"Siempre ha sido así"

1.8K 156 34
                                    

(Hola mushasheeees (*UU*)

Esta es la cuarta parte de este pequeño relato, ya saben para no estar confundiéndonos, usaré ~ para T/N y - para FatGum SOLO cuando tengan una conversación seguida, además de anexar un narrador para ciertos detalles.

Espero lo disfruten~ (*'*))

- - - - - -

¿Almorzamos juntos?

Sonreíste gentilmente, cuando eran estudiantes él fue de los pocos que se te acercó sabiendo tu situación y siempre te preguntaba lo mismo: Oye ________, ¿almorzamos juntos?

~Sabes que me encanta ir a comer contigo~ dijiste mientras tomabas su brazo y lo mirabas sutilmente sonriendo ~Vamos a comer takoyaki como en los viejos tiempo...Pero hagamos algo, ¿te parece?~

El héroe ladeó un poco la cabeza y arqueó una de sus cejas -Hummm...¿qué es lo que quieres hacer?-

~Hehe...~ te pusiste frente a él y comenzaste a correr hacia el restaurante ~¡El que llegue al último paga la comida!~

FatGum:

¿Qué? _________...ella... ¿Qué?

-¡TanTam! ¡Espera!- le grité mientras corría tras ella.

No ha cambiado sin duda. Ella siempre ha sido alegre y optimista sin importar que las cosas puedan estar bien o en la peor situación posible. Siempre he pensado que esa es su mayor fortaleza y eso es lo que me enamoró completamente de ella...

(Flashback)

Cuando eras pequeña no tenías a donde ir, solo tenías un pequeño lugar en un parque. Te la habías arreglado para poder sobrevivir tu sola y para ser una niñita de unos 5 años era bastante confuso vivir así. No recordabas donde estaban tus papás o siquiera si tenías unos, tus únicos compañeros eran un pulpo azulado de peluche y una cobija beige. Sin embargo, te gustaba imaginar que el parque entero era tu hogar, estaba un poco descuidado pero la gente casi no iba a ese lugar, así que era todo tuyo.

Todos los días te las arreglabas para conseguir aunque fuera un poco de dinero, la gente anciana siempre te daba pan o un jugo, los adultos se compadecían de ti y te daban un poco de comida, si sobraba la guardabas para el día siguiente. Jugabas con otros niños a veces, pero no hablabas mucho, nadie te había enseñado propiamente y solo conocías ciertas palabras como hola, adiós, gracias, por favor, _________, dinero, comida, frío, caliente y pulpo.

Una noche escuchaste ruidos en tu parque que te despertaron. Tomaste tu peluche y fuiste a ver que es lo que estaba pasando. Pudiste observar que dos hombres se estaban peleando usando sus quirks.

-¡No te escaparás maldito! ¡Me las vas a pagar todas!- dijo uno de los hombres mientras que golpeaba al otro. Pudiste notar que este hombre tenía cara de un búfalo o algo parecido, mientras que el otro hombre solo parecía tener cristales salientes de su cuerpo. El hombre de los cristales trataba de esquivar los ataques del hombre búfalo, pero difícilmente podía lograrlo, estaba protegiendo algo y no podía usar completamente su quirk.

Estabas empezando a asustarte porque el hombre de los cristales cayó al suelo, empezó a sangrar y sabías que eso era malo. Sentiste lagrimas caer por tus ojos mientras apretabas a tu peluche completamente petrificada. ~B...ba-bashta...~

Los dos hombres te escucharon y te voltearon a ver. El hombre búfalo resopló y se rió mientras caminaba hacia ti -¡Vete de aquí mocosa o terminarás igual que este maldito bastar...! ¿huh?-

- N-no te atrevas a tocar...a-a esa n-niña....- dijo el hombre de los cristales mientras se levantaba un poco. - S-si la tocas...j-juro que te m-mataré...-

-¡HA! ¡Si que eres un idiota, Akiyama! ¿Enserio te vas a arriesgar por una mocosa que ni siquiera conoces?- dijo el hombre búfalo y volteó al hombre de los cristales. Mientras te daba la espalda, te acercaste corriendo y trataste de sostener una de sus piernas, intentando tirarlo para que dejara de lastimar al hombre de los cristales. ~¡Mmmmmh! ¡B-bashta!~

El hombre se rió a carcajadas, una pequeña niña como tu no podría hacerle daño ni de chiste. No dudó en patear tu pequeño cuerpo lejos, lo cual te hizo desmayar un poco. Tu vista se nublaba un poco pero sin duda viste como el hombre búfalo tomó al hombre de los cristales del cuello. Lo iba a matar sin duda alguna, pero se veía desesperado por tu bien.

Sentiste algo recorriendo tu cuerpo, pudiste ver unos hilos en el cuerpo del hombre búfalo y escuchabas algo en tu interior que te decía que podías dejarlo inmóvil, solo tenías que pensarlo. ~B.....bashta...~ susurraste mientras alzabas tu pequeña manita y la cerraste de golpe.

Escuchaste un grito desgarrador proveniente del hombre búfalo. Soltó de golpe al hombre de los cristales, haciéndolo caer al suelo. No dudó ni un solo segundo en moverse con todas las fuerzas que tenía hacia donde estabas tu para revisar tus heridas.

- N-niña...r-resiste, niña...- sentiste sus delicadas manos recorrer tu rostro y sonreíste un poco débil. Abriste un poco tus ojitos y el sonrío aliviado. Te cargó con cuidado y te llevó al hospital.

Cuando despertaste en el hospital lo viste sentado a tu lado. Estaba dormido pero tomando tu manita, como si no quisiera separarse de ti. Sonreíste y tocaste su cabello. Esto hizo que el hombre se despertara y te mirara sonriendo. -¡N-niñita! ¿Estas bien? No debiste meterte en esa palea, ¡pudiste haber muerto! Kenta...ese maldi...-

~ G-gashias...papá~ lo interrumpiste sonriendo. Estabas feliz de que el se hubiera quedado así contigo, aunque no era tu padre biológico tu entendías que un padre era aquel hombre adulto que cuida a los niños pequeños de todo peligro y para ti él había sido tu papá.

Te miró y sonrió algo sorprendido. - Hah...supongo que te lo debo, ¿eh, niñita?-

~________~ le dijiste sonriendo y tomaste su mano adorablemente ~______, papá y pulpo...jun...tos~

-Hahahaha...claro que si pequeña, te lo prometo...-

(Fin del flashback)

~¡Hahaha! ¡Te gané!~ dijiste mientras veías como FatGum corría atrás de ti ~Te toca invitar el almuerzo, FatGum.

- Eres una tramposa, TanTam...¡corriste antes que yo!- dijo el héroe cruzado de brazos y mirándote frunciendo el ceño.

~Hehehe...supongo que aún conservo ciertas mañas de mi papá. Te lo compensaré, la próxima comida o cena, yo la preparo completamente para el adorable FatGum, ¿ok? ~

El gran héroe suspiró un poco sonrojado y te volteó a ver de reojo. Se veía como niño pequeño haciendo berrinche, pero también se notaba que quería que lo consintieras. - E-esta bien, pero tiene que ser hoy...v-vamos a tu casa hoy o no hay trato...-

Te sonrojaste un poco y susurraste sonriendo un poco coqueta ~¿Quieres estar solo conmigo en casa, Taishiro?~

FatGum se puso completamente rojo y se tapó la cara para que no pudieras verlo. - ¡T-TU LO PROPUSISTE!-

Te reíste ante su reacción y tomaste su mano. ~Esta bien, a las 8 en mi casa.~ saltaste y besaste su mejilla rápidamente, lo cuál lo desconcertó un poco y te miró. ~ Ahora...¡compra los takoyaki que me muero de hambre!~

- - - - - - -

(Perdón por el capitulo de relleno xdxd

El próximo capítulo voy a centrarme en como trabajan como héroes y cómo es que terminan juntos ( ˘ω˘ )
Cuídense mucho mushashos en esta cuarentena.
¡Nos vemos el próximo capitulo! (>uO) ~ )

Dulce Amor Pt. 1 [FatGum × Fem!reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora