Señorita

♡ Capítulo XlV ♡

Dos semanas después...

Maddison

Me sentía triste, como si algo dentro de mi ardiera en llamas, nunca experimente esta sensación y es horrible. Quería llorar, pues a pesar de que el estaba ebrio aquella noche, el estaba siendo sincero conmigo y eso fue lo peor. Ahora ni siquiera podré mirarle a los ojos. Aún así tuve la fuerza de voluntad suficiente para levantarme y arreglar mis cosas para el primer día de entrenamiento en el club, tome mi mochila y metí mis taquetes, rodilleras y demás cosas que necesitaría para hoy. Arregle mi cabello en una coleta alta y puse una diadema elástica para detener los cabellos que estaban más pequeños. Clara ya estaba enterada, pero no quería qué los chicos se enteraran así que salí con el mayor cuidado posible, pero mis intentos fueron en vano.

"- !Hey¡, Maddison a ¿dónde vas tan temprano? aún no hay nadie despierto. - la voz de Erick me aturdió y yo sonreí tratando de inventarme algo rápido.

"- Oh pues, iré a correr, ¡si! Tengo mucho sin ir y necesito estar en forma. - esa fue la peor mentira que pude hacer en toda mi vida.

"- ¿Eh... irás a correr con ese bolso? - parecía divertido, yo rodeé los ojos y me rendí.

"- Iré a unas prácticas, es lo único que te puedo decir, por favor te pido que no digas absolutamente nada. - estaba por irme cuando el me tomo de la muñeca y me miró desafiante.

"- ¿Que me darás a cambio de mi silencio? - su pregunta me agarró de sorpresa pero respondí;

"- ¿Que es lo que quieres? - me miró pensativo y luego sonrió.

"- ¡Un chocolate! - yo reí algo confundida pero asentí.

"- Está bien, pero no grites. Ahora ya me tengo que ir porqué se me hará tarde."

"- Nos vemos más tarde, ¡suerte Maddi!.

Salí de casa y pedí al chófer qué me llevará al club. Puse mis audífonos y los conecte a mi teléfono. Mientras esperaba llegar a mi destinatario.

[...]

Joel

Mientras me vestía pensaba, cosas que jamás me imaginé qué estuviera sintiendo. Recuerdo sus últimas palabras de hace dos semanas por la noche, sus labios sabor a menta por el dentifrico. Su habitación, su cara...ella parecía preocupada por mi. Desde hace semanas qué he estado temiendo a esto, sentir, sensaciones en todo mi cuerpo, mi corazón latente a todo lo que da solo pensando en ella. Me sentía frustrado y confundido, nunca nadie me a hecho sentirlo, pues siempre mantengo mis ideas a tope, Maddison Moree me está afectando de una manera drástica, y por loco que parezca me gusta y también lo odió. Dos toques en la puerta fueron suficientes para salir disparado con la mínima esperanza de qué fuera ella. Una vez más me equivoqué.

"- Joel, tenemos qué hablar. - la voz de clara es dura y mi semblante está tenso, la dejo pasar y cierro la puerta. - Se qué a estado pasando algo entre tu y Maddison, y quiero que me digas."

"- Nunca hubo algo entre nosotros y dudo qué lo haya ahora. - mis propias palabras calaron en mi contra y me quemaban.

"- ¿Quieres hablarlo?."

- Estoy bien Clara, no te preocupes. No es nada.

- ¿Estás seguro?

- Si, ahora sí me disculpas. Iré un rato al parque del vecindario, no me tardo lo prometo. - salgo lo antes posible de ahí y me encamino al antes mencionado lugar.