Capítulo 14: Desaparecido

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Touma se levantó del sofá de inmediato.

- ¡¿Cómo que no está?! -

Tsurugi explicó lo que pasaba y que había buscado por toda la mansión sin encontrarla.

- Tal vez escuchó la conversación que tenía con Freya. Sobre qué Kuro regresó de Londres-

Entonces Touma tomó las llaves de su auto.

Tsurugi trato de detenerlo pero no lo logró.

- Quédate a cuidar a Mahiru...yo buscaré a Haruhi-

Touma salió y subió a su auto para inmediatamente encenderlo y buscar a su nieta. Tenía una idea de dónde podía estar y rogaba que fuera así.

Por qué si no, él no sabría que hacer.

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La pequeña peliverde miraba la mansión de aquella persona que conocía como señor gato. Ya estaba anocheciendo por lo que debía apurarse si quería llegar de nuevo a la casa de su abuelito.

Caminó hacia la puerta y se puso de puntitas para alcanzar el timbre. Cuando lo logró, retrocedió un poco esperando a que la puerta se abriera. Y lo hizo.

Una mujer era quien le abrió. Ella la reconoció como la mujer que hizo llorar a su madre.

No le alegraba para nada verla.

- ¿Uh? ¿Quién eres? ¿Estás perdida?-

Pero ella no la reconocía.

- Soy Haruhi. Vine a buscar a señor gato-

La Omega se sorprendió tanto de ver a la niña que de inmediato recordó lo que planeaba con ella, así que la dejó pasar.

- Bueno. Señor gato está ocupado pero puedes entrar-

La pequeña peliverde entró, siempre siendo cuidadosa. Confiaba en él peliceleste pero en esa chica no.

Escuchó como cerró la puerta.

La mujer la invitó a sentarse en el sofá a su lado. Ahí fue donde Haruhi vió el abultado vientre que está tenia.
Justo como el de su mamá.

- Ash no debe tardar mucho. Tiene unos documentos que ordenar, pero ya está más relajado-

La peliverde observó la casa a detalle. Era grande pero no tanto como la de su abuelo. Seguramente el "señor gato" tenía mucho dinero como su abuelo.

La Omega se puso de pie lo que en un principio sobresaltó a la niña.

- Te traeré un poco de jugo-

La chica embarazada se fue a la cocina a servir algo de jugo en dos vasos.

<< Me preguntó si con unas gotas bastará... >>

Haruhi por su parte seguía esperando.

Suzuhara regresó con los dos vasos y le dió uno a la pequeña mientras tomaba asiento.

- Perdona que haya tardado. Me es más difícil moverme teniendo a mi pequeño dentro-

La peliverde no entendía nada. Aún era inocente y nadie en su familia le había explicado que significaba "tener un bebé dentro".

Ambas bebieron el jugo de manzana esperando al alfa quien realmente nunca apareció.

Haruhi miró por la ventana y vió lo oscuro que ya era así que decidió marcharse.

Lo Mejor Siempre Viene Después (Actualizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora