Capítulo 20: Nueva vida

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Después de que todo cavara, Luffy era libre de su pasado, mi madre tuvo una recuperación exitosa, sin embargo, Ace aún tenía ciertas dificultades para recordar quien era.

-¿Cómo te encuentras?- Luffy seguía con nosotras, mi madre salía a caminar por las tardes, luego de estar en reposo, era su manera de recuperarse.

-Mejor, aun no puedo ver a Ace, pero me alegra saber que está bien- Dijo Luffy suspirando.

-Luffy, debes dejar de culparte- Le dije poniendo mi mano sobre la suya.

-Lo sé, pero en verdad no puedo, lo intento, pero, cada que lo veo siento que he fallado- El verlo culpándose por lo que le había pasado a su hermano me hacía sentí algo triste, él no debía soportar toda esa tristeza solo.

-Hiciste lo imposible para poder salvarnos a todos, no puedes soportar esta carga por siempre- Dije de manera comprensiva, quería que el dejara esa carga y fuera libre.

-Lo sé, yo...- Me acerque para darle un beso.

-¿Mejor?- Pregunte con una sonrisa.

-Yo...- Me acerque nuevamente para darle un beso.

-¿Ahora?- Sonreí al verlo igual de sorprendido.

-¿Harás eso hasta que diga que sí?- Sonreí levemente.

-Solo si sigues diciendo no- Dije con una sonrisa pícara.

-En verdad, bueno, creo que pude hacer más- Dijo el suspirando.

-Hiciste de todo para salvarle- Me acerque a él lentamente.

-Robin, ¿Cómo crees que será nuestro futuro?-

-Lo descubriremos juntos- Dije acercándome a él, le di un beso apasionado, poco a poco el ambiente ayudo para entrar en calor, el me despojo de mis ropas mientras yo acariciaba su cuerpo.

Nuestras ropas yacían en el suelo mientras nos besábamos con locura, el recorría mi cuello con leves besos y lamidas, mis manos estaban acariciando su espalda, daba leves gemidos al sentir como el recorría mi cuerpo, me sentía ansiosa. Nuestras miradas se encontraron en un deseo intenso de estar unidos, se puso sobre mi mientras sin dejar de verme sentí como su miembro se aproximaba a mi intimidad.

-Luffy...-

-Robin...-

Cuando él dijo mi nombre sentí como se abría paso dentro de mi, le abracé del cuello mientras el continuaba con su leve embestida, buscando no dañarme, el pacer de sentir su miembro recorriendo las paredes intimas hacia que soltara gemidos lentos y bajos. No pude evitar lanzar gemidos fuertes, después de tanto tiempo en verdad le deseaba, poco a poco aumento el ritmo de sus embestidas no pude contener mi placer y no deseaba hacerlo, sentía cada embestida fuerte acompañada de un gemido mío...

-Te amo, Robin- Dijo Luffy antes de que ambos llegáramos a nuestro clímax, aprete las sabas y Luffy ahogo mi gemido con un beso.

.

Unos meses después...

POV Luffy

-¿Qué querías decirme?- Me habían citado en una cafetería, me había asegurado de que nadie supiera de esta salida.

-Bueno, mas que nada entregarte esto- Me entregaron papeles y fotografías de mi padre y algunas de Ace.

-Nami, ya no quiero saber mas cosas de mi padre- Dije suspirando.

-Lo sé, solo que siento que es bueno que lo tengas, al menos quiero que lo tengas- En ellas venia una historia corta, la historia de Ace y mía.

-Gracias ¿Cómo te encuentras?- Pregunte por Nami, luego de todo lo que paso, al final supe de la carga que ella llevaba,

-Aparte de sola, supongo que bien- Dijo ella riendo.

-¿Como está el?- Pregunte algo preocupado.

-Ambos sabemos que es lo mejor para él, descuida, mi hermana está feliz halla- Dijo ella sonriendo.

-No quiero que la pase mal, esto es todo lo que puedo darte, en verdad lo siento- Le di un papel firmado, Cobre hizo de todo para que lo que me correspondiera llegara a mí, en pocas palabras era casi un hombre millonario, el era como mi banco.

-Luffy, creo que tengo la culpa, algo así iba pasar de tanta locura pasional- Dijo ella sonriendo.

-Solo no quiero volverme mi padre- Dijo con un tono triste.

-Serás mejor, me asegurare de ello- Dijo ella tomando mi mano.

-Cuídate, ambos- Dije levantándome.

-¿Se lo dirás?- Pregunto ella.

-Sera lo único que me llevare a la tumba- Dije despidiéndome de ella, ella tenia ahora una cuenta a su nombre, Cobra hizo un fondo para que ella tuviera lo necesario, ambos, estoy seguro de que ella haría un uso correcto de ello.

Un Amor No Tan ComplicadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora