AMOR PSICÓPATA (SEGUNDA TEMPORADA)

CAPITULO 28 ÚLTIMA BATALLA

Narra Jeff

La amenazante sonrisa de Offenerman se notaba en su cara, esa era su sonrisa característica cuando iba a matar a alguien. La pequeña sabandija tembló, se notaba el miedo, en sus rasgos y en sus ojos que, aunque parecían querer imponerse aún tenía miedo como lo que era, una niña pequeña.

Y al igual que las demás, cada individuo que era mujer tembló, aunque los hombres igualmente sintieron angustia, pude verlo en los ojos de aquel que venía de rojo.

Comenzó a acercarse lentamente a ellos, ¿estaba planeando tomar a la mocosa tan rápido? De pronto aquella mujer parecida a un panda llamada Zero, se interpuso.

- Ni siquiera lo pienses fideo de mierda – dijo mientras con su maso lo amenazaba, aunque claro temblando de miedo.

- Muévete querida – dijo Offenderman con un tono dulce – papi debe discutir unas cosas.

Sin dar tiempo de nada, Zero se abalanzo contra él, en ese momento había iniciado la batalla.

Era de esperarse que Zero tenía algo en contra de Offednerman, parecía ser una rivalidad que hubiera estado desde hace mucho, ¿algo le habrá hecho? No tuve tiempo para pensar si ya se habían visto antes, tal vez durante la pelea anterior, cuando uno de los muchachos de videojuegos me estaba atacando, era aquel maldito erizo azul.

- Eres demasiado lento – me dijo mientras con sus uñas rasgaba mi espalda. – Tiene sentido para alguien tan débil que se enfrenta a dios.

- No te gusto que recortara tus púas la última vez idiota – dije mientras me ponía de pie y empuñaba mi cuchillo.

- Vamos a jugar un buen rato... - dijo mientras se ponía posición de ataque.

Mientras nosotros batallábamos, me pude dar cuenta en algunos volteos rápidos que todos los del bando de aquella mocosa ya habían salido, había varios nuevos miembros en su grupo, y todos se dirigían a atacar a los endermans restantes, Cabadath y Slenderman.

No podía poner atención demasiado tiempo, ya que tenía que concentrarme en mi oponente, aquel erizo azul era demasiado rápido, y con un poco de los poderes de Zalgo era una amenaza escurridiza e irritante.

Narra Leonel/Red

Las cosas parecían ir demasiado bien, los teníamos bajo nuestro poder, mientras los distraíamos lo suficiente una pequeña comitiva se había empezado a mover hacia la casa.

Solo se encontraban ellos cuatro, por lo visto no estaban preparados para nuestra llegada, eso hacia las cosas más fáciles, nadie más se aparecía, además teníamos una ventaja demasiado grande. Aquellos pobre ilusos no sabían lo que les esperaba, la pequeña Lazary hija del gran Zalgo, podía drenar los recuerdos de su víctima si así lo eligiese, y Kiyuuli que había sido compatible con ella, era una valiosa fuente de información.

Sin embargo, la gran sonrisa que tenía al ver la cara de desesperación de Offenderman se desvaneció en cuanto él comenzó a acercarse de forma tranquila pero amenazadora, aquella sonrisa que mostraba, sus pequeños ojos morados que comenzaban a asomarse bajo aquella tez palida que no debía tener ningún rasgo.

Su aura incluso se sentía demasiado amenazante, rara, irresistible. Como si quisieras ir a tu propia muerte, pero al mismo tiempo huir. Esa cara que vi y note me dejo helado, debía sacar a la pequeña Lazary de ahí, esa cara la conocía también, pues fue la misma que él me mostró cuando no quise cumplir el trato.

Pero no podía moverme, me sentía paralizado, demasiado, frío como un cadáver tieso, él se acercó más, yo solo veía con miedo y atención aquella cara. Era algo sorprendente para mí el sentir aquella sensación de miedo, pues nunca en mi vida la había tenido, pensé que después de aquella humillación solo sentía la ira burbujear dentro de mí, pero estaba equivocado el efecto secundario de haber sufrido tal humillación era está el miedo mismo.