Trencito- HyunIn

IV

JeongIn arregló su uniforme y su pelo frente al espejo. Quería verse bien aquel día. Ignoró su entorno, bajando con alegría las escaleras. Ni siquiera las peleas de sus papás le hicieron efecto alguno. Tomó de su café con calma, haciendo oídos sordos. Ignorando el ruido de la mano de su mamá contra la cara de su papá y los furiosos reclamos de éste.

Innevitablemente sus rodillas temblaban, pero inhalo y exhalo, tratando de calmarse.

Cómo dijo la psicóloga, Innie. Tranquilito.

Lavó su taza y se preparó para salir, siendo jalado desde la mochila por su progenitora.

—No quiero niuna wea de llamada hoy día ¿me escuchaste? Estoy chata de escuchar y escuchar weas. -dijo y lo soltó con fuerza. JeongIn asintió y salió, cerrando despacio.

Hasta ahí llegó su felicidad.

Sus manos se crisparon automáticamente, sus uñas rasguñaban su piel sin que él pudiese impedirlo. Trató de tragar el nudo en su garganta pero no pudo.

Hm, se iba a ir caminando al liceo.

Ya se empezaba a notar el frío en las mañanas. Al menos, el viento podía secar sus lágrimas. Esperaba de corazón que ese día no le hicieran nada. Cruzó la pasarela, deteniéndose en medio, mirando el tráfico, enfocando los rostros de algunas personas. Un solo sujeto, dos personas, familias, furgones escolares.

Y se sintió muy sólo. Siguió avanzando, rasguñando sus manos, hasta sentirlas húmedas. Miró hacía abajo, y sus manos se veían rojas de la sangre que salía de éstas, goteando hacía el suelo. Abrió su mochila y se lavó las manos con la botella de agua, limpiándose la cara, tratando de recomponerse antes de caminar las cuadras faltantes al liceo.

HyunJin le siguió de cerca, deteniéndose a ver la mancha de sangre en el suelo. Pensó en acercarse y saludarlo afectuosa y efusivamente, pero espero, y lo vió, deteniendo los rasguños y lavando sus manos.

¿Qué wea?

Avanzó y lo sujetó del brazo. JeongIn se giró, muerto de miedo, mirándolo con terror, calmándose al notar que era él. Pero a HyunJin le dolió, le dolió ver el miedo en sus ojos, cómo tembló bajo su tacto. Miró sus manos, con reproche y pena. JeongIn sintió sus ojos llenos de lágrimas, sintió vergüenza.

—¿Por qué?- preguntó, calmadamente. El menor mordió su labio, sin mirarlo. Hyunjin tomó su mentón con delicadeza, mirándolo. JeongIn sollozó y se escondió en su pecho. HyunJin lo abrazó con fuerza.-Ya... Deja de llorar.... Mira esas manitos.- murmuró, sujetandolas con delicadeza. JeongIn intentó dejar de sollozar, fracasando. Hyunjin alzó su rostro y besó su frente, cerrando sus ojos con fuerza.

¿Qué le había pasado? ¿Qué tanto sufría?

—Perdón...-murmuró, sin mirarlo. Hyunjin bufó.

—¿Por qué me vení a pedirme perdón? ¿Hay hecho algo malo? - preguntó. JeongIn suspiró.

—Ya, vamos al colegio...- murmuró.

—No, no vamo a ir na a esa wea. No vamo a ir, porque mira cómo estai, y pa que esos sapos culiaos vengan a webearte y decirte weas cómo todos los días, aonde, ni cagando.- dijo. JeongIn, tragó saliva. - Y tenemo que hablar serio nosotro. -dijo, tomando su mano. Su corazón se agitó, latiendo rápidamente, queriendo salir de su pecho por aquella intensidad. HyunJin se acomodó la capucha y comenzaron a caminar, en la dirección contraria.- Espero que te guste caminar porque eso vamo a hacer todo el día.

JeongIn asintió, rojo hasta las orejas.

—¿Por qué tan callaito?- preguntó, acariciando su mano. JeongIn quiso responder pero sentía que se iba a trabar mucho. HyunJin lo miró y rió un poco.- Tai mui rojo. ¿Teni vergüenza?

El menor asintió y se escondió en su brazo. El más alto rió y se cubrió la boca con la mano de la ternura.

—Es que eri lo ma lindo que hay caurochico.-dijo. Caminaron, en silencio. JeongIn aspiró el olor a detergente en el poleron adidas del mayor.

Rinso. Aroma primavera.

Este miro el pelito rubio de su niño. Muchas ganas de besuquearlo a lo maldito. Pero no po. Nooo.

Que gei eres jiunyin. Pensó el mayor.

JeongIn suspiró y alzó su mirada, encontrándose con los ojos del mayor. Se sonrojo de golpe.

—Ven, vamos a ir a un museo. - dijo agarrando su mano, entrelazando sus dedos. JeongIn agachó la mirada y asintió. -Yo cacho que al de ciencia porque pa ir al de arte, ya te tengo a vo.

JeongIn alzó la mirada, rojito. Hyunjin le sonrió.

—No digai esas cosas...- murmuró.

—¿Y por qué no? Vo soy la mayor obra de arte que he visto en mi perra vida.-

Hwang, bastaA.

《♡》

Ñiuuuu