Debe ser mía (Editando)

Vuelve

Inuasha estaba en completo Shock, ante el su padre, pero como era posible esto, acaso era una ilusión o se había vuelto loco, no el podía olerlo, podía sentir su precensia, pero como había pasado esto.

Toga- Te lo aldvierto cachorro vuelve a hablarle de esa manera a Aome y yo personalmente te arrancaré la lengua.

Sin más el Inu libero a su hijo del agarre y se dirigió hacia el grupo donde su hijo mayor y su querida miko lo esperaban, mientras el se alejaba lentamente Inuyasha se ponia de pie.

Inu- Porque?, Dime porque demonios la proteges, no es más que una tonta niña llorona que no sabe cuidar de ella misma, ella jamás debió estar aquí en primer lugar.

Inu no paro su andar y volteó de medio lado y logro divisar el rostro algo molesto de su cachorro.

Toga- Sigues siendo un cachorro Inuyasha, te falta mucho por aprender de esta vida, pero si te diré algo, si esa niña llorona como tú la llamas, no hubiera llegado aquí tu seguirías durmiendo en ese árbol por culpa de la flecha que esa miko te lanzó, le debes la vida y aún así te atreves a tratarla de esa manera tan irrespetuosa, no cabe duda que eres una desgracia.

El grupo de Sesshomaru decidió seguir y buscar un lugar más cómodo y lo más alejado del joven Hanyu, por alguna razón tanto padre como hijo deseaban que la chica olvidará ese mal rato, al paso de una hora la joven miko tomo a ambos infantes que estaban quedándose dormidos en el lomo del dragón de dos cabezas, era una noche fría y los pequeños necesitaban calor para dormir bien, ese gesto removio algo en el corazón del Inu y también llamo la atención del Lord, la imagen de la chica con ambos cachorros en brazos era más que enternecedora, se veía como una madre durmiendo a sus pequeños.

Toga- Creo que debemos parar, los cachorros están exaustos.

Sin más el grupo comenzó a acomodarse para pasar la noche, la cual era demasiado helada para los cachorros.

Sessho- Jaken, enciende una fogata, Rin enfermara con este frío.

Tan pronto su amo le dio la orden el demonio sapo encendió una pila de leños que su amo había colocado en el centro del grupo, una vez hecho corrió en busca de más leños para pasar la noche, la joven había hecho una cama con algunas mantas y abrigado a los niños con otras, ella los veía con tanta ternura y con el brillo de la fogata y el resplandor de las estrellas Aome se veía como una diosa caída del cielo, Toga veía encantado a la joven y su hijo quien había notado la mirada de su padre no comprendia lo que le sucedía, que tenía esa mujer para tenerlo así, aunque una leve brisa llevo al Lord un aroma que lo lleno de más dudas, el recordaba claramente la vez que descubrió a su padre viendo a Izayoi, pero la mirada de su padre era diferente más intensa y verlo sonreír asi le causo más curiosidad, era acaso esa mujer de interés de su padre y porque a él no le molestaba como ocurrió con Izayoi acaso el la estaba aceptando como compañera de su padre, tendría que averiguar más, además presentía que Inuyasha sería un problema.

Sessho- Este viaje se irá tornando más peligroso.

Toga- Tienes razón, será muy pesado para los cachorros, en especial para la pequeña, quizá debamos dejarlos en el castillo al resguardo de los soldados.

Aome- Tienen razón, estaremos rodeados de muchos peligros, ellos aún son muy pequeños para estar en este tipo de cosas, si no es molestia Lord Sesshomaru, me gustaría dejar a ambos al cuidado de sus soldados.

Sessho- Mañana al amanecer partiremos al palacio, Jaken será el encargado cuidar de ambos.

El pequeño demonio verde que yacia dormido junto al dragón dio un pequeño brinco entre sueños, quizá singno de que sabía que algo malo le pasaría, la noche paso en calma, ya casi serca del amanecer nuestra Miko Yokai se despertó y decidió buscar algunas frutas para desayunar, mientras se adentraba más en el bosque logro sentir una precencia que la seguía de serca, molesta por ello detuvo su andar.

Aome- Sal de una vez Inuyasha.

De entre las copas de unos árboles el Hanyu salió y calló justo frente a la mujer.

Aome- Que buscas aquí Inuyasha, los fragmentos los guarda Sesshomaru así que no ganarás nada atacandome.

Inu- Aome, yo.... Quiero disculparme actúe por impulso, es que..... Diablos me lleno de coraje verte con el estupido de Sesshomaru y bueno también el verte con ese sujeto aunque sea mi "padre" no me da confianza, por eso, por eso quiero que vuelvas con migo, viajemos juntos, como antes solos tu y yo.

Aome veía con cuidado al platinado, ahora se preguntaba cómo es que antes se había enamorado de alguien como él, desde que comenzó a viajar con Inu no y con Sesshomaru se sentía mucho más en calma y segura algo que jamás sintió con Inuyasha, además debía admitir que el antiguo Lord del Oeste era mucho más atractivo que sus hijos por un momento trato de borrar ese pensamiento del macho que últimamente la tenía confundida y pensó en lo dicho por el hanyu quizá antes hubiera aceptado irse con él sin dudarlo, pero ahora...

Aome- Me temo que no es posible Inuyasha, tengo un deber que cumplir y para ser honesta ya no confío en ti, escuché lo que hablabas con Kikyo que planeabas destruir el pozo para que no volviera, que me quitarias los fragmentos para traerla a la vida, ya no soy la tonta que corría a tus brazos, ya no más, admito que antes te ame pero ahora solo eres un estorbo para mi  ahora viajo con Sesshomaru y también con Inu no Taisho, creo que es más que obvio que no te necesito para nada, soy más que capaz de seguir sin ti.

Para desgracia de la chica el Hanyu no tomo muy bien lo dicho por ella y se lanzó a atacarla con colmillo de acero en mano, cuando estaba por utilizar el viento cortante la espada volvió a su forma original un pequeña y frágil espada occidada en ese momento de entre las sombras salieron ambos Inu.

Sessho- Valla que eres tonto hermanito, juraste en la tumba de nuestro padre proteger a esta mujer con tu vida y ahora tratas de matarla con la misma espada con la que pretendías protegerla.

En ese momento la espada comenzó a palpitar y de un momento a otro comenzó a herir la mano de Inuyasha.

Sessho- Con tu permiso padre.

El mayor dio un leve asentamiento y su cachorro en un susurró dijo.

Sessho- Yo Sesshomaru Taisho juro con mi vida proteger a Rin y a Aome quien es compañera de mi padre.

Esto último fue prácticamente inaudible aún para su progenitor, sin más la espada voló directo a manos del Lord quien no dudo en tomarla y colocarla junto a colmillo sagrado.

Toga- No cabe duda que eres la mayor desgracia Inuyasha, te recomiendo que vallas donde Totosai por una espada nueva o perderás el control y matarás a todos a tu alrededor y te advierto que la próxima vez no dudaré en matarte.