¡¡𝙽𝚘 𝙼𝚎 𝙼𝚒𝚛𝚎𝚜!!

🩸 3 🩸

La alarma comenzó a sonar por toda la instalación.
El scp 682 rompió la contención al estar bajo experimentos para tratar de destruirlo.
Se escuchaban disparos, gritos, rugidos y explosiones. El lagarto enfurecido pasaba rápidamente por los pasillos de la fundación, destruyendo paredes, devorando personas, peleando contra los soldados.

096 se encontraba llorando en la esquina de su habitación como siempre. Empezó a escuchar unos fuerte pasos acercándose a su ubicación.
096 se alarmó y levantó la cabeza.
El piso empezó a temblar, para después escuchar un fuerte estruendo.

El lagarto había roto la pared de su celda en un intento de escapar. Este se levantó y miró de reojo al Tímido, se veía el enojo en sus muchos ojos de reptil.
096 entró en pánico. Se levantó, y sin pensarlo se echó a correr a toda velocidad. El lagarto simplemente lo ignoró y siguio su camino hacia la libertad.
096 seguía corriendo por los destrozados pasillos de la instalación, ignorando a todo humano que se le cruzara. Él solo quería estar lejos de esa horrenda bestia.

Luego de haber corrido un buen rato, llegó a una nueva zona para él.
Se veía un lugar tranquilo y callado, tenía paredes blancas y limpias, al igual que el suelo y los escritorios que se podían encontrar. Era un lugar muy agradable para 096.
Bajó un poco la velocidad y empezó a admirar con más detenimiento el sitió. Encontró un rincón muy acogedor, se sentó en esa esquina del cuarto y ahí se quedó. Solo y tranquilo.
Aunque esa tranquilidad se vería afectada por los lejanos rugidos de 682. El Tímido cerró los ojos y trató de tranquilizarse.
Le llegaron recuerdos de esa feroz pelea que tuvo con aquel lagarto gigante, la cuál duró varios días. Días donde recibía dolor, y más dolor por parte de ese cocodrilo mutante.
096 empezó a temblar, y poco después, sus lágrimas empezaron a brotar de sus ojos rojizos.

-No quiero ver a esa cosa denuevo... Me asusta... -Pensó Shy guy mientras su llanto se hacía más fuerte.

Al instante, 096 escuchó unos gritos de pánico cercanos a él. Luego, se escuchó un crujido y los gritos se detuvieron por completo.
096 sentía cierta curiosidad, pero sobretodo miedo. Así que siguió estando en su esquina, llorando desconsoladamente.
Derrepente, la puerta de la habitación se abrió. Se empezó a escuchar el familiar sonido de rocas rozando con el piso. 096 levantó la vista asustado.
Esa estatua rara se encontraba delante de él, sonriendole.

-*gasp* ¡Amigo! ¡Finalmente te veo denuevo! -Gritó animado la estatua mientras una sonrisa tenebrosa se le formaba en el rostro.

-¿E-Eh...? ¿Cómo que... Amigo? -preguntó curioso el Tímido con aún lágrimas brotando de sus ojos.

-¿Qué? ¿Acaso no somos amigos? -Le dijo mientras su carita se ponía triste.

-No... Apenas nos conocimos hace unos días... -Le respondió con un tono serio mientras giraba su cabeza para evitar el contacto visual.

-Ohh... Pero, dime! ¿Cómo puedo volverme tu amigo? -Preguntó ansiosa la extraña estatua.

Shy guy no pudo responder.
El sonido de la compuerta abriéndose hizo que callará. Observó y vio bien cómo cinco guardias entraron corriendo a la sala.
Todos ellos se alarmaron al encontrarse con la famosa estatua rompe cuellos.
La estatua, al sentir las fijas miradas de esos sujetos, se quedó totalmente quieta. El Tímido, confundido aún por ese comportamiento de la estatua, se escondió detrás de un estante para evitar que los guardias lo vean.

-Wow... Muy bien, muchachos. No le quiten los ojos de encima a esa cosa. Llamen a otro grupo para que traigan una jaula para contenerlo! -Ordenó uno de los guardias, parecía ser el comandante.

El Tímido, por curiosidad, asomó su cabeza para ver qué es lo qué estaban haciendo esos hombres.
Tres de los guardias notaron cómo algo se movía a lo lejos. Los tres miraron directamente a los ojos de aquel hombre pálido.
Los guardias se sobresaltaron y al instante le avisaron a su comandante sobre la presencia del otro SCP.

Shy guy se empezó a sentir raro. La mirada de esos tipo le hizo sentir muy incomodo, pero al mismo tiempo, le hizo sentir rabia, mucha rabia.
096 se tapó la cara con sus dos grandes manos y trató de calmarse cómo pudo. Sabía lo que se venía.

Todo los hombres esperaron a retroceder sin quitar la mirada de 173.

-Aquí el equipo *****, encontramos al SCP 096 junto al 173. Entró en su estado emocional por la mirada de algunos de mis guardias, estén alertas! -El comandante prendió su radio y habló para advertirle a los demás de la situación.

096 soltó un fuerte grito de desesperación. Se destapó su rostro, dejando ver su expresión de enfado y dolor.
Gritó una vez más y se abalanzó hacia uno de los guardias. Con su boca le desgarró el cuello sin ninguna complicación, matándolo al instante.
Los otros guardias entraron en pánico. Abrieron fuego hacia la criatura.

096 ni se inmutó por la ráfaga de balas que le dañaban el cuerpo. Saltó sobre otro de los guardias. Agarró su cabeza con fuerza y lo decapito.
Con el cuerpo inerte del soldado, el Tímido lo lanzó con fuerza hacia dos guardias más, haciendo que se cayeran con todo al suelo.
096 se giró hacia el último guardia. Este soltó un grito desgarrador al notar que ese monstruo iba a por él. Soltó su arma y se echó a correr.
Pero el Tímido lo alcanzó en menos de un segundo, le clavó sus filosas garras en su espalda y lo mató.

096 recobró la compostura y dejó de gritar. Miró al suelo, notando la sangre y cadáveres que yacían en él.
Los últimos dos soldados aprovecharon que el Tímido estaba en shock, se sacaron el cuerpo de su compañero de encima y se colocaron a correr del lugar.

173 finalmente se podía mover. Estaba completamente impresionado. Se acercó lentamente a su compañero SCP.

-¿A-Amigo... Cómo hiciste eso..? -Le dijo la estatua mientras observaba fijamente a los cadáveres y la sangre en el suelo.

-Y-Yo... -Tartamudeo el Tímido, mirando con miedo sus manos ensangrentadas.

-Fue... ¡Fue increíble! ¡Los mataste a TODOS en un santiamén! ¡¡Ni yo soy capaz de hacer eso!! -Gritaba emocionado la estatua, recorría alegremente toda la habitación ensangrentada alrededor del Tímido.

-...¿Por qué dices eso..? ¡Los maté..! Y-Yo no quería matarlos... -Dijo con voz quebrada el Tímido, unas lágrimas empezaron a brotar de sus ojos.

-Oh... ¡Pero ellos son malos! Nos iban a encerrar de nuevo... Se lo merecían, no crees? -La estatua se detuvo y miró fijamente a su compañero, su expresión mostraba tristeza.

-P-pero... -El llanto de 096 se hizo mucho más fuerte. Se tapó su rostro con sus manos.

-¡H-Hey! Tranquilo amigo. -Dijo con evidente preocupación la estatua, se acercó hasta quedar al lado de su compañero Tímido.

Al instante, se escuchó un fuerte rugido, uno que le resultó muy familiar a 096.
El tímido levantó la cabeza asustado y empezó a mirar a todos lados.

-¿Uh? ¿Te encuentras bien, amigo? -Preguntó la Estatua mucho más preocupada.

-...E-ese rugido... ¡Él está cerca! -Dijo el Tímido con un tono desesperado.

-¿Él? A quién te refie-! -La estatua no pudo terminar su frase.

El suelo comenzó a temblar y se escucho otra vez el mismo rugido de antes.
Ante la Estatua y el Tímido, se mostró un gran reptil con aspecto de cocodrilo.
Era el SCP-682.