La sonrisa de su rostro no lo abandonaba en ningún momento. Desde que sus labios recibieron el contacto de los labios de JiMin, estaba por las nubes. Realmente eran cálidos, dulces y tan deliciosos que eran innegables volver a sentirlos, no tenía idea como es que no lo había besado antes si tan solo un no tan pequeño roce lo volvió loco.
Actualmente el castaño se encontraba en busca de JiMin. Habían acordado por teléfono encontrarse en la cafetería del centro de Incheon. Nada irrelevante porque JiMin no quería que nadie se enterara, aún, de que estaban saliendo como amigos, aunque los suyos no lo sabían y además de que tenía una cita, tenía la noción de que ellos estuviesen pensando todo de él, pero menos que estuviese saliendo como si fuese una relación seria.
Dejando de lado aquello, JungKook se encontraba ya dentro de la cafetería al parecer JiMin no había llegado puntualmente como había dicho.
Se sentó en una de las mesas que daban una vista hermosa hacia afuera. En ese instante quiso mandarle un mensaje al pelirrubio del por qué aún no llegaba pero fue interrumpido por la camarera.
—Bienvenido a Sweet Café. ¿Qué desea pedir?—su voz acaramelada de la camarera le demostraba su coquetería mientras le veía con una sonrisa ladina.
—Estoy esperando por alguien y si no es una molestia podría esper—ante aquello JungKook no pudo continuar ya que una voz suave y levemente agitada lo había interrumpido.
—Kookie no es necesario—casi la velocidad de la luz el castaño dirige su mirada desde donde provenía aquella bella voz, simplemente sonrío, era JiMin quien estaba parado con apariencia de que había corrido una maratón. Y extrañamente el como lo había llamado, Kookie, fusionando con la vos suave era totalmente cálido y precioso. —Ya estoy aquí.
Puede que no lo había notado pero viendo mejor a JiMin, se veía fantástico, tan hermoso que dolía, debía decirlo es que estaría celoso si alguien lo viera, solamente él lo quería para sus propios ojos.La camarera tomó un gran suspiro mientras asentía esperando por el pedido, ligeramente había pensado que el castaño no estaba en un ligue o en pareja hasta que después se demostró lo contrario.
— ¿Qué vas a pedir Minnie?—ignorando por completo el cómo lo llamó tan deliberadamente que se sintió natural.
—Huh, pediré un submarino—pensando con qué acompañaría su desayuno hizo un mohín pequeño que el castaño no notó—con un pastel de cerezas y duraznos, por favor.
Increíblemente el pedido cedió después de que JungKook simplemente ordenara un café sin ningún aperitivo. Increíblemente como el castaño limpió sus labios con la misma servilleta donde estaban escritos números con un pequeño mensaje “llámame”, predecible, por la camarera pero no por JungKook.
El desayuno ya posaba en la mesa, JungKook tan solo sorbía su café de a pocos mientras miraba embelesado al más pequeño quien daba pequeños sorbos a lo que había pedido. El ambiente pasaba a segundo plano, porque nada más se quedaba en sí, mirando al pelirrubio beber de su desayuno.—Eso suena increíble, luego ¿Qué hiciste?—hablaba el más pequeño soltando unas cuantas risas bajas.
—Bueno después de haber dejado el ramo de flores en la mesa de la profesora, pues fui a mi lugar para ver su reacción—cambiando el tema rápidamente en su punto de vista, habló—lo más divertido fue que ella inmediatamente se fue con los ojos brillosos de la emoción a la oficina del director.
— ¿Y qué pasó con el entrenador?—preguntó expectante por la suma intriga que le causaba el relato del joven más alto.
—Pues al ver como todos los días la veía detrás del director, se desquito con nosotros haciéndonos entrenar toda la jodida tarde.
—Ay, pobre de ti Kook—solemnemente seguía riendo del anécdota del peli-castaño.
Ante aquella sonrisa JungKook casi muere, y era necesario, por favor que llamaran a una ambulancia. Era tan iluminante que brillaba a su alrededor, cuando sonreía sus ojos desparecían en dos finas líneas mostrando nuevamente su bella dentadura, sospechosamente había notado que tenía un diente chueco, incluso aquello lo veía adorable. No supo cómo explicarlo, pero sus mejillas voluminosas que se encontraban sonrosadas, aumentaba más lo adorable con su cabellera rubia.
Por un momento un pensó que había evocado un recuerdo, un recuerdo tal como el presente y nuevamente JungKook lo ignoró.—Esta situación me recuerda a BaekHyung, pero él siempre estuvo atrás de mi primo Chan y ahora están juntos, realmente son una linda pareja.
Inevitablemente el nombre se le hizo familiar, o es que simplemente tenía un parecido a otro, no supo bien.
Después de tanta charla, estaban fuera de la cafetería, caminando tranquilamente en la calle.
—Oye Minnie—el apodo ya no era muy relevante prácticamente regularmente le llamaba así.
JiMin lo miró pidiendo que continúe.
—Sé que no nos conocemos lo bastante pero me gustaría seguir saliendo contigo.Y lo había dicho, no quería parecer desesperado pero ese encuentro le había encantado. Ante lo dicho simplemente JiMin dio a lucir su hermosa sonrisa.
—Claro Kookie—al instante su teléfono suena en tono de llamada el cual el más bajo contesta con un tranquilo Hola. Lo ve fruncir el ceño levemente para después calmarlo con un pequeña sonrisa sincera. Debía ser algún amigo, trato de convencerse el mismo. Cuando la llamada había concluido Jimin dirige su mirada hacia el peli-castaño.—Pasó algo con ShowNu así que voy por él, nos vemos luego Kookie.
Sorprendiéndole nuevamente JungKook recibió un beso en la mejilla. Tocó su pómulo con la punta de sus dedos y suspiró viéndolo desaparecer de su vista.— ¿Qué te sucede JungKook?—y a sí mismo se preguntó.
Jejejej Hola!!
Me extrañaron ??
L0 sÉ, lo sé...
Ya que... vieron el MV
Tremendo arte tipo omaigad...
Really?? Ah el pxto YouTube hizo de las suyas.. perdonen pero aún sigo enojada.. prro..
En fin espero que disfruten el capi..
Hasta luego byeee
Hongji♡
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For love [ KookMin ]
FanfictionNo hay corazones rotos, nada de aquello, intentando meterse entre las piernas de aquel rubio, acude a llamar su atención. Pero, cuando las cosas se ponen más intensas ya no es lo mismo. Jeon JungKook, un playboy de primera, las cosas cambian de de...