40.- ¿Reconciliación? Ella es mi novia y ¿ahora que?

207 15 7
                                    

Siempre he odiado a las personas lerdas y de fuerza bruta.

Cuando tenía doce años podía ver como mis compañeros de clase siempre peleaban. Jalones de cabello, mordidas, golpes en la espalda. Pensé que era estúpido y que obviamente algo mal andaba en su cabeza, quizá porque mis amigos eran aburridos a su manera y los conflictos era algo que se decía de frente y no con golpes. Así que ahora me doy cuenta de lo absurdo y estúpido que era ese pensamiento.

Tres jalones de cabello, dos estirones de rostro ¡Eso fue una mordida! Duele. Mierda. Duele.

Y después de veinte minutos de una decepcionante pelea, hubo un vencedor. Excelente, ahora me encuentro a una aún más molesta Camille de 55 kilos arriba de mi espalda.

—Está bien Camille. Ya entendí, así que creo que deberías levantarte y dejarme respirar bien. —digo aun amable y sin recibir respuesta alguna. —Fue mi error, pero creo que deberíamos aclarar los mal entendidos pequeña –mi tolerancia tiene límite –pienso y volteo a verla —Camille, eres una gran idiota y lastimas mi hermosa espalda, sin mencionar el hecho de que acabas de hacer una mierda con el lindo atuendo que traje hoy. Así que levántate y te pediré que por favor me escuches.

—Siempre te he escuchado Emma. Y para ser sincera tampoco sé porque estoy tan molesta contigo. Supongo que me deje llevar, por una leve crisis de atracción hacia tu ex. Además era divertido verte fuera de tus casillas — responde riéndose y en su descuido logro zafarme y respiro aliviada —eso no lo vi venir. —responde y me mira resignada.

—Escucha Camille. Beck dejo de gustarme hace tiempo. Dejo de importarme Redwood mucho antes de lo que ustedes creen. Eres una chica rara al igual que todos los demás y sinceramente no entiendo cómo es que te enamoraste de un imbécil como él, pero, quiero que sepas que lo de dije ese día, y me refiero a todo lo que escuchaste es mentira. Es obvio que a Beck llegarías a gustarle, después de todo eres su tipo. Yo solo quería poner celoso a Austin, creí que esa sería una buena forma, pero me equivoque. —respondo apenada y casi queriendo callar. Mierda, se supone que no debería ser así. ¿Por qué debo ser tan sincera con ella? Estoy tan molesta y adolorida. Quiero huir. Jamás creí que algún día mostraría mi lado más patético. Eso quiere decir que Austin me gusta mucho ¿no? Nos quedamos calladas un par de minutos y suelto un muy largo suspiro. Será mejor irme, después de todo sabía que nada se resolvería. Camille se levanta y gira hacia mi emocionada y toca mis hombros. Comienza a reír y la miro confundida.

—Emma toda la escuela sabe que le gustas a Austin así como tú gustas de él. Deja ese estúpido orgullo ve, discúlpate y por primera vez se sincera con ese chico|. Porque justamente ahora esta con otra chica riéndome sin mostrar esa horrenda cara que solo a nosotros muestra. —Regaña y comienza a empujarme —Escucha, no estoy molesta contigo, al menos no ahora que te dejaste golpear. No te preocupes por mí. Buscare mi forma de hacer que Beck se enamore. Ahora ve a por el chico.

—Y si al final me rechaza, simplemente debería sonreír y marcharme cierto. Porque al final lloraría... tengo miedo Camille. Jamás había deseado algo y tener esa impotencia de saber que quizá no sea mío —respondo y antes de que pueda agachar mi cabeza la chica me sostiene de las mejillas y pellizcándome sonríe.

—Eso quizá no suceda, pero jamás lo sabrás si no vas y le das una respuesta como debiste haber hecho desde un principio, el también necesita estar seguro de lo contrario ambos seguirán estancados—gruñe y me suelto de su agarre justo cuando ella da vuelta para marcharse —Y Emma. Si rompe tu corazón, nosotras estaremos dispuestas a hacer que tus días no sean tristes. Y a él lo mataremos. —La miro y ambas sonreímos al unísono. Me anima un poco y antes de decir más se marcha. Suelto un leve suspiro y decidida camino para buscar a Austin. Puedo sentir los nervios recorrer mi cuerpo entero, como cuando estás viendo una película de suspenso sin saber que pasara, o como cuando no quieres escuchar los resultados de un examen de matemáticas. Pero la sensación de saber que pasara es más grande que mi miedo. Camino hacia la escuela y pregunto a varios si no han visto a Austin, algunos niegan y varios juran haberlo visto en el segundo piso con la insoportable chica, el cual ellos creen que es una estudiante de honor. Veo a los chicos hacerme extrañas señales y me acerco a ellos. —Kendall ¿Drake? ¿Qué pasa?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 18, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hey! I exist (Editanto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora