pasó porque estas acá. Los chicos están en clases. No pasabas a buscarlo mañana.
— Ya sé lo que acordamos pero los voy a retirar ahora. Es fin de semana largo y quiero ir a las montañas con ellos.
— No me comentaste que ibas a irte de mini vacaciones.
— No tengo por qué decirte. Ya no me tengo que reportar con vos o lo olvidaste.

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UN AMOR DE NOVELA
RomanceEmma es una madre soltera que ha sufrido una separación recientemente. Decide cambiar su vida pero antes toma unas vacaciones en la playa. Solo sueña con una relación apasionada como en sus novelas. Conoce a Renzo quien solo le interesa divertirse y...