Tomado del foro de la madrastraCréditos a su autor

CAPÍTULO NUEVE

++++ Una semana después, set de grabación ++++

Nada fue distinto esa semana, salvo pequeños momentos de incomodidad similares al que habían vivido la semana anterior, pues su rutina familiar era la misma y tenían que convivir con eso.
Victoria no sabía o mejor dicho no quería sentarse a pensar en lo que estaba pasando, en lo que estaba sintiendo, ella había conversado esa semana con su gran amiga a la que por supuesto le contó todo, le describió lo que él le hacía sentir pero también le repetía que no había dejado de amar a su esposo.
César estaba a punto de hacer un corto viaje, era el invitado de honor de un festival de cine, a los 2 días regresaría a las grabaciones.

++++ Comedor Televisa 2:00pm ++++

Ambos comen juntos como en los últimos días.
Victoria: espero que me traigas algo del viaje?
César: seguro que sí.
Victoria: un collar de perlas estará bien (en tono de broma)
César: estaba pensando en un vestido de novia (también bromea)
Victoria: estoy segura que me extrañarás.
César: si, pero tú más a mí.
Victoria: claro que no, al contrario, descansaré de ti!
César: mentirosa, extrañarás mis obsequios, mis bromas, etc y me llamarás cada 5 minutos para preguntar cómo estoy.
Victoria: oye no aspires a tanto (y empiezan a reírse)
César: vamos, es verdad confiesa que estás babeadita por mí, anda dímelo que no me molestará escuchar tu declaración de amor.
Victoria: (sigue riéndose) estás loco! y por eso es que te voy a extrañar!
César: lo confesaste! Pero tranquila reina que yo regreso, no te vayas a deprimir ni vayas a perder el apetito si?
Victoria: qué ridículo eres! (y empiezan a reírse)

Volvieron a grabar ese día, les tocaba escenas diferentes y así que no grabaron juntos esa tarde. Pero ambos estaban muy pendientes el uno del otro, César no dejaba en pensar en ella y ella no dejaba de pensar en el viaje que él haría con su esposa. Esa noche un grupo de actores de pusieron de acuerdo para salir a cenar después de las grabaciones, Victoria y César aceptaron.

++++ Camerino de Victoria 9:00pm ++++

Vicky entró algo apresurada, no tenía mucho tiempo para cambiarse de ropa porque todos tenían prisa. Se empezó a desvestir cuando notó algo en el sofá. Se acercó algo extrañada a la caja, pues los obsequios de César se supone que eran en las mañanas.
La abrió y si, al juzgar por el objeto tenía que tratarse de César, era una megáfono con un lazo en un extremo, lo sacó sonriendo confundida y encontró una nota.

PORQUE QUIERO QUE TODO EL MUNDO LO OIGA CUANDO TE ATREVAS A DECIRME QUE ME AMAS...

+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Por qué tenía César esa forma de sorprender a Victoria? por qué era tan impredecible para ella que creía que ya no podía sorprenderla?, pero eso no era precisamente lo que le intrigaba a nuestra protagonista pues en el fondo le encantaba sorprenderse con la creatividad de César, lo que realmente le preocupó era el significado de ese obsequio que la invitaba a animarse a decirle que lo amaba. Por qué César le diría eso? Acaso a ella se le nota que lo ama? Acaso él cree que ella también lo ama? Él está esperando que ella lo haga?  Sólo una última pregunta, sería posible que ella también lo amara?

++++ Estacionamiento Televisa 9:20pm ++++

Varios actores del elenco estaban platicando amenamente recostados sobre sus autos poniéndose de acuerdo a dónde irían, de la familia San Román, sólo estaban Jacqueline Andere y Margarita Isabel, también estaban Eduardo Capetillo, Ana Martin, Cecilia Gabriela, René Casados, César Évora y Salvador Mejía, esperando por supuesto a Victoria.

Victoria: (sale del ascensor casi corriendo) lo siento, les juro que me cambié lo más rápido que pude.
René: menos mal! Sino imagínense! (todos ríen)
Victoria: es que un perturbador obsequio me retrasó (mira a César y sólo ambos comprenden el asunto)
Ninguno entiende lo que quiso decir y le empiezan a preguntar de qué obsequio habla
Ana Martin: ay ya estuvo bueno, yo me muero de hambre y quiero que nos vayamos a comer! Si quieres allá nos cuentas eh! Es más nos hablas de tooodos tus obsequios. (lo dice tan graciosamente que todos echan a reír)

Eduardo: bueno, y qué quieren comer las damas?

Imagínense el barullo que hubo en ese instante, cada una nombraba un tipo de comida distinto, los hombres sólo se miraban entre sí y esperaban que ellas terminaran de cotorrear y se pusieran de acuerdo.
Victoria miraba a César en medio del alboroto e intercambiaban sonrisas, pero aún no se decían nada, ella no había llevado auto ese día, iría a su casa con una compañera.

Eduardo: me permiten? (tratando de callarlas) por qué no vamos Los Girasoles?
Ana Martín: girasoles, tulipanes, claveles, lo que tú quieras mi amor pero vámonos de una buena vez si?   Por supuesto todo era divertido, empiezan a distribuirse en sus autos, algunos iban juntos.
Victoria: Yo con quien voy?
Muchos le ofrecieron su auto incluyendo César que fue al que aceptó.
Uno a uno empezaron a salir los autos del estacionamiento siguiendo al de Eduardo.

++++ Auto de César 9:35pm ++++

Estaba retrasándose, esperando que el resto se alejara un poco.
César le sonríe a Victoria y se acerca a besarla, ella le devuelve la sonrisa y también lo besa.

César: te gustó mi obsequio (en tono burlón, mientras se secaba los labios)
Victoria: si, un megáfono es lo que toda mujer desea tener!... (se burla también y ambos ríen)
César: me encantaría saber qué explicaciones das ante los obsequios que te doy.
Victoria: no tienes idea todo lo que me invento, el otro día mi muchacha vio el libro en blanco que me diste y me dijo señora no me diga que va a escribir un diario, lo peor es que tuve que decirle que si.
César: (ríe con ella) hazme un favor, guarda mi celular en la guantera.
Victoria: (le saca el celular del bolsillo de la camisa, abre la guantera y lo pone en ella) pero qué desorden! (ve ahí cds, el cargador del celular, estuche de los lentes, perfume y varios objetos)
César: respete mi desorden señora (regalándole una sonrisa)
Victoria observaba cada uno de los objetos con curiosidad tratando de conocer algo más de él.

Victoria: (mientras cierra la guantera) y a qué hora sale tu vuelo?
César: a las 6:30 de la mañana, tengo que estar ahí muy temprano.
Victoria: y qué día se vienen?
César: el viernes en la mañana, por la tarde iré al canal. (era martes)
Victoria: pues aprovecha en relajarte no? Osea tanto trabajo, tanto estrés, aprovecha y pasea. (su tono era normal, no era irónico pero había una incomodidad en el ambiente)
César: eso espero, poder pasear al menos, tengo tanto tiempo que no voy a Cuba, al menos espero poder visitar algunos amigos y no creo que vaya a desestresarme porque realmente este trabajo no me estresa, no contigo. (le pasó la mano por la pierna)
Victoria: (puso su mano sobre la de él) realmente deseo que te vaya bien, que disfrutes el viaje y que pues no te olvides de mi vestido de novia no?
César: (ríe) no habrá un minuto en que deje de pensar en ti, a pesar de la compañía que llevo.
Victoria se sorprende por lo que dijo, ella deseaba preguntarle pero no se atrevía a tocarle el tema.
César: no es lo que quieres saber? (en tono tranquilo)  Ella sigue en silencio
César: voy a viajar con Vivian, está muy ilusionada con el viaje, me mandaron 2 pasajes y bueno, no he dejado de ser esposo... (por fin voltea la mirada hacia ella)... aún.


Siguen rodando, van comentando las escenas, comentando sus encuentros, hablan también de la situación del país al ver las calles del centro por la noche, empiezan a cantar algunas canciones de la radio lo peor posible para burlarse de ellos mismos, se detienen en un semáforo y ambos aprovechan para darse otro beso, esta vez fue ella quien se acercó a César, terminaron el beso y él siguió conduciendo, pero ella se quedó abrazada a él, acariciaba y besaba sus mejillas, entrelazó su mano izquierda con la derecha de él y siguieron así hasta llegar al estacionamiento del restaurante.

++++ Estacionamiento Los Girasoles 10:00pm ++++

Él estaciona y apaga el carro, la mira y se acerca a ella cauteloso mirando hacia fuera, la besa.
Victoria: listo para ser mi compañero otra vez? (burlándose)
César le responde con una sonrisa, luego baja y le abre la puerta a ella, casi todos habían llegado.

Cecilia: (se acerca a ellos) Victoria, me llamó tu marido apenas me subí al coche, estaba yendo para el canal a buscarte, dice que tu celular está apagado y bueno le dije que veníamos para acá y que luego yo te llevaba a tu casa. Victoria no se sorprendió ni se asustó, por el contrario lo tomó muy tranquila y César hizo como que no escuchó nada.

Por fin estaban todos juntos en el estacionamiento y se dirigieron a la entrada donde fueron muy bien recibidos y de inmediato les buscaron la mejor ubicación, la gente que se encontraba ahí, que no era mucha, les regaló un aplauso apenas los vieron entrar y les daban frases de aliento y felicitaciones. Todo el grupo respondía agradecido por tan inesperado recibimiento.
Llegaron a su mesa y mientras decidían o mejor dicho peleaban por los lugares, llegó alguien que no estaba invitado pero que no molestó con su presencia, al menos eso se creía, Omar.

Omar: buenas noches. (sonriendo a todo el grupo que aún se encontraba de pie)
Todo lo saludaron amenamente, él se acercó a Victoria y le dio un corto beso en aquellos labios que lo último que habían probado era un beso de César. Todo fue tan rápido que no daba tiempo de incomodarse, se sentaron rápidamente, Omar a lado de su esposa y César frente a ella.

Cecilia: es la primera vez que vengo a este restaurante, qué lindo es.
Jacqueline: la comida es exquisita y la atención estupenda.
Ana Martin: pero la cuenta espantosa!
Todos ríen ante el comentario, Omar abrazaba a Victoria que a la vez evadía la mirada de César, que a la vez se encontraba en medio de Eduardo y Ana Martin tratando de conversar lo más relajado posible. El dueño del local, se acerca a saludarlos y les obsequia una botella de vino. Así empieza la gran cena de esa gran noche.

Ya todos se encuentran comiendo distintos platillos y hablando entretenidamente.
Margarita Isabel: yo no sé ustedes pero para mí esta carne está riquísima.
René: deliciosa, y con el hambre que yo traía me sabe mejor aún
Ana Martín: oye René es verdad que te invitaron para una entrevista con Jaime Bayli?
René: oye si, me llamó hace unos días y me invitó, pero aún no hemos concretado fecha.
César: él me hizo una entrevista hace algunos años, muy divertida por cierto, pero hay que tener mucho cuidado con sus preguntas.
Cecilia: es verdad, ese señor es tremendo!
Victoria: yo también recuerdo que me entrevistó hace varios años, pero conmigo se portó muy caballero.
Jacqueline: es que él es un caballero, pero hace unas preguntas! Yo recuerdo que vi un programa donde estaba Itati Cantoral y de pronto la entrevista estaba un poco aburrida y entonces le pregunta a Itati, cuándo fue la última vez y hora en que hiciste el amor

Todos ríen a grandes carcajadas.
Eduardo: (aún riéndose) si, yo también vi esa entrevista.
Margarita Isabel: en serio le preguntó eso, ay pobre!
César: (tratando de bromear) y tú Ana, cuándo fue la última vez que...?
Todos vuelven a reír.
Ana: eso a ti que te importa eh!
Jacqueline: por favor Cesarito esas preguntas pueden herir muchas susceptibilidades.
René: (que estaba a lado de ella) pero se han visto la cara que tiene todos! Apuesto que todos están recordando esa última vez.

Él no estaba equivocado, todos tenían en su mente la última noche que habían hecho el amor, Omar buscaba con una sonrisa la mirada de complicidad con Vicky, pero ella sólo se ocupaba de sonreír con los demás buscando también la mirada de complicidad con César, pues para ella, ésa había sido la última vez. Sin embargo, algo la angustió en ese momento, y era el que César pensara que ella había estado con su esposo, y a la vez se preguntaba si eso le molestaría, y por supuesto que ella se preguntó si él había estado con su esposa. En fin, la situación empezaba a ponerse tensa.  Siguen ordenando vinos y conversando de todo.

Margarita: hay algo que les voy a contar aunque Salvador me suplicó que no lo hiciera, y seguro que ahorita me mata, miren cómo me hace señas (ríe)
Salvador: oye no es necesario que cuentes eso
Margarita: si lo haré, ahí te va mi venganza por no haberme dado a MÍ el papel de La Madrastra. (el grupo entero ríe entretenido) saben qué tiene en el carro este señor?
Todos estaban muertos de la intriga.
Margarita: fíjense que está leyendo un libro, y adivinen qué libro?
Entre risas sigue la intriga.
Margarita: El Manual del Perfecto Infiel
Evidentemente todos estallan en risas y empiezan a hacerle burlas.
Salvador: ya va que no es lo que piensan, un amigo me lo mandó
Nadie le cree y siguen las burlas.
Cecilia: pero francamente que ustedes todos son iguales, pero yo creí que era algo natural en ellos la infidelidad pero ahora resulta que estudian para eso!
Eduardo: (sale en defensa de los hombres) óyeme tampoco tampoco eh! Además habemos algunos que todavía somos fieles, verdad César?

César también había reído y habría querido darle un sincero SI, pero sólo atinó a reír.

René: bueno ustedes tampoco se hagan las santas, porque las mujeres son iguales o más infieles que los hombres.
Jacqueline: oye claro que no.
Eduardo: ahh no se hagan, es más no nos hagamos los tontos, TODOS los que estamos aquí en algún momento hemos puesto los cuernos o nos lo han puesto.
Ana: yo nunca he puesto los cuernos, ni lo volveré a hacer...
Salvador: la diferencia entre los hombres y las mujeres infieles es que a nosotros nos descubren más rápido
Cecilia: eso es verdad eh, los hombres son más evidentes cuando nos están engañando, pero ustedes muy difícilmente se dan cuenta que nosotras también los estamos cuerneando.

El tema estaba resultando incómodo a Victoria y a César quienes evitaban mirarse y actuaban del modo más natural posible, pero cómo desviaban la conversación que tenía tan entretenidos a todos? incluso a Omar. Por el momento todo era risas y burlas, algunas anécdotas graciosas o chistes crueles respecto a la infidelidad, hasta que alguien del modo más inocente le clavaría un puñal a Victoria.

Omar: pues tal vez tengan razón, tal vez en algún momento hemos hecho o nos han hecho pasar ese tipo de cosas, pero yo creo que la infidelidad sólo se resume en deslealtad, traición, cobardía y desamor.
Un inesperado silencio invadió la mesa, todos querían escuchar su opinión que había empezado de un modo tan fuerte, él tenía abrazada a Victoria que había muerto con lo que escuchó, César le gritaba tantas cosas en silencio sólo con la mirada.

Omar: DESLEALTAD porque te estás faltando a ti mismo al no serte honesto y hacer una sola cosa que sería lo que realmente quieres, TRAICIÓN porque estás faltando a una promesa a un acuerdo que se supone hay en las parejas que es el del respeto y la sinceridad, COBARDÍA por no ser capaz de pararte frente a tu pareja mirarle a la cara y decirle sabes qué, me enamoré de otra persona creo que lo nuestro debe terminar y DESAMOR porque definitivamente quien engaña no ama...

Ni los actores ganadores al Oscar habrían podido disimular tanta incomodidad, tanto miedo, tanta vergüenza, pero ellos lo hicieron, Victoria estaba llorando y gritando por dentro, César quería hacer algo para ayudarla, él sabía que ella se estaba sintiendo mal.

Margarita: yo estoy de acuerdo contigo Omar, ay Victoria qué suerte tuviste con este hombre eh!
Omar: (le agradeció la frase con una sonrisa) para mí esa es la verdad, cuando uno ama a una persona no existe nadie más, cuando amas deseas, cuando amas comprendes, cuando amas te entregas, pero sobre todo, cuando amas respetas...

Ese comentario empeoró la situación de Victoria, que seguía con el brazo de su esposo a su alrededor y con la mirada de los ojos verdes frente a ella...

César: puede que tengas razón Omar, pero yo tengo una posición algo distinta (estaba decidido a disminuir la carga de Vicky, todo el grupo le prestó atención) lo que tú acabas de decir realmente es lo correcto, es lo que todas las personas deberíamos hacer, sería ideal que todos pensáramos como tú, pero lamentablemente somos humanos y los humanos se equivocan. (Consiguió no sólo la atención absoluta sino el silencio de todo el grupo) a la vida le encanta jugar con nosotros y nos pone pruebas, nos hace vivir experiencias en las que muchas veces no hacemos lo correcto, tal vez son las circunstancias pero siempre cometemos errores y por eso este es un mundo, sino fuera así sería un paraíso. (los hombres lo miraban identificándose con su comentario y las mujeres sorprendidas) y repito, lamentablemente siempre nos equivocamos y creo que todos en algún momento de nuestras vidas hemos hecho sufrir, hemos dañado a la gente que se quiere y que nos quieren y eso no significa que seamos malas personas, significa que somos humanos (mira a todos, con su copa de vino en la mano y luego fija su mirada en Victoria otra vez) es cierto que el engaño duele, es cierto que la mentira hace daño, pero quien no sabe mentir no sabe lo que es la verdad... Salud!

Todos habían quedado embelesados con aquel discurso, Victoria lo miraba agradecida por el mensaje, se sentía un poco aliviada pero no menos culpable y no menos incómoda.

Ana: es que yo me voy a comer a besos a este galán! (y le da muchos besos en la mejilla) totalmente de acuerdo contigo.
Salvador: yo creo que ambos tienen razón, es cierto que la vida es tan loca!
Cecilia: si la vida es complicada, pero lo que Omar dijo es verdad, cuando uno ama no ve a otra persona.
Eduardo: si, pero aveces aún amando pasan cosas que no nos damos cuenta del mal que estamos haciendo, tú lo dijiste César (mirándolo) cometemos errores.
Margarita: es cierto siempre cometemos errores, pero cuando nos enamoramos de verdad, no se puede mirar a otro.
René: ay ustedes las mujeres siempre extremistas, Dios dijo compartir!

Omar y César permanecían callados, riendo entre ellos. Había otra invitada que daría su punto de vista y que terminaría de atormentar a Victoria.

Jacqueline: No sé si sean mis años o tal vez porque me ha tocado vivir distintas experiencias amorosas, (miró a César y a Omar), ambos tienen razón, pero hay algo que se ha convertido en mí verdad y es que un hombre puede ser a su esposa sin dejar de amarla, porque los hombres saben separar el amor del sexo, en cambio cuando una mujer le es infiel a su esposo es porque definitivamente ya no lo ama, ya que las mujeres siempre... (miró a Ana, Cecilia, Margarita y Victoria, luego a los hombres y levantó su copa de vino) ...las mujeres siempre hacemos el amor; Salud!

A pesar de la intensidad de la conversación y lo delicado del tema, la cena seguía divertida, todos reían.

Eduardo: oye pero hay alguien que aún no nos ha dicho qué piensa, sólo se ha dedicado a reír y piensa que puede escapar, Victoria, tú qué opinas a todo esto? Con quién estás de acuerdo, con lo dijo Omar o con lo que dijo César?

Cómo poder plasmar en letras lo que Victoria y César estaban sintiendo en esos momentos, cómo poder describirles lo que estaban experimentando física y emocionalmente, cómo seguir con esta historia donde las fuertes emociones no sólo afectan a los personajes sino también a quienes la leen y sobre todo a quien la escribe...

++++ 2 horas después, entrada de la casa de César ++++

La cena había terminado con muy buen ánimo, hubo otros temas por supuesto, más risas y más comentarios, cada uno tomó su coche y se despidieron, a César lo habían despedido de manera especial deseándole muy buen viaje, Victoria no fue la excepción, le dio un abrazo y un beso en la mejilla.

César entró al garaje de su casa, todo el camino había ido recordando lo dicho en la cena, no se quitaba de la cabeza la mirada de Victoria; toma su chaqueta que iba en el asiento de a lado, abre la guantera para sacar sus objetos personales que estaban acompañados de una misteriosa cajita, él la toma y la abre, lo que encuentra lo sorprende: era un zarcillo (arete, pendiente) de Victoria convertido en llavero, una nota estaba ahí que por supuesto lo sorprendió aún más: PARA QUE ME LLEVES, INEVITABLEMENTE, DONDE QUIERA QUE VAYAS...