균형의 전설

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La vida en el bosque remonta sus orígenes con los grandes dadores de vida, El padre sol, la Diosa Luna y la madre tierra; cada uno de ellos bondadosos y llenos de alevosía crearon a las creaturas que cuidarían del bosque, pero cuando la vida de aq...

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La vida en el bosque remonta sus orígenes con los grandes dadores de vida, El padre sol, la Diosa Luna y la madre tierra; cada uno de ellos bondadosos y llenos de alevosía crearon a las creaturas que cuidarían del bosque, pero cuando la vida de aquellos seres comenzó, la lucha por la supremacía del poder se apoderó de sus instintos.

Fue necesario crear a un guardián que fuera capaz de mantener el equilibrio en todo el bosque, un ser capaz de volar sobre las vastas extensión de tierra, absorbiendo la magia oscura y manteniendo las almas manchadas de pecados en el inframundo.

Fue así como El sol creó desde sus entrañas a su hijo predilecto, un ave que asemejaba estar envuelto en llamas, con unos profundos ojos negros que brillaban intensamente bajo el manto de la noche. Dicha creatura estaba condenada a una vida longeva, pero a la hora de su muerte renacería hasta el fin de los tiempos.

Todo era perfecto en aquel bosque protegido por el ave en llamas, su vida ya había pasado por más de siete siglos y el equilibro se mantenía en perfecto estado.

Pero cuando el verano azotó con poder en la tierra, el ave encontró a la única criatura en el mundo que logró cautivar su corazón, jamás se creyó capaz de sentir algo tan intenso, algo tan ajeno pero a la vez tan increíblemente maravilloso.

Parado en sus dos pies sobre el pasto, se acercó con cautela a uno de los proclamados hijos de la luna, su cabello negro caía delicadamente sobre su frente y su expresión tan confundida le pareció adorable.

Jamás había hablado con nadie en su larga vida ¿podría hacerlo?

— Hola, nunca te había visto por aquí ¿Cómo te llamas? — su voz tan melodiosa como la de las sirenas se quedó grabada en su memoria.

Esa tarde de verano comenzó una historia de amor que desafió hasta lo imposible, tanto que el fruto de ese amor fue gestado en el vientre del hijo de la luna con tanto amor y cariño como le fue posible.

Nunca se imaginaron lo que significaría el nuevo bebé en la vida del bosque.

— Hijo mío, tú tiempo en este mundo ha llegado a su fin. Tu hijo será bendecido con el don del ave celestial y mantendrá la vida en el bosque. — era una vacío, era un hueco lleno de nada pero a la vez todo.

A veces era difícil de explicar, pero las respuestas suelen ser más sencillas de lo que esperamos. Así que con el corazón tan pesado, pero al mismo tiempo lleno de algo que calentaba su alma, el gran guardián acepto su cruda realidad.

— No me arrepiento de nada padre, solo desearía poder haberlos cuidado por más tiempo. —

— Yo lo sé hijo, lo harás a mi lado. —

Él asintió y su destino fue sellado y el día que bebé tomó su primer respiro, la majestuosa ave pereció en el tiempo, dejando a sus dos tesoros a merced de un mundo donde el equilibro se veía al borde del colapso en la ausencia del guardián y las malas semillas germinaban rápidamente atentando contra la vida de millones.

Desafortunadamente el mal estaba tomando fuerza con rapidez, La Paz se quebrantó y el equilibrio fue masacrado por los hijos de los dioses que con pena contemplaban la sangre ser derramada.

El pequeño sucesor y su padre gestante fueron alcanzados por esa maldad que oscura se escurría por las entrañas de la tierra ¿Qué habrá pasado con aquellos seres de luz que estaban destinados a proteger el bosque?

¿Realmente el equilibrio se había roto para siempre?

4. Sin instinto [술레이]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora