MICHAENG (ONE SHOTS)

GET LOUD

Recomendación: Escuchar Get Loud canción b-side del octavo mini album "Feel Special" de Twice.

Ayer alguien me pidió que hiciera una continuación del OS de Love Foolish, así que decidí tomar otra de las canciones para hacerlo, espero les guste~

***

¡Podrías conseguir un escándalo!

Definitivamente vas a conseguir un escándalo.

Has cruzado la línea que he marcado tantas veces, que al fin ha llegado el momento donde me he cansado.

Crees que volverás a ganarme con tus sonrisas baratas, pero estás equivocada.

Deberías parar ya con tus juegos, o encontraras los problemas que te has merecido desde hace mucho tiempo.

Te acercas sigilosamente a mí, pretendiendo seguir con tu pasatiempo favorito: destruirme.

Pero lo que no sabes es que llegué a mi limite, me hiciste llegar a ese límite.

Lo sobrepasaste de tal manera, que, si sigues avanzando a mí, caerás.

Pero poco te importa, piensas que seguirás saliendo impune como las tantas veces que te he dejado pasar.

Pobre infeliz, si supieras que mi paciencia terminó, no estarías con esos aires de grandeza y gloria.

Reconozco que he sido culpable en gran parte de ello, pero hasta aquí llegaste.

-Minari -dices con la voz seductora que muchas veces me quebrantaba a tus caprichos, a tu merced.

Te doy una mirada de "deja de nombrarme o tendrás problemas" Pero te importa poco, sigues pensado que tienes poder sobre mí.

Avanzas, y yo sigo alejándome de ti.

Piensas que todo es parte de tu juego, te has tomado muy en serio ese papel de cazarme como a una presa, te sube el ego que es más grande que altura corporal, y que te ha cegado completamente.

Reviso tu ropa una vez llegas a mí, y efectivamente mis sospechas eran ciertas.

Estabas con ella, revolcándote entre sus sabanas, y pretendes que yo toque tu cuerpo sucio de alguien más.

Doy una cachetada a tu rostro, y la sonrisa se te borra.

Me miras con cara de confusión mezclado con enojo, y ahora soy yo la que suelta una risa al mirarte.

-¿Qué pretendes Son? ¿Qué te reciba con los brazos abiertos después de que has estado con alguien más?

Intentas acercarte nuevamente y yo te empujo lejos de mí.

-Minari mi amor, estuve en una junta, no ha sido nada de lo que piensas.

Sigues usando tus tácticas, pero ellas ya no surgen efecto en mí.

-Durante estos dos años, he descubierto cada una de tus mentiras, ¿y aun pretendes que te crea?

Buscas llamar mi atención desesperadamente, pero yo ya he tomado mi decisión, hasta aquí he llegado.

Tus palabras crueles y acciones banales, son fáciles de escribir, pero ahora que te estoy encarando, que por fin he sido valiente para poner un alto, te cuesta mirarme.

¡Cobarde!

Me dirijo al cuarto, a recoger mis cosas.

Tú sigues incrédula, y me miras con escepticismo.

Pero cuando descubres que tengo listas mis maletas, y que no queda nada mío en el lugar, empiezas a perder la cordura.

Corres y me abrazas suplicando que me quede, pero haz hecho que caigan peligrosamente una a una las fichas de dominó.

Cada una de ellas representa las mentiras, los engaños, los abusos que me hiciste, con cada una cayendo, ibas perdiéndome y a ti no te importó... hasta ahora, que te das cuenta que ha llegado tu fin.

Cada una de nuestras amistades fueron dándose cuenta de tu mal trato, y tus traiciones, las miradas y palabras a tus espaldas se intensificaban con el pasar del tiempo, pero tú como siempre lo ignoraste, pensando que siempre te saldrías con la tuya.

Ahora te das vuelta, y con la mirada en el pasado caes en cuenta de que te has equivocado.

Pero, ya es tarde. Ya nada importa, ya no me importas.

Te arrodillas, y me dices que me amas.

-Sé que tú también me amas Mina, no me dejes.

Te miro, y todo en mí se retuerce, se revuelve.

Tienes razón, yo también te amo.

Pero, aunque me demoré demasiado en darme cuenta de ello, me amo aún más a mí.

-Es tarde para esto, jamás te diste cuenta a tiempo de las cosas. Te has quedado completamente sola.

Tomo mis cosas, y camino a través del pasillo escuchando lo que parecen ser tus sollozos, mientras pronuncias mi nombre.

Ya no me importa, ya no tienes efecto en mí.

Te das cuenta de que estás perdida en un laberinto, en donde te costará la salida porque estabas tan cegada por tu yo ególatra.

Me quedo en la sala de estar esperando que llegue el auto que he pedido, y vuelves una vez más a mí.

Me miras, y yo solo suspiro pesado.

-¿De qué se trató toda esta historia para ti? ¿No te importó, verdad?

Intentas refutar, pero las palabras al parecer no te salen, ya no sabes que inventar.

Sonrío amargamente, es tan difícil todo esto, pero no puedo seguir aquí.

No puedo permitir que sigas matándome lentamente con tu toxico amor, en el que yo siempre pierdo y tú ganas todo.

Las flechas que me disparaste, se han acabado.

Y estoy totalmente segura que todo lo que me hiciste, se te regresará algún día, mientras que yo en estos momentos siento que mi herida pronto se sanará.

Construiste a tu manera las fichas de dominó, no te detuviste, y justamente ahora las puntas de mis dedos están cada vez más cerca de ellas.

¿Quién podrá ganar esta vez?

Es más que obvio, que llegó tu final.

Cruzaste la línea, ignorando las señales cada vez que la cruzaste.

Contuve mis tristezas y enojo por mucho tiempo, y la última advertencia no la escuchaste.

Mi corazón no lo soportó más y así fue como mis dedos derrumbaron tus piezas de dominó.

Adiós.