11.

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Toda la tarde es un martirio, así que a las siete me meto a bañar y me arreglo para ir a tu casa. Sé que dije que no iba a ir, sé qué dije que era peligroso pero es mejor salir, que estar solo con mis pensamientos.

Tu casa no es muy lejos pero aun así me voy en la bicicleta que no uso hace siglos. Cuando llego a tu casa estoy todo sudado, saludo a algunas personas que conozco y están sentadas en el jardín. En el momento en que nuestras miradas se cruzan el mundo parece ir más lento y todo da vueltas cuando me sonríes.

——¡Harry, pensé que no ibas a venir! –me abrazas con entusiasmo y huelo alcohol en ti. Me rió por eso, porque jamás has tomado.

Últimamente ya nada es igual, ambos hacemos cosas que nunca hicimos...

Ya no somos unos niños, Louis.

——Son las ocho quince y estas ebrio –Me separo a cuestas de ti y de pronto ya tengo a Kenzie colgada de mi cuello. Dejas de sonreír y bebes de tu cerveza.

——Solo llevo dos, y no sabes cuántas más planeo tomar. –me guiñas un ojo y me derrito.

Lo admito, Lou. Me gustas.

——¿Cómo estas Harry, te sientes mejor? –Kenzie llama mi atención mientras se pega más a mí. No la culpo, supongo que después de ayer tiene ese derecho, porque yo lo tuve.

——Sí, gracias. –ella sonríe y me besa. ——¿Todo bien con Louis? ¡Muero de pena por lo que vio!

Muerde su labio como provocativa pero te miro de reojo y te atrapo mirándonos. Es muy tarde para que finjas así que me sonríes y me alzas el dedo pulgar.

——Sí, no te preocupes... ya se le olvidó. –la tranquilizo. Ella da brinquitos y me jala a una pista improvisada.

——Vamos a bailar. –me animas.

No me enojo con Kenzie, decido seguirle la corriente solo porque te veo con Emma. Luces feliz, así que intento serlo también, o al menos parecerlo.

No había más de veinte personas pero a las diez y media solo quedamos Emma, tú y yo. Todavía somos muy jóvenes para que nuestros padres nos den permiso de quedarnos hasta tarde pero no ha salido nada mal.

Estas con Emma, despidiéndose en un rincón.

Veo como besas a Emma como si de ello dependiera tu vida.

Desvío la mirada hacia otra parte mientras mi mente comienza imaginar que soy yo besándola, pero  todo se siente incorrecto, y no porque este besando a la novia de mi mejor amigo, sino porque deseo que en vez de ser Emma a quién estoy besando, seas tú, Louis.

We're not friends. |Larry Stylinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora