Me enamoré de mi tío

Capitulo 1

Estoy duchándome mientras canto "yo perreo sola" de Bad bunny si señores me gusta ese cafre. Estoy muy a gusto cantando hasta que escucho que están tocando la puerta de mi baño. Siempre interrumpen mis conciertos, ugh.

- QUEEEEE?- grito mientras cierro el grifo.

- Mi niña ya la cena está lista, tus padres y tu hermana te están esperando hace media hora- dice Martha al lado de la puerta. Cierto no les he dicho quien es Martha, es la que se encarga de cocinar y limpiar esta enorme casa, la compadezco. Muchos le dicen sirvienta pero para mi esa no es la palabra adecuada. Martha se ganó mi corazón desde que llegue a esta casa, es un encanto y su comida ni se diga.

Decido envolverme en una toalla y salir a mi habitación y ahí esta Martha con la mano en la cintura esperando por mi, se ve un poco molesta.

- Media hora? Si me metí a duchar hace 5 minutos- digo con sarcasmo se que llevo más de media hora ahí adentro es inevitable no hacer conciertos.

- Déjese de sarcasmos y vístase que la comida se le enfría, te espero abajo.- dice mientras camina hacia la puerta para abandonar mi habitación.

-Bajo en cinco minutos.- le digo mientras sale de mi habitación. Voy a mi enorme armario y decido ponerme unos shorts, una camisa sencilla y unas sandalias. Estoy en mi casa, que pensaron que me iba a maquillar y a peinarme? Nah eso no es lo mío.

Mi habitación es enorme tiene una cama king que me pierdo en ella si lo se es muy exagerado, las sabanas son blancas y el cuarto es blanco, gris y un poco de rosa, en una esquina tengo un librero y un sillón para sentarme en mi tiempo libre a leer. Tiene un balcón que tiene vista para el jardín de la casa, tiene una enorme piscina, una mesa para los domingos de barbacoa, un jacuzzi que tanto amo.

Decido salir de mi habitación, recorro el enorme pasillo donde están las demás habitaciones, son demasiadas creo que 8 sin contar la de mis padres que esta al final del pasillo y literalmente es mucho más grande que mi casa en Bronx. Bajo las escaleras y me dirijo al comedor. Nadie se ha percatado de mi presencia. Todos están conversando, Mamá está sentado al lado de Ric, al lado de el está Charlotte en un instante pongo los ojos en blanco, me cae mal. Cuando sigo mirando veo a Lily usando su teléfono mientras finge que está prestando atención a la conversación aburrida y a su lado está Emily mi hermana mayor. Esperen! Es Em. No puedo creer lo que mis ojos ven oh por Dios va un año que no la veo.

- EM - grito emocionada si lo se soy muy gritona. Todos se asustan por el grito pero decido ignorarlos y corro a donde Emily, ella se para de su silla y muy sonriente me abre sus brazos para que la abrace. Algo que no dudo en hacer.

- Violetaaa, que hermosa estás- dice mi hermana sonriendo mientras nos separamos.

- No es para tanto, tu estás mucho más hermosa- le digo sonriendo ella es un poco mas alta que yo, la verdad es que todo el mundo es mas alto que yo. Tiene el cabello hasta la cintura, tiene el cabello marrón, ojos marrones como los de papá, es trigueña, es una copia de mi padre y es llenita que eso no tiene nada que ver porque sigue siendo hermosa.

Y ahí al lado de ella está el gran Oliver esperándome con los brazos abiertos y con una enorme sonrisa. Oliver es alto, guapo, pelo ondulado color marrón, con una barba decente y es cuatro ojos. Oliver se gradúa este año de leyes, se que será un gran abogado.

- Me vas a dejar con los brazos abiertos, tita? - el sabe cuanto odio que me diga así pero estoy tan emocionada que no le hago caso. Rápido le doy un abrazo y le digo lo mucho que los extrañe.

- Bueno, creo ya hubo muchos abrazos por hoy. Siéntese ya - dijo la bruja Charlotte un poco molesta. Y como yo amo molestarla más. Opto por decir