One Shots- Queen/BoRhap Cast

6. Joe Mazzello

El sofá

Golpeteaste suavemente el pecho de Joe, tarareando "She Loves You" por los Beatles. Joe los adoraba, lo cual era genial porque a ti tampoco te importaba escucharlos.

Joe tenía los ojos cerrados y no podías saber exactamente si estaba durmiendo o no. Los domingos perezosos eran muy necesarios en su vida, después de terminar con Bohemian Rhapsody, volvía a casa exhausto. Pasar su primer día libre contigo escuchando música fue una manera perfecta de comenzar los largos meses que pronto seguirían.

Joe y tú estaban acostados en el sofá, tú prácticamente encima de él. Tenías un brazo asegurado alrededor de tu cintura, el otro estaba detrás de su cabeza, su barba estaba presente y tú extendiste la mano para rascarlo ligeramente, ganándote una suave sonrisa somnolienta de Joe debajo de ti.

El brazo alrededor de tu cintura se había movido y su mano ahora estaba debajo de tu camisa. Comenzó a dibujar círculos sobre la piel suave, algunas grandes, otras pequeñas. La pequeña acción envió escalofríos corriendo por tu columna vertebral.

"Tus manos están demasiado frías para que me toques allí", dijiste en voz baja, asegurándote de no ser demasiado ruidoso e interrumpir la quietud de este momento. Joe simplemente se rio un poco y tiró de ti para que ahora estuvieras directamente encima de él, ambos brazos ahora envueltos alrededor de tu cintura.

Sus ojos habían estado cerrados todo este tiempo. Sabías que estaba a punto de quedarse dormido, así que comenzaste a jugar con su cabello. Amaba cuando jugabas con su cabello. Fue una acción suave y entrañable que había llegado a amar. Lo girarías entre tus dedos y lo peinarías hacia atrás revolviendo los extremos para darle volumen. No le importaba lo desordenado que estaba su cabello porque se sentía bien y eso es todo lo que importa.

Tarareó cuando levantaste la mano para cepillar un par de cabellos que se le habían pegado a la frente. Inclinó la cabeza hacia tus manos y disfrutó cada momento. "Me consientes demasiado, _______".

"Bueno, si no lo hiciera, te quejarías, no lo hago lo suficiente". No tuvo que abrir los ojos para ver tu sonrisa, pero lo hizo de todos modos. Dios, amaba esa sonrisa, de hecho, es lo primero de ti que lo enamoró. Tu sonrisa había hecho maravillas y estaba seguro de que podría terminar con las guerras. Una vez, había tenido una semana horrible y se notaba durante sus chats de video.

"Todo se va a cagar, bebé. Parece que no puedo recordar ninguna de mis líneas, estoy arruinando las líneas de base", se pasó los dedos por el cabello en derrota, "no sé qué hacer". Frunció el ceño. Deseabas poder hacer todo lo posible para hacerlo feliz. Caminarías por el infierno para mantener a ese hombre sonriendo.

Intentaste ofrecer consejos, pero para ti, solo estabas tratando de juntar palabras con un sonido filosófico para que se sintiera mejor. Al final de tu discurso, miraste hacia abajo y te reíste un poco. "Voy a ser honesta, cariño. No recuerdo la mitad de lo que dije", esto causó que ambos sonrieran, "simplemente me estoy volviendo loca para decir cosas que con suerte aliviarán tu mente".

"Lo sé, _______ Creo que todo se mezcló después de 'tal vez solo dejen de fastidiar y toquen bien las notas'". Su risa inundó tus oídos mientras se sonrojaba un poco. Él sabía que incluso si no entendías completamente por lo que estaba pasando, siempre estarías allí para consolarlo de la mejor manera posible. Siempre estabas allí para apoyarlo.

"¿Por qué me miras así?" Le preguntaste. tus dedos dejaron su cabello y trataste de levantarte para verlo mejor.

"Eres tan hermosa", dijo en voz baja, sonreíste y te inclinaste para plantar un beso en sus labios, fue un beso suave, pero tenía mucha pasión. Podías sentir el amor que Joe tenía por ti y viceversa.

Te apartaste para recostar tu cabeza sobre su pecho. Su corazón latía con calma. Tus dedos comenzaron a tocar su pecho nuevamente, esta vez yendo al ritmo de su corazón. Su mano volvió a trazar círculos, pero esta vez incorporó otras formas e incluso palabras. 'Amor' era uno que usaba mucho cuando hacía esto, 'música' era otra que le encantaba hacer, la forma en que la 's' envió escalofríos por tu columna lo hizo reír cada vez.

Deseó que pudieras quedarte así para siempre. Parecía que ustedes dos fueron los únicos que existieran. El mundo todavía estaba alrededor de ustedes dos. "Te amo, Joe" susurraste.

"No tanto como amo el cartón Ben", te susurro.

Resoplaste y golpeaste su pecho ligeramente. "Eres un imbécil". Él solo te abrazó más fuerte y te dio un beso en la sien, una sonrisa evidente.

"Estoy bromeando, bebé, lo sabes".

"Lo que sea ..." no podías ocultar la sonrisa en tu rostro sin importar cuánto lo intentaras. Joe trajo una mano para acariciar tu mejilla.

"Te amo más, _______".