Encuentros Furtivos

Volveremos Una y Otra vez.

Completamente exhausto se tiró al lado de su amante en las mismas condiciones, beso sus labios y suspiro mientras este se acariciaba el abultado vientre.

- ¿Qué sucede? ¿Te sientes mal?

- No, todo está bien solo que cuando estas cerca él siempre está inquieto.

-No deberíamos tener sexo hasta que nazca, es incómodo para ti y supongo...

-No podemos estar juntos y ahora ni siquiera puedo tener sexo contigo cuando nos encontramos, no dije que me sintiera incomodo o enfermo. – Odiaba que Steve lo tratara con un inútil, estaba embarazado no invalido. Se levantó de la cama con gran dificultad, pero rechazó la ayuda que Steve inmediatamente le ofreció.

- ¿Por qué estas enojado? Solo intento facilitarte las cosas.

-No lo hagas, no lo necesito estoy aquí solo todo el tiempo, puedo valerme por mí mismo. Tomare un baño ¡No me sigas!

-Acabamos de hacerlo, deberías estar feliz. - No entendía que había hecho mal para enfurecer a su compañero de tal manera. Steve se sentó en la cama y esperó un tiempo prudente para acorralar a Tony en la ducha.

Cuando entro en el cuarto de baño podía distinguir la silueta embarazada de su compañero luchando por limpiar el semen de entre sus piernas sentado en un pequeño banco de madera, maldiciendo y lloriqueando al mismo tiempo.

-Te dije que no me siguieras.

- Lo siento cariño, pero no entiendo porque estas tan frustrado, al grado de llorar. - entró en la ducha y se arrodillo en el tapete antiderrapante, tomando la esponja y el jabón, comenzando a lavar la entrepierna de Tony, continuando por sus piernas hasta llegar a sus pies, dejando algunos besos repartidos sobre su hinchado vientre antes de alcanzar sus labios. – Vas a decirme que te hizo enojar.

-No me trates como si fuera a romperme. Es frustrante que me toques con miedo, no me tocas como antes, no tocas los lugares correctos.

- ¿Todo es por el sexo? – indagó conteniendo su risa.

- Si ¿Por qué más? Afortunadamente eres bueno en todo, aunque siendo honesto esta ocasión con tus obligaciones maritales estas dando mucho que desear. – declaró acariciando el semi erecto pene de Steve con su húmedo pie.

- Lo siento si te deje insatisfecho, pero la última vez no era tan grande y me da pánico pensar que podría hacerle daño.

- Mi plenitud sexual no te importa. - se ofendió. -Te lo dije el medico dijo que estaba bien solo que no hiciéramos cosas extrañas.

-Banner no es un médico de verdad.

-El medico de verdad lo dijo...

-Cuando nazca te compensare por cada vez que quedaste insatisfecho por mis temores...

-Estaré hambriento así que espero estés listo para entonces, si no, quiero el divorcio Capitán Rogers.

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-¿Por qué tienes esa sonrisa tan estúpida Steve?

- Por nada solo recordaba. - Steve volvió a su computadora donde escribía el reporte de alguno de sus casos, ya habían pasado algunas semanas de su último encuentro con Tony y la fecha de nacimiento de su hijo estaba muy cerca, por su parte había conseguido tomar todas sus vacaciones juntas para cuando el momento llegara.

-Capitán Rogers que bueno que lo encuentro.

-Agente Fury. - Saludo Steve.

-Solo quería informarle que encontramos el paradero de Stark y hoy por la noche iremos por él. Debido a su situación con el señor Stark tiene prohibido abandonar la base, cualquier acción de insubordinación será considerada como traición.