Debe ser mía (Editando)

Me observan?

Habían paso dos días desde que la pelinegro se separó del grupo de Yokais, en todo este tiempo Aome pensaba en todo lo que le había pasado, pensó en sus supuestos amigos, en su deber como Miko de Shikon, también en lo dicho por Midoriko, en sus nuevos poderes, en su extraña relación con Sesshomaru y el general Inu no Taisho, en especial en el general tenía tantas dudas pero sabía que debía enfriar su mete pues lo más importante era la perla no ella y sus problemas de adolescente, mientras pensaba se ponía a revisar el área pues le extrañaba tanta tranquilidad, después del medio día el calor la hizo buscar un lago o estanque para refrescarse y claro encontró un hermoso lago con aguas tan cristalinas que podías ver el fondo de este, la joven sin temor alguno comenzó a desvestirse, creo un campo de protección al rededor de todo el lago así nadie podría acercarse a ella o a sus cosas, la joven lentamente se introdujo a las frías aguas disfrutando de la frescura de ellas, estaba disfrutándolo tanto que no noto que a lo lejos dos pares de ojos la veían, unos azulados que la veían con dulzura mientras que los otros ambarinos que  estaban sedientos de lujuria.

*Pensamiento Bankotsu- Valla que es realmente hermosa, no puedo creer que ese ángel llorará por un sucio Hanyu, además se supone que las Miko deben eliminarlos no enamorarse de ellos, pero estando serca de ella me siento tan tranquilo, es una pena que ese maldito de Naraku me mande a vigilar a esa miko muerta y su grupo.

Mientras Bankotsu suspiraba por tan bello ángel que nadaba, los pensamientos de otro no eran tan puros, eran un tanto perturbadores asechaban a la joven.

*Pensamientos Inuyasha- Maldita sea, esa idiota a puesto un campo de fuerza, debo hacerla mía, me importa una mierda lo que mi Padre o el inútil de Sesshomaru digan, Aome siempre será mía, seré paciente una vez salga del campo la tomaré por las buenas o las malas, así podré marcarla como mi concubina, podré tener a ambas, tanto Kikyo como ella solo vivirán para complacerme.

Después de 20 minutos la hermosa joven futurista salió del agua, con cuidado comenzó a secarce y vestirse, una vez hecho estaba por retirarse campo de protección, cuando se percató de dos precencias y una portaba un fragmento justo en ese momento tomo su arco y sin dudar lanzó una flecha hacia Inuyasha flecha que paso rosando su mejilla dejando una quemadura sumamente dolorosa a su paso.

Inu- Pero que demonios te pasa Aome, se puede saber porque me atacas?

El Hanyu no dudo en salir de su escondite para reclamar a la joven aún segura tras su campo de fuerza.

Aome- No tienes nada que hacer aquí Inuyasha, vuelve con Kikyo y aléjate de mi, esa flecha fue una advertencia, la próxima irá justo a tu corazón.

La chica se dio la vuelta dispersando el campo de fuerza y comenzó a caminar, entre las sombras un joven de ojos azules que había visto todo sonreía con agrado, le encantó ver ese cambio en la joven y más aún como le había hablando al sucio Hanyu, por si acaso decidió seguirla un poco más por si el perro no había entendido el mensaje y por si ella corría peligro cosa que creía imposible.

Tres días más tarde el chico de ojos azules comenzaba a fastidiarse que acaso ese perro no se cansaba de ser rechazado y hasta humillado por la chica, ella lo dijo muy claro la próxima vez lo mataría, con forme el tiempo pasaba vio con diversión cuando la joven lo dejo clavado a un árbol o estrellado en el suelo, quería salir y despellejar a ese Hanyu, pero ese día era diferente la chica tenía una dirección y con cada paso está sonreía más eso lo inquieto un poco.

Toga- Aome, que gusto que estés bien pequeña!.

El de ojos azules veía con algo de desagrado al hombre que se acercó a la chica, la abrazo con tanta dulzura que casi podía jurar que era su amante o algo por el estilo y eso en nada le agrado, pero debía esperar, quería saber más de ella.

Aome- Si creo que ya he podido pensar lo suficiente, además hace unos días me tope con Inuyasha y...

La chica no puedo seguir hablando cuando oyó la voz de un peliplata, este le regañaba por el encuentro con el Hanyu.

Sessho- Que quería ese mestizo?, Esta vez le arrancaré la cabeza, ya me tiene arto, que no se supone que por eso te cambio por la muerta esa, dime qué le lanzaste una flecha por lo menos.

El tono de voz del Yokai era demandante y el joven de ojos azules lo veía con asombro había oído rumores de el se conocía como el Lord más sanguinario de todos, pero parecía un niño haciéndole una rabieta a su madre.

Aome- No tengo idea, lanze una flecha que quemó un poco su rostro y le advertí que se alejara, que la próxima flecha iría a su corazón si volvía a molestarme, aunque seguí encontrándolo y termino pegado al estrellado en el suelo o colgando de algún árbol gracias a mis flechas.

Lo dijo de una manera tan tranquila y lo finalizó con una cálida sonrisa qué hasta parecía tierna.

Toga- Pero estás bien, no intento nada?

Aome- No lose, hiba saliendo de tomar un baño cuando el apareció, pero sentía muy perturbada su aura por eso le dispare, no parecía el mismo de siempre.

Toga- Hiciste bien, al parecer por los celos que Inuyasha siente hacia Sesshomaru tratara de hacer que vuelvas a su grupo, aunque talvez también sea mi culpa por la amenaza de la vez pasada.

Fue el razonamiento del pelinegro y claro el de ojos azules prestaba suma atención a cada palabra.

Sessho- Jum ese mestizo debe entender que ahora estás bajo mi cuidado, si trata de acercarse una vez más no tendré piedad.

Aome- Se cuidarme, puedo hacerme cargo de el yo sola y a propósito donde está el joven Kaname?

Justo en ese momento un apuesto joven salía de entre los árboles.

Kaname- Hola Aome, me extrañaste y por eso volviste antes?

Dijo con una sonrisa arrogante que hizo que más de uno quiciera golpear su rostro.

Aome- Solo terminé de pensar las cosas y es necesario seguir nuestro camino.

Kaname- Me alegro, así todos podremos descansar en el palacio, una vez tengamos probiciones y estemos descansados continuaremos.

Aome- Continuaremos?, Acaso usted viajará con nosotros?

Kaname- Así es mi hermosa dama, después de todo soy el príncipe de estas tierras, no podría dejar a una hermosa dama como usted vagando sin protección.

En ese momento un gruñido saco al joven príncipe de sus ensueños.

Toga- Me párese joven Kaname que olvida que Aome no se encuentra sola y mucho menos desprotegida, aunque si nos será de ayuda pues debe conocer bien su territorio.

Sin más siguieron su camino al palacio de nuestro joven Lord, mientras entre las sombras el Hanyu quien así como el ojo azul había visto y escuchado todo decidio marcharse pues no tenía posibilidad de entrar en un castillo, por su parte el ojo azul estaba más que facinado con la bella chica pues se sorprendía que no solo el Hanyu la deseaba también esos Yokais sangre pura o eso creía el, así como el humano pensaba que talvez había más en ella de lo que podía apreciar, después la volvería a buscar y quién sabe talvez logré atraer su atención.