Fueron momentos desastrosos en el reino por un par de meses, luego de la traición y muerte tanto del rey Edmund como de sus tres confianzas, las cosas no se tomaron a la ligera. La caballería tenía el ojo puesto en cualquier persona que entrase al castillo, todo comenzó a ponerse tenso y firme.
—¡Flynn! —Gritó la rubia, pues lleva cinco minutos buscando al pequeño y no da señales.
Han pasado 2 años, y el pequeño ya tiene 7 años y pese a que ha llevado bastante bien el hecho de haber quedado ciego aún tiene noches pesadas en las que hubiera preferido morir que no volver a ver nada nunca más.
Aun así ha sabido manejar su ceguera como algo válido, sacó una maña interesante, pues encontró que estando descalzo podría desarrollar un mejor sentido. Aunque su madre confía en él, a veces le intriga el hecho de pasar todo el día sin usar zapatos.
Los mejores amigos tuvieron discusiones que los distanciaron por un largo tiempo, no se hablaban ni se miraban de reojo. Eugene había llegado hasta el límite de correrlo del castillo para no tener que verle nunca más, porque su rostro le recordaba aquella fatídica noche.
Por otro lado, el pelinegro ignoraba cada movimiento del castaño, pues sabía que aun hay algo que los une y es su amistad de años, él cree que los mejores amigos no tendrían porque separarse tan de repente. Sobre todo, tuvo un bajón emocional enorme cuando notó que Eugene no estuvo a su lado al momento de la muerte de su padre y tíos.
De todas formas, Flynn es lo que lo mantiene en pie.
—Rapunzel ¿Está todo bien? —Se acercó Cass a ella.
—¿Has visto a Flynn? Desde la mañana se fue a caminar al jardín, pero ya lo revisé y no está ahí —Dijo algo preocupada la rubia—. Sé que puede cuidarse solo, pero no estoy cómoda con la idea de que esté ahí afuera solo.
—Tranquila, ya le diré al capitán que movilice tropas para buscarlo.
La pelinegra le sonrió.
—Gracias Cassandra.
**
Hay cosas mejores que estar dentro del castillo, un lugar que obviamente ya todo el mundo conoce, sobre todo el pequeño niño Flynn. Caminó un momento por los jardines, pero le hartó la idea de caminar por el mismo lugar, así que optó por salir al reino y conocer más de lo que alguna vez llegó a ver.
Es extraño, su oído y tacto se agudizó muchísimo, sentía las vibraciones de las cosas y sabía donde encontrarlas. Podía encontrarlas con mucha facilidad, él aun recuerda los colores o tamaños de las cosas, pero le frustra mucho.
—No puedo creer que estoy en las afueras de corona —Dijo el estando en el puente que divide corona con el mundo—. Esto es tan extraño, mi madre alguna vez me trajo aquí.
Siguió caminando, de pronto los sonidos se volvías ajenos a él, ya sólo puede sentir que está en el bosque, hay grandes árboles y se escucha el cantar de los pájaros, se siente una brisa fresca y relajante que te hace sentir maravillosamente tranquilo.
Aquel niño sólo tenía unas ganas enormes de recorrer el mundo, aun cuando estuviese ciego. Todo marcha en silencio, el niño sólo se mantiene con sus pensamientos, pero cualquier ruido es capaz de ponerlo atento y listo para lo que se venga. A excepción de que algo venga del cielo, ahí es un poco difícil.
—¿Quién anda ahí? —Gritó el niño cuando sintió cerca una vibración proveniente de detrás de él. Sabía que son dos personas, una es muy pequeña y la otra demasiado grande. Nadie respondió aún, pero pudo sentir un movimiento más veloz, queriendo tumbarlo por detrás, pero el niño sólo se movió a un lado evadiendo el primer contacto.
![](https://img.wattpad.com/cover/213635799-288-k62360.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Día de los no enamorados (Enredados Otra vez, la serie)
FanfictionLa siguiente historia estará basado en un reto relacionado con el día del amor y la amistad que próximamente viene, pero con una temática totalmente distinta. Básicamente es escribir tragedia amorosa y todo lo contrario con el día. Lo escribiré sob...