¿Me crees..? <YoonKook>

<8; Esto> Día 1.

Estaba en mi casa taladrandome la cabeza, a las 3 de la mañana, había dormido cinco horas, pero luego había despertado de la nada, no pude volver a dormir porque aquello que había dicho JungKook rondaba por mis pensamientos desde que había despertado, ahora me encontraba mirando la luna por el balcón de mi sala de relajación, sentado en mi cómodo sofá.

¿Qué persona sería la que perseguía a JungKook..?

Tendría que ir a ver las cámaras públicas de aquella calle que estaba a unas cuadras del departamento de Kookie.., JungKook, y tendría que verlas, él me dijo que aquello había pasado tres días antes de lo del Aeropuerto. Pero desde éste día, cuatro.

Me levanté decidido a hacerlo, pero al instante recordé que era de madrugada, y quedaría como algún loco que tocaba la puerta del pequeño edificio de seguridad vecinal. No, él no iría por nada, solo perdería su tiempo.

Sin tener nada qué hacer, aburrido, sin sueño, aunque eso era algo primordial para él, y no lo tenía, por una clara razón, se dirigió al interior de la habitación dejando las puertas de vidrio, transparentes, abiertas, mientras se disponía a buscar una libreta en uno de los cajones de su escritorio, que estaba en el lado izquierdo —Si lo ves desde el balcón—  ya que la mitad de la habitación era un estudio, donde se disponía a hacer su trabajo como encargado de interrogatorios, y el otro lado, claramente era para el uso de el nombre de la habitación, esa era su sala de relajación, cuando quería hacerlo, pero su estudio también.

Encontró un lápicero y una libreta, se sentó un momento, comenzó a escribir, siendo iluminado por la luna y estrellas, que hacían el paso de su leve claridad por las grandes puertas de su balcón.

« Caso de Jeon JungKook:

Día 0*:
·Departamento del inocente, cámaras del lugar:
–WonHo.
–Un sujeto sospechoso no identificado a la vista; le hizo un seguimiento hace 3 días antes del encuentro de la droga en la maleta de JungKook.

Día 1*:
·Revisión de la cámara vecinal:

... »

Fué lo que escribió para luego dejar la libreta en el escritorio y levantarse, caminó hasta la gran alfombra marrón de el otro lado de la habitación, se recostó allí, rodeado por muchos cojines y almohadas, las juntó y se aferró a ellas, un poco más relajado por plasmar sus descubrimientos en la libreta.

Recostado en la alfombra, abrazando unas cuantas almohadas y cojines, miró la luna, luna creciente, a través de las puertas de su balcón.

Y mientras el sueño regresaba, deseó encontrar a aquel sujeto, y que JungKook deje de estar pasando por esto.

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