Kaminari era un chico alegre, al que no le importaba los comentarios ofensivos hacia el. Hasta que un dia, de repente, sus pensamientos cambiaron así cambiando su forma de ver el mundo.
. Los personajes no me pertenecen si no a Kohei Horikoshi cread...
El tiempo pasó volando, como aves sincronizadas, yéndose a otra parte de el mundo.
Shinso se encontraba junto a la cama de Kaminari, sentado en una silla, en completo silencio.
Se había quedado dormido.
"Esto es un sueño"
Shinso estaba parado en medio de la nada. Todo era de color blanco brillante, como reflectores de un recital, haciendote quedar ciego si te quedabas viéndolos.
Sintió un escalofrío en la espalda, no, en todo su cuerpo. Lo que veía no era real, o al menos eso parecía.
— ¿Kaminari?
Esa palabra salió de repente en su boca al ver una figura tan reconocible, en frente suyo a unos pocos metros de distancia.
Era él. No lo podía creer.
Bueno, si lo creía, después de todo lo estaba viendo pero, su sorpresa fue demasiado grande.
Su corazón latía con fuerza y sus manos temblaban. Ver aquella figura, aquél cabello rubio luminoso entre los brillos de el lugar. Realmente amó ese momento.
— ¡¡Kaminari!! — gritó con todas sus fuerzas.
No le importaba si era real o no, su gran deseo era ir a abrazarlo. Abrazarlo tan fuerte que hasta lo dejaría sin respiración -sacando lo violento y esas cosas- tomar su mano y apretarlas con las suyas. Acariciar su suave pelo como si fuera un gatito bebé. Sonreirle, hablarle.
Disculparse, por todo. Por no poder ayudarlo como habia prometido, por no poder darle la atención que merecía. Por haberlo dejado de lado.
Por no decirle lo mucho que lo quería y apreciaba.
— ¡KAMINARI! — tocó su pecho, arrugando la remera que tenía puesta. Sentía un gran golpe en su corazón.
¿Emoción talvez? No sabía que era exactamente.
Empezó a dar pasos y mas pasos, hasta el punto de ponerse a correr, sin importar que.
"Por favor, que esto sea real"
Las emociones y sentimiento se mezclaban entre sí en su interior.
— Shinso...
Al escuchar su nombre , paró de correr hasta el. Fue como inmediato.
— Ka-Kaminari — estaba a casi dos o tres metros frente a el.
Kaminari le estaba dando la espalda. Este parecía mirar el suelo. En sus manos se podía sentir un leve movimiento. Parecían que estaban temblando.
Shinso se dio cuenta y trató de acercarse mas al el, pero no puedo, no podía moverse.
— ¿Kaminari?
— ¿Porqué me pasa esto? Ni suicidarme me sale bien..'
Shinso sintió un gran nudo en su garganta y pecho. Como si no pudiera respirar. Podía escuchar un pequeño zumbido en su cabeza.
— Kamin....
— Estoy cansado, no puedo ni sentirme mal ¿Sabes?
— Ya basta, no digas eso...
De pronto, Shinso sintió como si el piso vibrara. Bajo sus pies, logró ver unas grietas, luego en las paredes y el techo. Todo se estaba derrumbando.
— DENKI.
Este no respondió, seguía con la vista al suelo.
Una grieta se empezó a crear, separandolos a los dos.
Shinso quiso agarrar a Kaminari, pero algo lo detuvo.
Un lazo negro. Tan oscuro como una noche sin estrellas.
En unos segundo, se dio cuenta que habian mas de uno, y que estaban tomandolo entre otras extremidades. Los brazos, las piernas, todo tomado por este lazo, incluso el cuello.
Empezaron a tirarlo para atras con una gran fuerza, que estaba seguro que ni Midoriya podía parar.
Shinso trataba de caminar hacia delante con todas sus fuerzas. Sentía como si le quisieran arrancar esas partes del cuerpo.
Al no tener un piso para poder empujarse, Shinso cayó ante los lazos oscuros.
Cuando esto sucedía, logró ver al rubio girar su cabeza hacía el.
— Gracias Hitoshi..... — con una sonrisa, Kaminari le dedicó aquellas palabras.
Shinso extendió sus brazos hacía el, tratando de poder alcanzarlo. Sus ojos tiraba lágrimas a no poder. Sentía que no respiraba.
Caía lentamente al vacío, sin poder siquiera depedirse, o saber que estaba pasando exactamente.
"Denki por favor...
...sobrevive"
— ¡AH!
Por fin había despertado de ese maldito sueño.
Su cuerpo temblaba y sudaba como si hubiera terminado de un entrenamiento recién hecho.
Su corazón latía rápidamente como un gran motor, y su respiración tan agitada como si hubiera corrido todo un maratón.
Se suponía que había sido un sueño pero, se sentía tan....real.
Shinso, dio la vuelta rápidamente para ver, en donde estaba y trataba de recordar que demonios estaba haciendo. No paraba de temblar hasta que, vio su rostro.
Vio a Kaminari acostado en la camilla de la enfermería, con los ojos cerrados, como si fuera una princesa durmiente.
Al darse cuanta que nada de lo ocurrido fue real, lágrimas volvieron a salir de sus ojos, pero esta vez eran reales.
Tapó su rostro con sus dos manos, estaba avergonzado y asustado. Quería verlo despierto, quería poder ver sus dos grandes y brillantes ojos abiertos.
Quería verlo despierto de una vez por todas.
— ¿Sh-Shinso?
Entre llantos y lágrimas tapadas logró escuchar una voz tan suave como un ave.
Esté siguió su vista hacia aquella gran voz.
— ¿Que está pasando?
Era la voz.
SU voz.
La voz de aquella persona que tanto deseaba ver.
Este al verlo, secó sus lagrimas, inutilmente ya que no dejaban de caer.
— Hola... — con un tono tranquilo, y con una gran sonrisa — ...Kaminari.
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PUM CAPITULO CORTO A CASI A LAS 3:00 AM SOY UNA CAPA.
AAAAH ESTOY LLORANDO POR FIN LLEGAMOS A ESTA PARTE DE LA HISTORIA.
Ufff, okey, lo sé. El capitulo es MUY corto y lo siento pero.... DE ESO SE IBA A TRATAR OSEA, solo quería escribir aquel hermoso momento ah ;-; pero como sea. GRACIAS POR LEER
