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Me sentia tan comodo que realmente no quería levantarme, pude sentir como los demás ya estaban despiertos y empezaban a arreglar todo para irnos.

-Tsukishima! Yamaguchi! Levantense de una buena vez! -Daichi nos llamó pero ninguno de los dos le hicimos caso.

-De Yamaguchi me lo esperaba pero no creí que Tsukishima seria del tipo que odia levantarse- Asahi tenia razón, Tsukki puede tener muchas cualidades pero levantarse temprano no era una de ellas, almenos no frecuentemente.

-Buenos días- tomando toda la fuerza de voluntad que tenía alfin decidí salir del la comodidad del futón, aunque aún estaba medio dormido.

-Buenos días Yamaguchi, podrias levantar a Tsukishima porfavor- asentí ante la orden que me dió nuestro vice-capitán.

Primero me puse de pié y me estire un poco para que se me quitara el sueño que aún tenia. Me acerqué a Tsukki que estaba cubriendose la cabeza con la almohada seguramente por todo el alboroto que hacian los demás mientras empacaban.

-Tsukki vamos debes levantarte- traté de empujarlo un poco pero solo logré que se acomodara mejor- Tsukki! Ya no es momento de dormir- esta vez intenté quitarle la almohada para que me escuchara mejor.

-Callate Yamaguchi- Bueno almenos estaba despierto eso es algo.

-Perdón Tsukki- en realidad no lamentaba nada pero ya se me hizo involuntario.

Después de un par de empujones de mi parte logré que se levantara, aunque aún parecia estar en la fase de inicio pues simplemente se quedó quieto seguramente tratando de recordar como funciona un ser humano.

-mis lentes...-fué lo primero que dijo y empezó a buscarlos a un lado del futon donde se suponia debian estar.
Al ver que no los encontraba empezé a buscarlos yo tambien pero no los veia por ninguna parte. Iba a preguntarle a los sempais si los habian visto hasta que escuche una pequeña risa proveniente del N° 10.

Me acerqué a Hinata para preguntarle si sabia algo pero logré ver una pequeña y graciosa escena.

-¡Kageyama adivina quien soy!- tenia los lentes de Tsukki puestos y aplasto un poco su cabello para que no se vea tan alborotado- Tsk me creo mejor que los demás y creo que todos son unos idiotas- lo habia dicho con una cara seria pero algo arrogante.

Ví como Kageyama intentaba aguantar la risa lo cual era poco usual en él aunque no lo culpo, a mí tambien me hizo gracia la "imitacion" de Hinata.

-con que ahí estaban -Tsukki estaba detrás de Hinata y le quitó los lentes y se los puso para luego mirarlo desde arriba haciendo que el más bajo levante la mirada pues estaba de espaldas a él- en primera no tomes mis cosas y segunda si tratas de imitarme deberias estar a la altura primero no crees?- ahí estaba el Tsukki de siempre con sus comentarios un poco (muy) arrogantes.

-Tsukishima maldito- depronto el pelinaranja se puso a la ofensiva intentando golpear a Tsukki pero él lo detuvo facilmente con una mano para que no lo alcanzara.

- Oye rey tu esposa esta fastidiosa, ¿acaso no le das suficiente amor?- se que fué una broma inocente pero no pude evitar malpensar esa pregunta, Dios Tadashi eres un pervertido.

- ¡¿De qué hablas idiota?!- ahora Kageyama se veia agresivo, si esto no paraba terminaria mal.

-Ya basta ustedes tres, mejor terminen de empacar o se nos hará tarde- las palabras de Asahi calmaron el ambiente y eso bastó para que los tres se separaran.

Tsukki y yo habiamos empacado todo anoche así que nos fuimos primero a ducharnos.
Cuando regresamos casi no habia nadie y decidimos salir a caminar un poco ya que aún teniamos tiempo, nos iriamos después del desayuno que era a las 7:30 y aún faltaba como media hora.

¿Yamaguchi es un Fudanshi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora