sunshine baby; yoonseok (hiatus)

ʟᴏᴠᴇ;

HOSEOK POV

Escuché que la puerta se abría detrás de mi mientras yo miraba por la ventana, que por suerte no daba a la casa de Yoongi, sino a un árbol gigante que plantó mi abuela mucho tiempo atrás y ahora parecía que sus ramas romperían la ventana en cualquier momento.

Alguien se sentó detrás de mi y acarició mi espalda. Me di la vuelta y mi madre también miraba por la ventana.

─Hola ─la saludé mientras de sentaba junto a ella.

─Veo que ya terminaste tu tarea.

Rayos. Se supone que estaba haciendo tarea.

─Lo siento ─volví a mirar por la ventana─ no me siento con ánimos.

No sé por qué no dije eso desde el principio, sabia que mi mamá siempre lo comprendería.

─Es por Yoongi, ¿verdad?

TAEHYUNG POV

No tenía otra intención esta vez más que ver a Hoseok, ver en que estado se encontraba para saber qué hacer después. No quería precipitarme como la vez pasada que casi lo arruino todo, no, esta vez no será así.

La tensión me estaba matando, la tonta camisa me molestaba y me dolían las mejillas por intentar mantener esta estúpida e inocente sonrisa. ¿Por qué Hoseok aún no bajaba? ¿Por qué se demora tanto?

Me quedé a solas en el comedor frente al padre de Hoseok que me miraba siempre amable y con una sonrisa.

─Discúlpalo, Taehyung, últimamente no han sido días fáciles para Hoseok.

Sonreí aún más intentando parecer comprensivo.

─Esta bien, no se preocupe por favor, lo entiendo.

Es por el tonto de Yoongi, ¿Verdad Hoseok?

No te preocupes, en cuanto estés conmigo ese estorbo no te preocupara más. Me encargaré de eso, mi Hoseokie.

Mientras tanto yo seguiré aquí, sentado escuchando las imbéciles excusas de tu padre, sonriendo silenciosamente y mordiéndome los labios para evitar subir a tu habitación de una vez y hacerte venir conmigo.

Tarda lo que quieras, que yo sabré esperar. Solo no tardes demasiado.

HOSEOK POV

Los adultos siempre subestiman a los adolescentes. Ignoran lo solitarios que se pueden llegar a sentir a veces.

Por suerte para mí, mi madre no era así. No era un adulto convencional la mayoría del tiempo y lo agradecía mucho en momentos como estos.

─¿Qué puedo hacer? —le preguntaba mientras me tiraba en mi cama boca abajo, mirando la ventana vacía de nuevo.

─¿Por qué le das tantas vueltas, Hoseok? ─me respondió acercándose más a mi— ¿Tan malo es intentar hablarle a Yoongi de nuevo?

Lo es.

─Dijo que no quería saber nada más de mi ─la garganta se volvía un nudo que me impedía hablar con claridad— me dijo cosas que me dolieron.