«Final»

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Jungkook estaba estupefacto.

—Yo no metí esa prenda en el libro– negó de nuevo —te juro que no sé de dónde...– entonces recordó.

Claro, aquella era la ropa interior de encaje que Hoseok le había dicho que era buena idea regalarle a Taehyung. Y recordó también que justo al salir de la librería el primo de Yoongi, Zelo, lo había entretenido un rato conversando de cosas random como si fuesen amigos de toda la vida. Hoseok había estado muy callado todo ese tiempo así que no sospechó nada extraño. Pero que ingenuo era, ahora entendía porque Hoseok se había ofrecido a llevar a envolver el regalo.

—¿Ya recordaste?– Taehyung arrojó la prenda manchada y rota en otra dirección y se acomodó sobre el pecho de Jungkook.

—Ah si, ya recorde–.

***

Taehyung solía odiar el día de san valentin pero debía admitir que ahora que tenía novio todo sonaba mucho mas emocionante.

Había quedado con Jimin y Hoseok para que le ayudaran a hacer un chocolate casero que pudiera regalarle a Jungkook. En realidad él no era muy buen cocinero y menos aun de repostería pero iba con la ilusión de que Jimin pudiera ser de ayuda. En Hoseok no confiaba demasiado pues sabía que éste sólo se había ofrecido a ayudar porque quería andar de glotón lamiendo los restos de chocolate de los platos.

Llegó puntual a la casa de Jimin, en donde se supone que harían todo ya que en su casa había otro glotón. Yeontan solo estaría saltando de un lado a otro tratando de robar trozos de chocolate y eso era algo que no quería.

Al llegar pasó al interior sin llamar a la puerta pues Jimin le había dicho que podía pasar. Ojalá no le hubiera hecho caso, pensó cuando encontró a Yoongi y Jimin casi desnudos sobre la mesa de la cocina prácticamente devorandose la boca.

—No vi nada– murmuró y salió de nuevo, cerrando la puerta tras él.

Estaba acabado. La única opción era llamar a Hoseok y advertirle que tendrían que ir a otra parte pues los tortolitos estaban demasiado ocupados follando en la mesa de la cocina donde ellos planeaban colocar los ingredientes del chocolate.

—Lo tengo solucionado– dijo Hoseok cuando se encontraron en la parada de autobús cerca de la casa de Jimin. —Seokjin es muy buen cocinero, sabe hacer de todo–.

Taehyung lo detuvo cuando éste estaba a punto de llamar al gemelo Kim por teléfono.

—¿Crees que sea buena idea? Ellos no son muy cercanos a nosotros–.

—Creo que será bueno darle un intento– Hoseok se encogió de hombros y llamó a Seokjin.

Resulta que Seokjin no estaba en la ciudad pero Seokjung si. Taehyung tuvo un mal presentimiento cuando le preguntó a Seokjin si su hermano sabía cocinar y solo hubo un extenso silencio. Aquello no pintaba nada bien. Y aún así terminaron en la casa del gemelo en donde un hombre un poco mayor, de buen aspecto y sumamente atractivo los recibió con una sonrisa.

—Deben ser los amigos de Seokjungie, pasen– el desconocido se hizo a un lado para que pasaran.

Hoseok y Taehyung se lanzaron una mirada extrañada y obedecieron.

—¡Oppa, ya está lista la tina del baño!– Seokjung apareció corriendo enfundado en un mandil de cocina color rosa con un corazón rojo en el pecho y nada mas, no llevaba otra prenda además de aquella.

El hombre sonrió mas ampliamente y se acercó para besar la frente del chico con cariño.

—Gracias pequeño, atiende a tus amigos mientras me ducho– pidió con un tono de voz dulce y cálido como si le hablara a un niño.

Seokjung le sonrió con ternura antes de que el hombre desapareciera al final del pasillo, entonces giró hacia Hoseok y Taehyung y toda la ternura se esfumó.

—No puedo creer que hayan llegado a arruinar mi día– se quejó el gemelo, dando la vuelta para caminar hacia la cocina, su redondo trasero quedo al aire ante la vista de los otros dos.

—¿Para que aceptaste que vinieramos entonces?– Hoseok se cruzó de brazos con molestia.

—¡Porque él dijo que debía ser bueno con mis "amigos"!– contestó, apuntando en dirección al baño y bajando la voz con precaución cuando habló demasiado alto. —Debo hacer lo que me pide si es que quiero dinero, él cree que soy un "chico bueno y adorable de gran corazón"–.

Taehyung volvió a intercambiar mirada con Hoseok.

—¿Es tu sugar daddy?– preguntaron al mismo tiempo.

—Obvio– Seokjung rodó los ojos —empecemos con esto, tengo todo listo para hacer los dichosos chocolates–.

—Alto, alto– Hoseok detuvo todo —¿cuánto dinero te da exactamente? Necesito saber si es negocio rentable–.

Taehyung supo que no podía contar con ninguno de aquellos dos cuando los vio empezar a hablar de sitios en Internet para contactar con hombres mayores. Estaba acabado.

***

Jungkook estaba sentado a la mesa en la casa de Taehyung esperando a que éste apareciera. Llevaba un rato metido en la cocina insistiendo en que no se acercara a husmear. Y como todo buen novio, Jungkook obedeció.

—Feliz san Valentín– dijo Taehyung finalmente, apareciendo con una taza llena de leche tibia y un bote de cocoa en polvo. —Chocolate casero hecho por mi– continuó antes de tomar tres cucharadas de la cocoa y echarlas a la leche para luego revolver.

Jungkook rió sonoramente y tomó la taza en sus manos una vez que Taehyung terminó de mezclar, sopló y dio un trago.

—Es perfecto, muchas gracias–.

Taehyung se inclinó para dejar un suave beso sobre los labios de su novio, el beso tenía sabor a chocolate con leche.

—Es el mejor san Valentín de la vida– suspiró tras alejarse un poco de Jungkook.

—Si lo es– estuvo de acuerdo —ahora debes abrir el regalo de mi parte– Jungkook apuntó a la bolsita decorada que aguardaba al centro de la mesa.

—¿Es lencería de nuevo?–.

Jungkook se sonrojó ligeramente y negó.

Taehyung terminó de abrir la bolsita, había una USB en el interior. Observó a Jungkook con duda antes de ir en busca de su laptop para ver de qué se trataba.

Una vez que pudo conectar el pequeño dispositivo, abrió la única carpeta existente con el extraño nombre de "siempre fuiste tú". Taehyung contuvo un poco el aliento cuando una primer fotografía apareció. La recordaba, era cuando eran jóvenes, la primera vez que conoció a Jungkook y alguien decidió fotografiar a todo el grupo de amigos.

Jungkook y Jimin estaban en una orilla y Taehyung hasta la otra pero la mirada de Jungkook estaba sobre éste último y no en su entonces novio. Pasó las fotos lentamente descubriendo que todas eran de ellos y su grupo de amigos durante reuniones o proyectos escolares y en todas ellas la mirada de Jungkook estaba siempre en él, en Taehyung.

Era otra línea del tiempo parecida a la que Jungkook tenía de su madre. Llegó a una foto reciente, de la boda de Yoongi y Jimin, donde los habían obligado a posar para una foto grupal. Taehyung estaba viendo a Jungkook y éste lo veía a él y ambos sonreían. Pasó a la siguiente y era una completamente en negro con una frase escrita en letras blancas; “también para mi fue amor a primera vista, lamento no haberlo notado hasta tanto tiempo después”.

Taehyung cerró la laptop y se mordió el labio inferior con fuerza.

—¿Estás seguro? ¿No estás confundido? Quizás solo lo estas mal inter...–

—Creí que había quedado claro que soy siempre honesto– suspiró Jungkook —nunca te mentiría con algo así–.

Taehyung decidió creerle.

—Quiero escucharlo–.

—También te amo, Kim Taehyung–.

—Eso suena muy bien, mucho mejor de lo que creí–.

El Club de los Ex Novios [KV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora