Cada vez más cerca

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Podía sentirlo, la pista del dueño de la taberna lo llevaría a estar un paso más cerca de Jaskier. Iba a galope encima de Sardinilla cuando a lo lejos vio aquel lugar de mala muerte llamado "El caldero" donde todas aquellas almas que simplemente no tenían a donde más ir debido a alguna deshonra, a que estaban escapando, huían de algo... o alguien, simplemente habían visto esa manera como la única para poder sobrevivir en un mundo como este. Geralt bajo de su yegua y comenzó a caminar hacia los establos..sin duda tendría que pasar la noche aquí si quería conseguir algo de información. Esta vez no había nadie que recibiera a su caballo pero el lugar se veía relativamente bien, no había ningún agujero en el techo lo cual ya era ganancia                    -Espérame aquí, vendré por ti en la mañana intenta descansar- le dijo, Sardinilla le respondió dandole un leve cabezazo en el pecho -Si lo se, lo encontraremos- y dándole una palmada en el lomo caminó hacia la puerta, comenzaba a nevar así que esperaba que Sardinilla no pasara frío...ni Jaskier donde fuera que estuviese. Al entrar lo primero que sintió fue mucho calor, era un lugar con muchas velas prendidas, un bello escritorio en medio, justo alado de unas escaleras de madera..para ser un lugar de mala muerte se veía bastante lujoso "típico de Jaskier" pensó Geralt. Se acercó al escritorio y espero a que saliera alguien, como lo esperaba detrás del escritorio había unas cortinas de tela fina de la que salió una muchacha rubia con los ojos cafés y un vestido largo hasta los tobillos -Vaya, no esperábamos tener a un brujo en la lista de esta noche- le dijo recargando los hombros en la madera del escritorio -Bueno...simplemente pasa- le dijo muy calmado mirándola a los ojos, ella le sonrió y sacó una libreta -Muy bien...supongo que conoces las reglas, nada de preguntas, nada de peleas ni daño a las chicas- le dijo y el asintió, ella pareció satisfecha con su respuesta -Bien.....¿con qué podemos satisfacerte esta noche?- le pregunto mordiéndose un labio coquetamente, Geralt sabía que no podría preguntarle directamente sobre Jaskier así que tendría que ser más listo, entonces recordó el nombre que le había dado el hombre de la taberna -He oído que Ross Marie sabe como satisfacer a un hombre- le dijo, la chica lo miro con algo de duda pero después asintió, anoto algo en su libreta y se volteó para entregarle una lave -Serían 10 monedas de oro- le dijo sin entregarle la llave todavía, Geralt sacó su saco de monedas como 4ta vez en el día y le entregó el dinero - Que pase una noche placentera Brujo- le dijo mirándolo con ojos de depredadora y entregándole la llave, el asintió y comenzó a subir las escaleras pero recordó algo -Oh por cierto..Mi yegua esta en sus establos, que alguien vaya a atenderla- le dijo, ella asintió -Enseguida mandaré a alguien, usted estese tranquilo y disfrute su noche- le guiño el ojo y volvió detrás de la cortina.

Ya en el cuarto a Geralt no le quedó duda que Jaskier había estado ahí, todo era de lo más lujoso que podías encontrar, una cama grande de roble estaba en medio y de las estructuras caían largas cortinas que daban privacidad, del otro lado del cuarto había una bañera grande como para dos personas con diferentes menjurjes alrededor colocados en la pared, había velas y un candelabro colgaba del techo. Comenzó a quitarse la armadura y las espadas, colocándolas a un lado de la cama y comenzó a moverse por la habitación...minutos después escuchó que tocaban la puerta y una chica de cabello pelirrojo y una bata de baño entraba al lugar, eso explicaba como era que Javier había caído tan rápido...más de lo que acostumbraba. -Brujo.....estoy a su servicio- le dijo y él se acercó a ella tomándola en sus brazos y dando inicio a una candente noche.

A la mañana siguiente, cuando el sol aún no había salido y solo se podían apreciar sus rayos, Geralt y Ross Marie se encontraban en la cama tapados, Ross acariciando las cicatrices en el pecho de Gerat con sus delicadas manos -Anda...pregunta, como me las obtuve- le dijo Geralt y después de un momento ella negó con la cabeza -No lo creo, no hoy- y luego se paro de la cama para mirarse en el espejo, esto desconcertó mucho a Geralt, era muy raro es más casi imposible que no le preguntaran de sus cicatrices, entonces entendió -Dime brujo, cuál es la verdadera razón por la que estás aquí, no cualquiera llega y pide a una mujer por su nombre sin preguntar antes por su aspecto físico. O estas buscando algo que es lo más probable o simplemente eres un tonto por creer en lo que te dicen sin antes pedir que te muestren si es verdad o no- le dijo y se sentó a la orilla de la cama mirándolo fijamente, Geralt sonrió, era difícil que lo sorprendieran -Tienes razón, vengo en busca de información y creo que tú me la puedes dar- le dijo sentándose para que quedaran viéndose fijamente -¿Y qué gano yo si te ayudo eh?-  le dijo retándolo acercándose más a él- creo que ya te diste una idea esta noche-  le dijo mirándola fijamente a los ojos, hubo un silencio y ella asintió -Muy bien dime, ¿Qué buscas?- le pregunto y Geralt dio un suspiro que no sabía que estaba guardando -Hace unos días trajiste aquí a un bardo llamado Jaskier, estaba cantando esa noche y quiero saber que fue de lo que hablaron, cualquier cosa que te haya dicho puede ser útil- le dijo y ella comenzó a reírse -Pobre bardo, enserio que me compadecí por el. Esa noche estaba cantando tan tristemente que era imposible que alguien no se aprovechara de el, nadie le prestaba atención realmente y cuando dejo se cantar fue a la barra a pedir unos cuantos tragos, vaya que se puso ebrio...creí que podría aprovecharme de él- le dijo y a Geralt le hirvió la sangre de solo pensar que alguien se aprovechara de la condición de Jaskier... que él habia provocado. Pero de repente la expresión de la joven cambió a una de melancolía -Pero...no pude...su expresión era tan triste..tan profunda...simplemente tomaba y las lágrimas salían de sus ojos sin que pudiera controlarlas..después miraba su instrumento y volvía a tomar. Iba a dejarlo ahí pero un hombre comenzó a acercarse a él no con las mejores intenciones así que llegue y comencé a hacerle la plática...después acabamos aquí y creo que supones qué paso después- le dijo y regresó a acostarse en la cama pero Geralt la miraba sin confiar -me cuesta trabajo creer que alguien como tu no se aprovechara de la situación y decidiera ayudarlo- le dijo Geralt mirandola sospechosamente, ella simplemente se encogió de hombros -No somos completamente desalmadas sabes brujo- le respondió sentándose -¿Qué más te dijo?- preguntó Geralt sin creerle todavía -Bueno..después de esa noche a la mañana siguiente se veía solo un poco más animado, estaba preguntándose si debería seguir tocando..al parecer alguien le habia dicho que su música era tan buena como comprar un pay y descubrir que no tenía relleno- le dijo mirando al techo, Geralt se puso tenso -En fin le dije que no era cierto y dijo que seguiría intentando componer música de otro tipo que no le recordara tanto a ese alguien que quería olvidar- le dijo y se levantó para quedar cara a cara con Geralt-Suficiente charla, es hora del pago- y así se le abalanzó, comenzando así otro momento candente entre los dos.
Tres horas más tarde Geralt había pagado su deuda y estaba vistiendose para salie en busca de Jaskier. Mientras Ross Marie lo admiraba desde la cama  -Hay algo más, dijo que intentaría en un pueblo que esta a 30 minutos de aquí a caballo, tocaría en unas cuantas tabernas e iba a  probar su suerte para ver si la corte del rey lo aceptaba- en ese momento el corazón de Geralt se detuvo, paro de colocarse la bota y corrio hacia la hiven agarrandola de los hombros -¿sabes si tuvo éxito?- le dijo desesperado, ella por primera vez lo veía con algo de miedo por ella -Yo..yo no lo se..tendrías que preguntar en el pueblo, Pitmont es el que se encarga de las reuniones con el consejo del rey, pregúntale a él- le dijo cerrando los ojos, Geralt se dio cuenta que la había espantado y la soltó inmediatamente, luego sin decir nada volvió a colovarse sus cosas y cuando estubo listo se paro en la puerta -Te creo, gracias por ayudar a Jaskier y por tu ayuda- dicho eso salió corriendo y sin mencionar una palabra más o hablar con alguien corrió a los establos y montó a Sardinilla qud por alguna razón ya tenía colocada la silla -¡Vamos Sardinilla!- le dijo saliendo del establo y comenzo a galopar lo más rápido que pudo "Espero que no lo hayan atrapado..¡maldita sea Jaskier! por qué eres tan descuidado" gritó en su cabeza esperando que el bardo no hubiera tenido exito en atraer la atención del rey.

Mi único amigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora